The Panther Empire

7.2 🐈‍⬛

Las doncellas regresaron cuando salio el emperador pero Jieun no sabia predecir su estado de animo, así que las echo de su habitación. Al final no quería admitir que las palabras del emperador lo habían dejado intranquilo.

Se dejo el cabello suelto y se vistió. Las doncellas habían dejado toda clase de trajes de colores, morados, azules, celestes, verdes pero su corazon tomo el amarillo pollito y se lo coloco junto a una diadema. Esta no era sofisticada solo era un fino hilo dorado con pequeñas hojas de oro.

No había terminado de colocarse sus botines cuando Rae entro con una sonrisa en los labios, muy parecida a la de su padre cuando tenia un plan en mente.

---¡Vamos al río!

No era un pregunta, era una invitación.

Rae tomo su muñeca para que lo acompañará pero Jieun se quedó en su lugar tomando desprevenido a Rae qué se detuvo también para intentar adivinar el estado de animo de Jieun.

---¿Qué es lo que sucede Jieun?

---¿Cómo sabes que sucede algo?--- De nuevo estaba esa maldita conexión qué tenía con el principe, el parecía leerlo como un libro abierto y Jieun también.

---Lo se

Jieun suspiro quería contarle lo que le había dicho su majestad, pero que ganaba con eso.

A el que le importaba si su majestad quería meter concubinas por las noches a la habitación de Rae. Si, su favor se iría a la mierda y quizá sus privilegios pero era algo que tarde o temprano iba a pasar.

---Tu padre quiere vernos, tiene algo importante que decirte.

Rae levantó la mano haciendo de menos las palabras de Jieun y lo jalo de nuevo, pero Jieun se volvió a resistir.

---¡Rae!---Le advirtió pero eso solo logro que lo soltara para observarlo desde una corta distancia.

Esta disfrutando de la belleza de Jieun, vestido con esas suaves telas amarilla y esa diadema con hojas doradas. El olor a mandarinas proveniente de su cabello fue lo siguiente que llegó a su olfato y sonrió con malicia.

Jieun no sabia que era estar todo una mañana en el campo, supervisando los trabajos para desviar el río. Estaba pegajoso, lleno de polvo y acalorado. Jieun pego un grito al percatarse de sus intenciones pero fue demaciado tarde.

El principe heredero invadió el espacio personal y se restregó sin pudor. Como un gatito mojado tratando de secarse, Jieun trato de huir pero una vez ese gatito lo apretaba, no había manera de escapar.

Cuando por fin termino la tortura, Jieun quedo despeinado y oliendo a gatito sucio. Iba a matarlo.

Solo entonces Rae sonrió y volvió a tomar su muñeca.

‐--¡Creo que tu también necesitas un baño!

Rae no espero una respuesta de su parte, simplemente lo arrastro escaleras abajo. Pasando totalmente de largo del camino que llevaba a la sala del trono.

Los guardias intentaron detener su marcha pero Jieun estaba divertido con que su príncipe heredero desobedeciaera las órdenes reales y el no lo iba hacer recapacitar. No después de lo que había sucedido con el emperador y de su amenaza.

Es más su sangre de lobo bullia con la necesidad de promover la desobediencia de Rae y por eso mismo se comenzó a desvestir. Hasta convertirse en un lobo gris de ojos plateados.

Rae negó con la cabeza y comenzó a desvestirse de la misma forma pero sus botas se atoraron en sus pies y cayó.

---Eres patético gatito---le grito Jieun desde la distancia.

---Espera que termine de desvestirme y vamos a ver quien muerde el polvo lobito descarado.

El lobo se río y corrió dejando atrás a un gatito qué no terminaba de  desatar esa cantidad de correas qué le ayudaba a mantener sus botas en su lugar. Por no decir del chaleco de cuero qué protegía las partes vitales de su cuerpo. El no era tan irresponsable como Jieun de preferir la belleza a su seguridad. Después de todo nadie sabía si podía a ver un enemigo de otro imperio vagando por allí, en busca de una oportunidad.

Jieun seguía corriendo hasta que alguien de la nada  se le atravesó en el camino y tuvo que saltar, doblando su pata derecha.

Maldijo por el repentino dolor y regreso dispuesto a darle un buen susto a la persona que se hubiese interpuesto pero jamás espero que una chica de cabellos revueltos y toda sucia, lo estuviera mirando con demasiada impresión. Su rostro  se había puesto pálido.

No por eso se iba a detener y avanzo otro paso pero esa distracción había hecho que Rae lo alcanzara. No lo pensó dos veces, dejo a la chica y volvió a correr al río como si dependiera de ello.

Sin embargo era demasiado tarde, un lobo era más rápido que una pantera, pero las panteras tenían trucos y esa no fue la excepción. Rae dejo el suelo y uso  los troncos de los árboles para tomar impulso y saltar.

Al llegar al río, Jieun se lanzó pero para su mala suerte Rae ya había entrado en el agua. La victoria era de las panteras.

---¡Ahora quien es el patético lobito! ¡Espero que así como eres de hablador cumplas!

Jieun lo miro con la peor de las caras antes de regresar a su forma humana y tirarle agua a la cara.

Se había distraído pero de volver a ver a esa chiquita tenía y vería por que cada vez que Rae y el hacían competencia todos buscaban otro camino...