Una Noche en París

Capítulo 30

Hoy es el gran día, me voy a casar con el amor de mi vida. No les puedo explicar el manojo de nervios que soy en este momento. Verme el vestido de novia puesto hace que esto en verdad se sienta real.

Decidimos tener tantos detalles como pudimos en esta boda, primero Nate y yo decidimos que nuestros amigos deberían reaccionar al vestido, ya que ellos no lo vieron así que antes de mi entrada y todo el protocolo en general los reunimos para poder grabar su reacción.

—Ya está aquí chicos —dijo la fotógrafa

Tyler, Rhett, Logan y Caleb estaban de espaldas a mí, todos arreglados con sus trajes. Les dijo que voltearan a la cuenta de tres, al llegar al último número, vi cómo se iluminaron los ojos de todos al verme.

Logan hasta cargó a Rhett de la emoción. Tyler se cubrió la boca con ambas manos.

Me acerqué a ellos, y Logan se lanzó a abrazarme, al igual que los demás. A los pocos segundos se alejaron

—¡No me jodas Julie! —exclamó mi mejor amigo— Te ves preciosa

—Muy bonita —complementó Caleb

—Si Nate no te hace caso, yo estoy libre querida. No le digan a Rose que dije eso —dijo Rhett

No pude evitar reír ante su comentario.

—Ty—susurré

—No sé qué te puedo decir que no te haya dicho antes, hermosa siempre has sido, simplemente hoy brillas más de lo normal.

—Gracias. —Le di un abrazo.

—Mientras seas feliz yo voy a ser feliz, no importa si no es conmigo

Nuestra boda fue sin niños, no es que no nos gusten los niños, pero quisimos que fuera una boda tranquila. Así que en lugar de tener a un niño que lanzara los pétalos de flores antes de mi entrada escogimos a Logan, que fue bailando una canción que si me lo preguntan no tengo idea del nombre, pero hizo el momento muy divertido ir sacando los pétalos de una cangurera que traía puesta.

Tras eso, sabía que era mi momento de entrar, comenzaron a sonar los violines como lo teníamos planeado. Esta es nuestra boda, toda nuestra relación la he sentido como un cuento de hadas, quería que todo mostrara nuestro amor. Nate accedió a todas y a cada una de mis ideas el solamente respondía "Amor lo que tú quieras, no importa el costo, solo quiero que seas feliz" Y así han sido todos los días que he estado a su lado.

Pusimos luces en todos lados parecían luciérnagas brillando como todos los momentos bellos que hemos pasado, nuestra boda es al aire libre, como la libertad que tengo con él.

Mi papá estaba esperándome para entregarme

—Cariño, estas hermosa.

—Gracias papá.

—¿Estás lista? —Asentí con la cabeza y acepté su brazo para caminar junto con él.

Suspiré y empecé a caminar a lo largo del camino de velas en el suelo, siguiendo los arcos de flores que colocamos hasta el altar.

Y ahí estaba él parado, tan guapo como siempre. Vestido con su traje hecho a la medida, y su sonrisa que me enamoró desde que la vi.

Toda nuestra familia estaba presente, tanto la de sangre como la elegida. Mi madre a punto de romper en llanto al verme vestida de novia, mi hermana súper emocionada de verme feliz y mi hermano orgulloso de que haya encontrado al amor de mi vida.