Fallen Light - KOOKMIN

Capítulo XXIII: Enfrentarlo juntos.

Jungkook terminó de preparar el desayuno, escuchando los pasos de Jimin acercándose. Se giró lentamente, como si no quisiera que ese pequeño momento de calma terminara.

—Buenos días —le dijo, tratando de sonar relajado, aunque sabía que no podría evitar lo que venía.

—Buenos días —respondió Jimin, con su voz aún suave por el sueño.

Jungkook lo miró, sonriendo un poco al ver su expresión algo confusa pero tranquila. Decidió romper el hielo, y señaló el desayuno que había preparado.

—Aprendí a hacer esto —dijo, intentando suavizar el ambiente—. Ya sabes, para que no sea tan raro...

Jimin sonrió, relajando los hombros y caminando hacia él.

—Bueno, has aprendido del mejor —bromeó, dándole un leve empujón con el hombro.

Ambos rieron suavemente, pero la risa se apagó rápidamente cuando Jungkook se apoyó en la encimera, dejando que un pequeño suspiro se escapara de sus labios.

—No podemos ignorar lo que pasó anoche —dijo Jungkook de repente, clavando su mirada en Jimin.

Jimin tragó saliva y asintió, sabiendo que esa conversación llegaría eventualmente.

—Sé que fue... intenso —continuó Jungkook—. Pero es algo que nunca había sentido antes, Jimin. Todo esto es... complicado para mí. No es fácil aceptarlo, pero siento que ya he dado el primer paso al menos.

Jimin bajó la cabeza, sus manos jugueteando nerviosamente con la manga de su camiseta.

—También es nuevo para mí —confesó, con la voz un poco apagada—. No sé cómo enfrentarlo, cómo manejarlo.

El ambiente estaba cargado de algo más profundo, algo que ninguno de los dos sabía cómo nombrar. Jungkook lo observó, tratando de leer más allá de las palabras.

—Si soy sincero... todo cambió desde que llegaste a mi vida —dijo, haciendo una pausa—. Lo que solía hacer, la vida que llevaba... simplemente no está ahí ya.

Jimin levantó la vista un poco, esperando que aquello fuera algo malo, pero no fue así.

—No me siento vacío desde que llegaste. Me siento... acompañado, querido, de alguna forma —confesó Jungkook, con una sinceridad que ni él sabía que tenía dentro—. Y no quiero cambiar eso por nada.

Jimin lo miró, sus ojos brillando con algo que parecía alivio y felicidad mezclados. Sonrió, finalmente dejando escapar el aire que había estado conteniendo.

—Entonces... deberíamos enfrentarlo juntos —respondió, comiendo un poco, rompiendo un poco la tensión con ese gesto cotidiano.

Jungkook se quedó en silencio cuando Jimin pronunció esas palabras: "Deberíamos enfrentarlo juntos". El concepto de "juntos" resonaba dentro de él de una manera que nunca antes había experimentado. Nunca había tenido relaciones amorosas ni algo que pudiera llamarse una conexión emocional. Siempre había sido indiferente a esas cosas, pero con Jimin era diferente. Sentía una conexión que no entendía, pero que le agradaba.

Miró a Jimin, que parecía tranquilo, seguro de sus palabras, pero Jungkook seguía lleno de incertidumbre. ¿Qué significaba realmente "enfrentarlo juntos"? No era solo por la cercanía que sentía cuando estaba con él, era algo más profundo, algo que no podía explicar.

—Yo... nunca he hecho esto antes —admitió Jungkook, bajando la mirada, inseguro—. No sé cómo enfrentar algo así. Nunca he tenido una relación seria, ni siquiera he querido tenerla. Pero contigo... por alguna razón, quiero intentarlo.