Oh, mi amor
Mi devoción
Hazme perder la noción
Róbame el aliento
Hazme arder de pasión
Tocáme
Quemáme
Bésame sin obviar ningún lugar recóndito de mi ser
No descanses
Amáme
O perderé el oxígeno
Entregáte
No te conviertas en un asesino
Olvídate
De todo aquel ajeno a esta cama
Mi cuerpo estreceme
Calientáme
Alimenta este amor sin parar
O se morirá
Como ese triste pétalo que descansa en la orilla de la acera
Y que pisan y pisan
Pues no saben valorar
Esa joya que citan muchos
Sin pensar
Apenas para obtener placer
Sin deseos de encadenarse
De ser exclusividad
Pues cegados están por el deseo carnal
De conocer cientos de cuerpos
Y no dejarse embriagar
Por un solo cuerpo
Pues convencidos están de que hay que aprovechar
Solo existe una vida
En esa excusa se esconden
Triste mentalidad
Aferráte a mí
Perdámonos en nuestras miradas
En nuestro amor eterno
Máxima expresión de felicidad .
