Mujeres, víctimas

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Apenas almas cándidas

Buscando un nido que nos traiga paz

Mujeres, buscando ser algo más

Somos, el significado de los milagros

De que la felicidad la cargamos en nuestras entrañas

Aun cuando sabemos el precio que tenemos que soportar

Lo único que pedimos, es amor

Que nuestros hombres nos entiendan

Que nos presten atención

Nunca nos prometieron insultos

Ni mencionaron sumirnos bajo su agresión

Únicamente, nos hablaron de amor

Nos pintaron de princesas

De mujeres únicas

Nos compararon con la efímera luna

Hablaron de cientos de promesas

Pero sobretodo,

Nos prometieron felicidad.

Ahora, lo único que veo es como un contrató se rompe

Que la vida de colores nunca estuvo a nuestro alcance

Que somos apenas almas vulnerables al sufrimiento ajeno

Nunca podremos tomar senderos bañados por la oscuridad

El peligro asecha por detrás de cada llanura

Ojos repletos de pecado

Nos observan con cuidado

Estamos condenadas al sufrir

Bajo aquellos brazos agresores

Bajo la opresiva mirada de aquellos malhechores

Mujeres, somos víctimas constantes del maltrato

No existe grado

Sean insultos o que el dolor opaque nuestra carne

Agresión, no tiene doble significado.

Lloró cada noche

Imaginando tragedias

Plagando mis oídos de las verdades

Cada día, sin dejar uno sólo en el olvido

Una mujer muere, bajo la mano animal...

Dolor, ¡se me derrite el corazón!

¿Cómo semejantes animales pueden tener sus derechos?

¿Por qué la justicia decidió dejarles libres sin pruebas que fundamenten su pecado?

Bestias, monstruos, alimañas, de mil formas los quisiera llamar...

Mujeres, desdichadas, bajo la mano de semejante animal.

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