Fingí aceptar que te fueras
Con una sonrisa te vi partir
A un lugar lejos de mi alcance
Lágrimas me obligue a mantener en silencio
La imagen en donde tú te marchabas sigue viva en mí
Un corto periodo de tiempo
Mi corazón busca un remedio en esas palabras
Busca convencerse, de tratar una pizca de la angustia que me está matando
Pero no puedo
Aquel día supe que no puedo vivir lejos de ti
La ausencia de otros me lastima
Pero la tuya me mata
No soporto vivir un día sin ti
Es doloroso, es alimentarse de una muerte lenta
Mis ojos se humedecen a cada segundo
Tan solo un susurro de tu voz hace pedazos cada parte de mí
Mi corazón se descompone
Siquiera sé si podré seguir
No deseo ser un tormento
No quiero que te preocupes por mí
Quiero seguir luchando
Creyendo, pero las pocas esperanzas tú te las llevaste en el mismo segundo en el que te alejaste
Pero seguiré aquí, aun en cuando el apenas respirar es sacrificio que mal puedo soportar
Lloró, y lloró, todavía sigo siendo esa niña que un día viste nacer
Esa que arropaste entre tus brazos y sonreíste sintiéndote feliz
Apenas cuerpo ha evolucionado
La mente sigue frágil ante la corrupción que se hace llamar personas
Estoy indefensa, temó cualquier pasó que pretenda dar
Nadie más me transmite esa confianza
Madre, no sabes bien cuanto te llevaste de mí
Que hablen de amores, de hombres, de matrimonios o mil mentiras más
Amor puro y verdadero es este únicamente
Porque tengo la certeza que ningún otro amor hará en mí llaga semejante
Estoy hundida en lágrimas,
Pero no te preocupes
Sigo aguardando por tu presencia
Y así seguiré hasta el día que regreses a mí.
Dedicado a mi madre, la persona que más amó en este mundo.