Humanos incomprendidos que en la soledad hallan un amigo
Un refugio
Un rinconcito de paz
Esa era yo
Niña que se escondía
Joven que los labios bien sabía sellar
No hablar
No interactuar
Fantasma vagabundo que nadie nota
Al que nadie le importa
Así me sentía yo entre una multitud infinita
Pero la soledad no me palpaba
Al menos así creí
Hasta el día en que hiciste tu aparición...
Diminuta me sentí frente a ti
Mi corazón un terremoto clausurado en mi pecho
Ya... Incapaz soy de aislarme
No quiero estar sola
No quiero... Alejarme de ti
Ven... Ven a buscarme
Arráncame de la soledad que a ciegas creí una aliada
Quiéreme
Abre al fin mis ojos
Esta es la hermosa realidad
Que solo tus manos pueden trazar
No hay un primero, ni una segunda oportunidad
Tú, ese mi destino, mi principio, mi pausa, mi final.