Hoy era día de gala, lo voy a pasar fatal con la marcha de cualquiera de las dos chicas.
Me desperté antes de que sonara la música y me quedé observando a Violeta, esta estaba prácticamente a la misma altura de mi cara, mirando en mi dirección, con una mano por debajo de mi cuello y la otra rodeando mi cintura por dentro de la manta y mi camiseta.
Por el contrario, yo tenía mi mano izquierda soportando el peso de su cuerpo a la altura de la cintura y la derecha posada en su cuello, donde empecé a trazar pequeños patrones con el pulgar con el fin de despertarla de manera sutil y cariñosa,
Poco a poco fue abriendo los ojos hasta conectarlos con los míos, aprovechando esto subí mi mano a su mejilla volviendo a dejar los mismos patrones que en su cuello mientras ella suspiraba cómodamente sin apartar su mirada de la mía.
- Tengo una idea - Me miró intrigada ante mi susurro mientras con cuidado me incorporé quedando sentada y apoyada en la pared, pues esta cama era la última del fondo.
Ella se incorporó un poco y recostó sobre mi cuerpo mientras me daba una mirada adormilada.
- ¿Qué tienes en mente? - Susurraba sin apartar la mirada de la mía y yo llevé mi mano a su pelo mientras dejaba pequeñas caricias que parecían relajarla.
- "¿Qué es poesía?, dices mientras en mi pupila tu pupila marrón" - Sonríe mordiéndose el labio, pues había cambiado "azul" por "marrón" en la poesía - "¿Qué es poesía? ¿Y tú me lo preguntas? Poesía... eres tú" - Llevó su mano al cuello de mi camiseta agarrándolo y dejando su mano ahí, sonriendo sin borrar la sonrisa.
- Es precioso, de Bécquer ¿no? - Asentí mirándola mientras nacía una sonrisa en mi cara y veía como todo un momento muy íntimo quedaba entre ambas.
- A ver si adivinas de quién es este - Ella sonrió aceptando el reto - "Los claveles piden agua, los presos libertad y yo pido que me quieras hasta la inmortalidad" - A diferencia de los otros, este lo recito cerrando los ojos, evitando su reacción inminente y recapacitando si ha sido demasiado o no.
- No tengo ni idea ¿de quién es? - Abrí mis ojos mirándola mientras ella, sonrojada, me miraba a mi.
- Anónimo - Bromeé y ella al darse cuenta sonrió acercándose más y con cuidado a mi.
- ¿Es tuyo? - Asentí sonrojada y ella simplemente me miraba con admiración y fascinada - Es precioso amor - No pude evitar soltar una sonrisa boba y mirar a sus labios cuando dijo esto a tan poca cercanía de mi.
Cuando parecía que todo fuera de esta burbuja no importaba y que solo lo hacían nuestros labios y nosotras...
Suena la canción invitándonos a levantarnos...
Ambas lo hacemos con cuidado, no sin antes fundirnos en un abrazo.
Todo el día pasó rápido y triste, con miedo a lo que pasaría, sin haber hablado nada últimamente ni saber cómo sería mi las cosas si Violeta se fuera.
Cuando llegó la gala todos habíamos actuado ya, ambas nominadas me habían hecho llorar y mi actuación dejó boquiabiertos a más de uno.
Chenoa anunció que era Violeta la que permanecía en OT y yo rompí en llanto mientras ellas se abrazaban y la pelirroja devastada venía con nosotros, la abrazamos y acogimos con mucho cariño.
Nos despedimos de Denna, quien al llegar a mi solo me miró a los ojos sonriendo eternamente y yo rompí a llorar mientras me abrazaba.
- Cuídate y cuídalos, te quiero - Siguió avanzando y al terminar nos fuimos de vuelta a la academia.
Violeta intentaba mantenerse firme, así que a pesar del cansancio, una vez cambiadas y aseadas, me la llevé de la mano a la terraza, donde nos acostamos y la abracé fuertemente pegándola a mi cuerpo.
- Suéltate - Solo con ese susurro vi a mi niña romperse en mil pedacitos y llorar como nunca en mi pecho, sacándolo todo y, una vez que hubo parado, se separó con cuidado.
- Perdón, de verdad - La interrumpí negando.
- Ni se te ocurra disculparte por esto, no has hecho nada malo - Limpié sus lágrimas con mis pulgares mientras le hablaba cerca de su cara - Permítete ser conmigo con quien puedas romperte y ser completamente Violeta, por favor.
Ella simplemente asintió ante mi petición y se abrazó a mí como un koala, mientras yo dejaba cariño por cada centímetro de su cuerpo recitando decenas de poemas de manera tranquilizadora hasta que cayó rendida.
Poco después la cogí en brazos llevándola a la cama, donde la arropé y decidí no dormir con ella, pues no había sido ella la que hubiese dicho nada de querer hoy compartir cama conmigo.
Sé que suena estúpido si ya hemos dormido juntas pero... soy respetuosa.
Una vez arropada me fui a mi cama y me quedé totalmente dormida después de pensar mucho en la rubia que hoy había abandonado la academia.
__________________________________
JULAIIIIIT!!!
Tarde, pero aquí está.
Disfrutadlo.
Os leo.
🫶🏼🫶🏼
ESTÁS LEYENDO
Todo por un poema || Violeta Hódar OT2023
Teen FictionDonde Elisa y Violeta ya se conocían y habían tenido una relación hacia unos años que había terminado a causa de comportamientos extraños y misteriosos para la pelirroja. Donde ambas han rehecho su vida y seguido con su camino. Donde un concurso la...