Todo por un poema || Violeta Hódar OT2023

Capítulo 37

Estaba tan cómoda en mi cama, tapada con el edredón bajo el frío del invierno y el sereno de la mañana...

Pero tuvieron que despertarme...

Me cago en toda la raza de la persona que esté sacudiendome ahora mismo.

- Isa venga, arriba, hay que irnos - La voz de Violeta a mi lado me intentaba despertar con calma.

Retiro lo dicho chicas.

- Vayolet - Suspiré dándome la vuelta, pues me estaba dando la espalda - Los de Madrid salen más tarde que Granada, déjame descansar, feliz navidad y pásala bien - Hablé medio dormida mientras ella empezaba a reírse en un tono bajo.

- Isa venga, que Noe te dijo ayer que vienes a Granada, va levanta - Acariciaba mi pelo mientras yo suspiraba al darme cuenta de que tenía razón.

Me levanté con cuidado y la abracé con los ojos cerrados, sé que la pilló desprevenida, pues noté como se ponía rígida y tardaba en devolverme el abrazo.

- Odio la navidad - Refunfuñé mientras salíamos juntas de la habitación - Soy el grinch en esta vida.

Violeta no podía dejar de reír por mis comentarios mientras me acompañaba hasta mi armario y yo cogía ropa de él.

- Te aseguro que el martes, cuando volvamos, no me dirás lo mismo - La miré con el ceño fruncido y sin entender, ella simplemente se encogió de hombros haciéndose la interesante.

¿Por qué todo el mundo trama algo?...

Cuando cogí mi ropa la pude ver muy entretenida mirando dentro del armario.

- ¿Quieres algo? - Pregunté apartándome para dejarle vía libre.

- ¿Puedo? - Insinuó que quería coger una prenda y yo asentí.

- Claro, ya lo has hecho mil veces antes - Ella sonrió mientras cogía una sudadera que ella misma me regaló hace un par de años.

- ¿Todavía la tienes? - Sonreí viendo como se la ponía y cerré el armario un poco sonrojada.

- La usaba todos los días para dormir desde que lo dejamos - Hablé con un poco de vergüenza y ella sonrió agarrando mi mano y llevándome a la cocina, donde ya habían algunos desayunando.

No me acordaba de que el directo ya estaba encendido y he soltado eso delante de todos...

Espero que no nos estuviesen enfocando.

Nos sentamos a desayunar y yo hice un café para Violeta y otro para mi, quien me lo agradeció dejando un beso en mi mejilla mientras yo me sonrojaba.

- Que bonita esa sudadera guapa - Salma habló a Violeta y yo arqueé las cejas - ¿Me la prestarás alguna día?

¿En serio se atreve a hablarle a mi Violeta después de lo de ayer?

- No puedo - La morena frunció el ceño - No es mía, es de Elisa - Sonrió mirándome evitando a toda costa la reacción de la morena, quien parecía echar humo.

Poco después Noe subió para avisarnos de que era hora de irnos.

Todo el camino en el AVE fui sentada con Violeta, me dejó recostar mi cabeza en su hombro para dormir un rato y me desperté con unas risas y voces de Alex y la pelirroja.

- Sácale una en 0.5 - Decía Alex riendo y después sentí un pequeño flash en mis ojos.

- Mierda - Masculló Violeta y yo abrí los ojos confundida.

- ¿Me estabais sacando fotos? - Me reincorporé mirando a ambos, quienes negaban intentando disimular la sonrisa.

- ¿Nosotros? - Alex preguntó llevándose la mano al pecho indignado.

- ¿Pero quienes te crees que somos? - Siguió ahora Violeta y no pude evitar reír negando.

El resto del viaje la pasamos hablando y bromeando.

Cuando llegamos a Granada miré el alrededor un poco perdida y nostálgica.

- Y ¿a dónde voy yo? - Fruncí el ceño mirando a mis dos acompañantes más cercanos.

- ¿Todavía no te has dado cuenta? - Rio brevemente Violeta mirándome.

- ¿De qué? - Ella suspiró.

- Te quedas conmigo Elisa - Me sorprendí ante sus palabras - Vas a pasar las navidades conmigo mi familia.

Sentí todo mi cuerpo erizarse y algunas lágrimas acumularse en mis ojos.

- ¿De verdad? - Ella me miró sonriendo y asintió.

La abracé fuertemente mientras algunas lágrimas se escaparon de su lugar de origen y aterrizaron en mi sudadera que llevaba puesta la pelirroja.

- Pero Vio - Me separé mirándola a los ojos - ¿Tu familia va a aceptar esto? No saben lo que pasó de verdad y a lo mejor no me quieren ahí - Empecé a divagar nerviosa y ella me interrumpió.

- Elisa, mi familia te seguía queriendo hasta pensando que me había sido infiel - Suspiré - Ya saben la verdad y han accedido sin problemas, te echan de menos - Sentí muchas emociones llenarme y no conseguía expresar ninguna - Denis y Sara también estarán en casa, tenemos que aprovechar hoy para ir a comprar sus regalos antes de esta noche.

Yo asentí mirándola y le susurré un "gracias", una pequeña palabra que no significaba nada, que se había desvanecido en un volumen casi inaudible, pero que yo lo había dicho con todo el sentimiento del mundo, agradeciéndole, de verdad, esta oportunidad.

Junto a Alex firmamos un par de autógrafos, era flipante pensar que había gente ahí específicamente para vernos a nosotros, que habían venido solo para una foto una firma en un papel, camiseta, sudadera, gorra o lo que sea.

Poco después vimos a Juan Carlos, el padre de Violeta, aparecer y me puse muy nerviosa. Ella al notarlo me agarró de la mano. Cuando este estuvo cerca de nuestra se abrazaron eufóricamente.

Al separarse y competir un par de palabras me miró con una sonrisa.

- Te he echado de menos Elisa - Sonreí acercándome cuando abrió los brazos invitándome a darle un abrazo.

Finalmente nos metimos en el coche y fuimos todos juntos a casa de Violeta.

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JULAIIIIIT!!!!

Ya no más, que me he portado demasiado bien con vosotras hoy.

Mañana y los siguientes se vienen capitulazos.

Espero que os guste mucho.

Os leo.

🫶🏼🫶🏼