"¿No sabes cuándo comenzó la Segunda Guerra Mundial? ¿No la viviste o algo así?"
"Uh, nací en los noventa."
En donde los ancestros Quileute piensan que es divert...
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Valeria fue la primera en oír a los lobos acercándose, sabiendo que la mitad del aquelarre estaba ausente y eran vulnerables a un ataque con Bella entrando en trabajo de parto... y ahora muerta. Y ahora que Edward había visto a Renesmee y la sostenía en sus brazos, sabía que no podía permitir que la lastimaran.
"¡Alice! ¡Jasper!" Grité antes de besar con manos temblorosas la fría frente de Bella. "Vas a estar bien."
Entonces, Valeria y Edward se encontraron con Alice y Jasper afuera de la casa, todos observando cómo los lobos rompían la línea de árboles. Al ver al gran lobo negro al que amaba tanto, Valeria apartó la mirada tristemente, sabiendo lo que venía. La estaban obligando a elegir entre su pareja y su familia, y eso la hacía sentir como si la estuvieran partiendo en dos.
"Son muchos", señaló Jasper.
"Demasiado", añadió Alice.
"No lastimarán a mi familia", declaró Edward.
Sam fue el primero en atacar, yendo directamente hacia Edward, quien lo lanzó hacia atrás con facilidad. Alice y Jasper también se lanzaron a la pelea, pero Valeria se quedó quieta, observando con ojos frenéticos cómo todas las personas que amaba peleaban entre sí. Era fácil notar que ninguno de los lobos iba por ella. Habían recibido órdenes de dejarla en paz, por supuesto. Y Valeria no podía obligarse a atacarlos cuando sabía que no podía defenderse de ella porque era una Impronta.
En su lugar, mantuvo la vista fija en Sam, quien seguía atacando a Edward. Su hermano estaba de espaldas, los dientes de Sam descubiertos, listos para arrancarle la cabeza. Valeria respir hondo y rápidamente lo apartó de un golpe, sin usar ni de cerca la fuerza que tenía incluso cuando estaba medio muerta de hambre. La pareja rodó por el suelo, y antes de que él se diera cuenta de quién era, las garras de Sam se clavaron en su rostro, apareciendo tres largas grietas en su piel.
La sangre de Sam se congeló cuando escuchó su grito, y se detuvo de golpe, él inmovilizándola contra el suelo. Se quedó congelado encima de ella, observando cómo las grietas lentamente comenzaban a sanar en su piel, por lo demás perfecto. Era lo más cerca que había estado de ella en semanas, y la había lastimado.
Valeria pudo ver la angustia en sus ojos y negó con la cabeza, sabiendo que no lo culpaba ni por un segundo mientras el ardor desaparecía. "Estoy bien", susurró. "Pero no puedo dejar que mates a mi hermano."
Pensando que la estaban atacando y sin reconocer a Sam en su forma de lobo, fue Emmett quien apareció y lo empujó fuera de Valeria, lanzándolo contra un árbol tan fuerte que la madera se astilló y atravesó su piel.
"¡Sam!" gritó Valeria, apartando a Emmett de un empujón y corriendo hacia su pareja.
El caos de la pelea solo comenzó. Valeria seguía intentando separar a los lobos de su familia. Sam estaba dividido entre protegerla y cumplir con su papel de matar a Edward por lo que había hecho. Seth y Leah se vieron obligados a pelear contra sus compañeros cambiantes. Y demasiado pronto, los vampiros, superados en número y debilitados, fueron arrinconados.