CAP. 6, TEMP. 3 |Confesiones al amanecer

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La puerta se abre, despertando a Legolaz.

—¿Ah? —Apaga la TV—. Mamá, papá... llegaron... —traga saliva—. Verán, es...

Elisa le tapa la boca a Francisco antes de que hable.

—Dejémoslo solos. Parece que trajo una amiga a dormir hoy.

Francisco aparta la mano de Elisa.

—No hagan nada raro. ¿Los padres de ella saben que está aquí, cierto?

Legolaz asiente en silencio.

—Bien, entonces solo por hoy se quedará. Mañana hablaremos muy seriamente sobre esto.

Ambos padres se van, dejándolos solos.

—Qué bueno que no despertó Stronbol... —se acaricia el cuello—. Sentí que iba a morir... Parece que no se dieron cuenta de que era un chico por la capucha... Aunque creo que habrían pensado lo mismo. —Le acaricia el hombro a Stronbol—. Tengo que pensar en qué hacer contigo.

Legolaz da vueltas en la cama.

—Mmm... —De repente, se levanta de golpe—. ¡Stronbol! —Corre en pijama hacia las escaleras y escucha a Stronbol hablar con Elisa.

—Sí... lamento la confusión. ¿Necesita ayuda con algo más?

Elisa toma asiento.

—No... te levantaste muy temprano a poner todo en orden. ¿Eres amigo de la escuela de Legolaz? Siento que he visto tu rostro antes... —traga saliva.

—¡No! Digo, no, claro que no. ¿Nos hemos visto antes? —Stronbol piensa—. "Mierda, ¿me habrá visto en las noticias? Estoy acabado..."

Elisa deja escapar una suave risa.

—Qué chico tan nervioso, tus manos tiemblan demasiado... Ya que hoy no vas a la escuela... ¿qué estuvieron haciendo ayer en el sofá?

Legolaz cae por las escaleras.

—¡Mamá! Buenos días... —Toma a Stronbol de los hombros—. Hoy Stronbol no puede hablar mucho, así que nosotros nos vaaaaa...

Elisa sujeta a Legolaz de la camisa.

—Tú no te vas. Tienes que contarme lo que sucedió...

Legolaz se queda quieto.

—De acuerdo...

Elisa le acaricia el cabello a Stronbol.

—Puedes ir a ver la TV, voy a hablar con mi hijo.

Legolaz mira hacia el suelo.

—Tu padre y yo estamos pasando por un divorcio muy complicado... Verte con ese chico me hace darme cuenta de que no te hemos estado tratando muy bien desde que eras niño... ¿Preferirías irte con tu padre o quedarte aquí conmigo?

Legolaz levanta la mirada hacia Elisa.

—¿Qué pasa si elijo ir con mi padre?

Elisa pasa sus dedos por el cabello de Legolaz.

—Supongo que te irías del país con él... O, ¿prefieres quedarte aquí conmigo?... Ya sé que tu amiguito no tiene a dónde ir.

Legolaz aparta la mirada, un poco sonrojado.

—¡YA! No está pasando nada aquí.

Elisa le revuelve el cabello a Legolaz.

—Puede quedarse el tiempo que desee, es muy servicial... ¡Parece el hijo perfecto!

Legolaz cruza los brazos y piensa unos segundos.

—Mmm... Mi padre estará bien. Entonces, ¿Stronbol puede quedarse?

Elisa asiente y sonríe.

—Noto cierta química... Antes salías con una chica, ¿no?

Se escucha una taza romperse desde la sala.

—Agradecería que hables más bajo, mamá...

Legolaz camina hacia la sala y ve a Stronbol viendo la TV.

—¿Viendo dibujos animados? Pareces muy molesto... —Trata de ver a Stronbol al rostro—. Oye, ¿por qué me ignoras? ¿Dije algo malo?

Stronbol se pone la capucha.

—Salías con una chica hace poco. ¿Quién era? —Se sienta a su lado—. Ya veo. No es por molestarte, pero... ¿qué sientes realmente? ¿Celos o miedo?

Stronbol empieza a temblar.

—No lo sé... Creo que es miedo.

Legolaz lo abraza desde atrás.

—No me esperaba esa respuesta... ¿Esto te ayuda un poco a sentirte mejor?

Stronbol se quita la capucha.

—Si encuentro a esa chica, la voy a matar. ¿Oíste?

Legolaz acaricia el cuello de Stronbol.

—Sé que lo harías.

Elisa golpea la cabeza de Legolaz.

—Lo mejor es que duerman en lugares separados. —Los separa—. Al menos ya sé qué pasó ayer.

Legolaz mira a su padre a lo lejos.

—Supongo que ese va... ¡Ey!

Francisco voltea a mirarlo.

—Vete a la mierda.

Legolaz azota la puerta.

—¡Al fin se fue ese idiota! —Se deja caer al suelo y mira a Stronbol—. A Elisa no parece molestarle mucho lo que hagamos.

Stronbol juega con su cabello.

—Uh... tengo varias cosas en mente, pero tu madre nos mataría si nos descubre.

Legolaz se levanta de golpe.

—¡No me refiero a eso!... Quiero decir, tenemos tiempo libre y hay algo que quiero intentar...

Stronbol levanta la mirada hacia Legolaz.

—Ah... ya entiendo. —Stronbol señala su cuello—. ¿Vamos a la habitación?
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Apariencia de los padres de Legolaz:

Apariencia de los padres de Legolaz:

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Nombre: Elisa
Edad: 38 años

Nombre: Francisco Edad: 38 años

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Nombre: Francisco
Edad: 38 años

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