Capitulo 53: Interés

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Ya que yo probé de antemano cuál de los dos círculos mágicos era el camino seguro, nos adentramos a la segunda planta del laberinto, tiempo en que pasaron un par de cosas…

Bueno, el asunto es que se me mandó a la primera línea tal y cómo lo hablamos, moviendo a Talhand y a Vera hacia atrás, Talhand tomando el lugar de Vera como la segunda línea de defensa y Vera haciéndose cargo de cuidar nuestra retaguardia.

El problema con esto es que a la hora de pelear tuve algunas dificultades con mi posición y en general para cubrir mi rol con Elinalise secundandome, porque lo único que quería era saltarme todo y brincar de cabeza a los enemigos, lo que al parecer rompe toda la formación.

“¿A qué te refieres con que yo sólo tengo que Recibir a los enemigos?”
“Mocoso tarado, ¿no estuviste prestando atención a nada?”
“Esto…”

Por supuesto que no, hasta ahora a lo único que le prestaba atención era a Shera o a las arañas, —ahora sólo a Shera—, si a acaso los voltee a ver de reojo cada tanto pero jamás me importó cómo es que estaban peleando, o la forma en la que se coordinaban.

Además siempre pensé que eso que decían de Yo recibo, tú atacas, era algo más parecido a Si no lo acabo del primer golpe tú terminalo mientras yo paso al siguiente.

“Mejor cambiemos de lugar”

Cómo tal los roles son más bien literales y estáticos, el que recibe siempre está delante en una posición fija, cuidando que los monstruos no pasen, al mismo tiempo que el apoyo se queda detrás de él esperando el momento para atacar.

“Espera, ¿eso quiere decir que voy a tener que esperar todo el recorrido que den los monstruos hasta que tú los recibas antes de poder atacarlos a melee?”

Ante mi pregunta Elinalise ya ni se enojó, ahora solo me miraba confundida, tratando de adivinar si lo que dije era en serio o una broma.

“Pero si eres de Rango A, ¿cómo es que no sabes algo tan simple como eso? ¿Qué acaso nunca has sido parte de un grupo de aventureros?”
“Bueno…”

Cuando Eris, Ruijerd y yo luchábamos contra monstruos nuestros roles no estaban así de definidos.

La mayoría del tiempo Eris se lanzaba al combate con Ruijerd detrás cubriendo que no llegara a cometer algún error o rematando los monstruos que fuera dejando atrás en su sangrienta travesía, y cómo en esas fechas yo era super torpe, solía dispararle a enemigos desde lejitos o tener pequeños combates contra enemigos sobrantes, con Eris o Ruijerd haciendo de guardia en caso de que me cayera como estúpido a mitad de una pelea.

En resumen, sólo durante algunos combates contra monstruos de Rango A era cuando medianamente había una estrategia preparada de antemano, que era yo cubriendo a ese par de guerreros con hechizos ultra potentes hasta que el monstruo se muriera al fin.

No era muy difícil, para empezar Ruijerd podía empalar a todo él sólo, así que no había necesidad de implementar grandes estrategias, todo lo que importaba era completar los encargos y hacernos más fuertes, trabajar en equipo sólo era como una medida de seguridad.

Después de que nos separamos ya me había fortalecido lo suficiente para valerme por mi cuenta, y por si fuera poco estuve entrenando en un bosque en solitario para perfeccionar todas mis técnicas antes de volver al gremio para hacer encargos sin ayuda.

“¿Me estás diciendo que esta es la primera vez que trabajas en un grupo?”
“Tecnicamente no… pero podría decirse”
“¿Y qué esperabas hacer aquí si no sabes pelear acompañado?”
“No creí que fuera algo tan importante, hasta Roxy completó un laberinto ella sola una vez”

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