One Shot Sobrenatural

Human | Rosalie Hale

Advertencia: mención de abuso, muerte

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- No puedes dejarme, por favor cariño - la rubia acarició la mejilla de su castaña - lo prometiste...por favor

Mirando el cuerpo de la mujer en la camilla se preguntó realmente como habían llegado hasta ese momento, ¿Por qué había permitido que llegaran a eso? Para obtener una respuesta, un consuelo tenía que regresar en su memoria un par de meses atrás.

8 meses antes...

Se habían conocido de forma tan poco convencional, cuando la madre de la castaña la dio a luz en el hospital donde Carlisle trabajaba. Sabía que estaba mal enamorarse de un simple bebé, pero al sentir su corazón latiendo de manera irregular un deseo de protegerla nació en su muerto corazón.

La madre de la castaña conocía la naturaleza de los Cullen, pero jamás hizo nada para alejarse o incluso a su hija, podía ver la mirada de adoración de Rosalie en su pequeña y sabía que no importaba lo que ocurriera con ella, los vampiros siempre la protegerían.

Y ahí estaban 27 años después, con la castaña conviviendo con los Cullen durante el día y regresando a su departamento por las noches, sabía que ser humana a su alrededor no significaba un problema porque eran "vegetarianos", pero sí para los demás...había tenido que apartarse de su lado cuando los Vulturi se enteraron todo el drama de Bella con Edward. Eso le había roto el corazón a la joven pues no quería apartarse de Rosalie, ella también se había enamorado de la rubia sin poder evitarlo.

Pero ahora se encontraba regresando a casa cuando un hombre salió de la nada cubriendo su boca con su asquerosa mano, por más que intentó defenderse, quejarse o incluso gritar...no pudo evitar lo que paso. Acostada en el frío asfalto de un callejón desierto rodeada por las bolsas rotas de compras que había hecho sacó su teléfono intentnando controlar su temblor.

- ¿Emma? - la voz de la rubia siempre lograba calmarla

- Rose...te...te necesito - por más que lo intentó no pudo contener el sollozo roto que se escapó de sus labios

- Hey, cariño ¿Qué ocurrió? - tomó las llaves de su auto preocupada por escucharla de esa manera - Emma... ¿Dónde estás?

- Callejón...junto al supermercado - se sentía sucia - por favor

- Estoy en camino, cariño - sintió el coraje subir por su garganta - habla conmigo mientras tanto

- Yo...yo quise impedirlo...pero...pero no...Rose yo

- Hey está bien, respira conmigo

Antes de que Emma se diera cuenta la rubia que amaba con su alma se encontraba frente a ella sujetando con suavidad su rostro, no hizo falta explicar lo que había pasado pues Rosalie lo supo, podía olerlo de todas formas y sus instintos más primitivos siendo un vampiro se despertaron, no había podido evitar que lastimaran a su chica...pero sin dudas una vez que se asegurara de que estaba bien buscaría a ese bastardó y secaría hasta la última sangre de su inmundo cuerpo.

Ahora mismo su atención se centró en su castaña, pidiéndole permiso antes de levantarla en sus brazos para llevarla a su auto y de allí directamente al consultorio de Carlisle en el hospital, luego de que explicara lo que ocurrió sujetando la mano de Rosalie como si fuera su salvavidas en medio de un naufragio en el océano, ciertamente lo era pues se sentía completamente perdida, completamente vacía.

- Muy bien, estás a salvo ahora...no vamos a dejarte sola Emma - miró a Rosalie que asintió - ¿estás de acuerdo con la pastilla del día después? - Carlisle tomó su mano mirándola con suavidad