SAM
Cuando llegué aquí, a propósito, encontré una mesa lo más atrás de las escaleras mecánicas como pude y no tiene nada que ver con el deseo de mantenerme escondida lejos de la gente. No estoy avergonzada para nada de estar haciendo esto y realmente no me importa que me vean con Mon cuando ella aparezca.
Elegí sentarme aquí porque quiero verla antes de que ella me vea. Mon fácilmente podría venir a través de la puerta detrás de mí y me tomaría por sorpresa, pero espero que ella vaya a hacer lo mismo que hice cuando me bajé del autobús y tomé la escalera mecánica de la planta baja para que yo la vea cuando llegue aquí.
Estoy entre una mezcla de emocionada y asustada ahora. La habitual confianza que tengo cuando estoy en la escuela, no está más allí y soy sólo un manojo de nervios amarrados. No es porque estoy a punto de ir al cine, o incluso comer con ella. Es porque voy a hacer lo que dijo el Dr. Thompson y decirle todo.
Antes de ver la película, voy a decirle a Mon lo que siento y espero que no haga lo que yo creo que va a hacer y explote en mi cara.
Mis ojos se han quedado en las escaleras mecánicas desde que llegué aquí hace quince minutos y cuando finalmente me doy por vencida, pensando que por cualquier razón no fue capaz de salir e ir a la libertad bajo fianza por mí, la pantalla de mi teléfono se ilumina y otra vez la sacudida nerviosa vuelve con toda su fuerza.
Estoy aquí. Casi en el patio ¿Dónde estás?
Lo que tendría que hacer ahora sería contestarle de regreso, pero no voy a hacerlo. Si le digo dónde estoy, entonces va a arruinar todo. Quiero un par de minutos antes de que ella me encuentre así puedo verla, prepararme para lo que va a pasar cuando se siente.
Cuando la veo pasar fuera de la escalera mecánica, la primera cosa que noto es que ella no lleva lo que tenía más temprano. Lleva otra ropa, su cabello luce arreglado, sus mejillas sonrojadas y sus labios rosados sólo la hacen ver más bonita.
Ella es hermoso.
No se supone que tenga que verse tan linda.
Bajando la cabeza antes de que pueda encontrar sus ojos conmigo, agarro mi teléfono y le texteó de nuevo. Tan sencillo como sería para mí mantenerme mirándola de esta manera, tomando todas las formas en que se ve diferente, no quiero hacerlo y hacerla pensar que no estoy aquí o que estoy jugando algún tipo de juego con ella.
Ya piensa que no me gustaría ser vista con ella. No hay manera de que quiera hacer esto peor.
Por todo el camino hacia parte posterior. En Taco Bell.
Lanzando mi teléfono sobre la mesa y mirando hacia atrás, la veo venir hacia mí, sus ojos encerrados en mi área en general, obviamente, viéndome, pero no directamente sobre mí. Cuanto más se acerca, más soy capaz de ver de ella y es difícil no notar la sonrisa en su rostro. No es grande, pero es suficiente para hacerme saber que está feliz de que me encontró.
Reaccionar de esta manera por ella, es tan extraño. Ajeno. Yo no soy la chica que va de cabeza sobre sus pies por algún chico y menos una chica. Yo no hago lo de botar y girar el cabello con una risita y rubor. De hecho creo que las chicas que lo hacen son bastante patéticas. Es otra manera en que Charlotte y Eva me avergüenzan.
Con Mon sin embargo, al ver su sonrisa, estoy haciéndolo de nuevo y mis mejillas se calientan. Estoy ruborizada y toma todo en mí para no aventarme a mí misma en este momento porque estoy sobrecalentándome mientras más se acerca. Sí, esto es definitivamente raro.
―Hola.
Samanan. Deja de mirarla. Está hablándote lo que significa que tienes que responderle de regreso en lugar de quedarte mirando y babeando.
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TAKE ME WITH YOU
RomansaTodo lo que hizo fue poner mi mundo al revés, y me entero de que incluso en el peor ser humano, hay una historia que contar y, a veces, el inicio de esa historia puede ser engañosa.