Ya se acercaba la boda y estaba en la oficina de orquídea junto a este y Liam, por supuesto también el pequeño bebé que estaba creciendo en su vientre por muy raro que le parezca, estaban esperando a que llegara el "oráculo" que les diría cuál era su futuro, aunque no creyera que alguien así existiera, tampoco podía contradecir a orquídea quien no lo había soltado en bastante tiempo, si no era la mano, era la cola o la cabeza, de una u otra forma buscaba mantenerse cerca de su vientre, parece que sí estaba muy emocionado.
Estaba sentado en el suelo junto a Liam quien le explicaba lo que hizo hoy con el maestro pese a ser muy joven, este niño parecía entender muy rápido cada clase que impartía el maestro y no podía evitar estar aún más orgulloso por su niño, ¿Por qué crece tan rápido?, le hubiera gustado tenerlo más tiempo inocente, a este paso va a saber más de la vida que él.
—pero entonces, entonces, él dijo que, dijo que debo comenzar con la lengua del mar y eso—.
—no es muy diferente, solo suenan como si cantaran—.
—¿Sí...?, ¿Cantado?—.
—Así tipo, "amores míos de mi vida, ¿Vas a saber donde queda el corazón del mar?, ¡Ante todo deseo encontrarlo y hacer vida en el!"—.
—¿Eso qué significa?—.
—"hola querida o querido, ¿Sabes cómo llegar al centro de la isla?, es que llegó tarde", aunque esto depende de quien se trate—.
Sintió la caricia suave de orquídea sobre su vientre mientras practica la lengua del mar con Liam, la caricia era suave y breve como si moviera la mano por inercia, al bajar una de sus manos para tocarlo se dio cuenta de que las escamas en la mano se erizaron al contacto y la mano se detuvo para recibir la suya entrelazándose, pero aun manteniéndose en la zona ejerciendo un poco de presión.
—su majestad el emperador, ha llegado el oráculo que solicito—.
La puerta se abrió y de inmediato escucho los pasos, fuera de que sintió las miradas de disgustos de los sirvientes, su atención se fijó en el suave aroma que rápidamente reconoció como el de un girasol, era fácil por qué recuerda una vez que comió semillas de girasol con mantequilla y picante con una amiga en un puesto callejero, eran ricas aunque las prefería al natural, pero recordando el olor de los pétalos que era suave y fresco.
¿Girasol?, ¿La misma girasol?, ¡¿Se volvió oráculo?!.
—que el sol siempre brille sobre su camino su majestad el emperador y que la luna sea fiel a su majestad la emperatriz—.
Se quedó quieto escuchando esa voz y se sonrojó de sorpresa al descubrir que era su girasol, hacía tiempo que no la escuchaba y lo poco que sabía es que aun si tenía un puesto alto seguía asunto llamándose madre de Hortensia, la niña caballero más fuerte del imperio pese a su corta edad, tantos niños con los que estuvo conviviendo y todo convirtiéndose en grandes promesas, está demasiado orgulloso.
—lo siento, mi emperatriz es algo tímido—.
—¿¡Ah!?, ¡Perdón!, perdón, es solo...ah... La voz se me hizo familiar—.
—aja—.
Se quedó quieto muy confundido por el cambio de actitud de orquídea, un gruñido profundo que se acentuaba mientras lo subía al mueble con él y luego subió a Liam con la cola haciendo que ambos estén bajo su poder, como si sintiera amenaza de girasol aunque... que le conste girasol nunca se ha mostrado interesada en romance ni nada de ese estilo, menos con él.
—directo al grano girasol, ¿Qué tal está nuestro futuro?—.
—Orquídea...—.
—¿Qué?, solo quiero terminar con esto de una buena vez—.
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Lobelia- Tan cerca de devorar el mar
FantasíaNicolaik desperto en el mundo de fantasia que creo su hermana leyla en su, poseyendo el cuerpo de Lobelia Verbena un personaje que lo representa en ese mundo y un niño con un futuro muy turbulento. No quiere eso ni mucho menos morir en manos de algu...