Ya habían pasado varios días desde aquella reunión, aún Hantengu no aparecía por ningún lado, pero ahora esa no era mi preocupación... Aquella sonrisa en Daki me había dejado preocupado aunque no quería admitirlo... Sabía lo muy mala que podía llegar a ser Daki, así que, se me había ocurrido algo.
Obviamente T/N no sabía nada de defensa personal, así que había decidido por lo menos enseñarle a disparar y a como usar una pistola. Podría sonar como un preocupado de mierda, pero no me importaba, prefería tener a T/N ya entrenada que lamentar las cosas después. Claro, aún no tenía muchas señales de que algo pasaría, pero prefería prevenir que lamentar.
Y para mí ya era suficiente prueba con aquellos correos y con aquella sonrisa de Daki, algo no andaba bien...
-Pon la pierna derecha en frente y la izquierda atrás.- Dije en voz seria hacia la chica.
Estábamos en el patio de la mansión, enseñándole a T/N como disparar, usando como un punto fijo una lata.
-Si sigues temblando de esa manera no podrás disparar con precisión.- Dije viendo como su pulso temblaba.
-B-Bueno, no puedes culparme.- Dijo T/N hacia mí.
-Deja de hablar y concéntrate.- Dije en voz seria. -Ahora, dispara.- Dije en tono serio.
Al ella disparar, aquel estruendo resonó por toda la mansión, yo solo seguí con la mirada la bala. No disparo exactamente en el medio de la lata, pero cerca.
-Bien.- Dije en tono serio, pero T/N sabía claramente que ese "Bien" no significaba que ya era una experta.
¿Cómo mierda es que T/N sabía tanto de mí con solo tener algunos meses casada conmigo?, Y me sorprendía ya que yo no demostraba mis sentimientos ni nada parecido.
-Ahora, dispara ahora a las demás latas.- Dije señalando con mi dedo las latas que habían allí.
Pude ver cómo su mano temblaba aún, haciendo que suelte un suspiro.
-¿Cuántas veces te tengo que decir que no hagas que tú mano tiemble?.- Dije en tono indiferente mientras sacaba mi pistola de mi cinturón. -Presta atención.- Dije, y segundos después dispare 5 veces a 5 latas en línea que habían allí. -¿En algún momento mi mano tembló? No. Ahora, mira la diferencia sí tiembla mi mano.- Dije, haciendo presión en la pistola, e inmediatamente mi mano tembló un poco, y al disparar, no dieron en el medio de la lata. -¿Ves?.
Dije volteándo a ver a T/N.
-Si es por nervios, tranquila, no es nada del otro mundo.- Dije cruzándome de brazos mientras la veía. -Y, prepárate, porque esto es solo el comienzo. ¿Quién sabe cuándo te tocará defenderte a ti misma algún día?. - Dije mientras la veía.
¿Y quién diría que en un futuro no muy lejano eso ocurriría?...
-Escucha, mi vida.- Dije mientras soltaba un suspiro.-En está vida de los bajos mundos, puede ocurrir ni lo que tú menos te imaginarias, y en el momento en el que menos te des cuenta. Siempre van a haber trampas, mentiras, deslealtad, maldad, y demás cosas. Así que prefiero tenerte entrenada que lamentar las cosas después y perderte..- Dije mientras que con una de mis manos tomaba su cintura, y con mi otra mano tome su mejilla.
-Podrá parecer mentira, pero, en serio, te amo... Te amo con locura, y no quiero perderte por alguna ridiculez mía, mi vida..- Dije viéndola, y la acerqué a mí, dejando un suave y cariñoso beso en sus labios.
Unos segundos después, el beso se intensificó un poco cuando ella acaricio mi antebrazo, el que estaba rodeando su cintura.
Al sentir sus caricias en la misma, dejé salir una pequeña sonrisa maliciosa mientras empezaba a intensificar el beso.
...
Yo seguía su beso con las mismas ganas que él, empezando a acariciar su antebrazo... Por alguna razón me encantaba estar así, osea, él enfrente mío. Es que, el era bastante alto en comparación a mí, él media 1.79 cm, y yo apenas llegaba a 1.70 cm.
Pero aún así, el hecho de que existiera aquella diferencia de tamaño me daba... "Felicidad" para no decir otra palabra más...
Duramos unos minutos besándonos, hasta que él rompió el beso en un sonido sonoro.
-Ya, ahora sigue practicando.- Dijo Muzan viéndome.
Yo solo lo miré con una expresión seria, y escuché como soltó una carcajada.
-¿Qué?, ¿Crees que porque te estoy dando el privilegio de un beso así ya no vas a seguir practicando?.- Dijo él mirándome con una sonrisa malvada.-No, no, no, no, mi niña. Estás muy equivocada, tesoro.- Dijo él mientras hacia un ademán de negación.
-¿Pero por qué— Fuí interrumpida por él.
-Ya, ricura, ya deja de quejarte y sigue practicando. No mejorarás solo por un par de disparos y ya.- Dijo él mientras soltaba una risita, dejando un último piquito en mis labios.
Escuchar ese apodo hizo que un pequeño sonrojo apareciera en mis mejillas, pero solo hice como si nada. Pero aún así, él lo noto.
-Ya, ya, no diré más nada. Ahora solo sigue.- Dijo Muzan mientras se separaba de mí.
Yo solo solté un suspiro y seguí practicando mis disparos..
...
Era de noche, estaba en mi oficina revisando algunos informes y correos. Toda la mansión estaba en silencio debido a que era de madrugada y todos estaban durmiendo, excepto yo... Mientras revisaba algunos correos en mi laptop, ví que llegaron algunos correos nuevos, sin nombre ni nada.
"Prepárate, porque cuando menos te lo esperes, puede que haya un pequeño baño de sangre en toda tu mansión, Kibutsuji..."
Tenía que admitirlo, leer eso hizo que corriera un escalofrío por toda mi espina dorsal, solo rodee los ojos y me recargue contra la silla del escritorio. Unos segundos después, apague la laptop y me fui de aquella oficina, en rumbo a la habitación principal.
Al llegar, abrí la puerta cuidadosamente, y lo primero que ví fue aquella silueta durmiente en la cama, solo esboce una pequeña sonrisa suave mientras iba directo a la cama. Al llegar frente a esta, me quite la ropa, dejándola tirada en alguna parte de la habitación y me acosté en la cama.
Al acostarme y meterme entre las sábanas, pude sentir como T/N se revolvió un poco en la misma, se dió la vuelta y se acurrucó en mi pecho... Yo la recibí con gusto, acariciando su cabello y su cintura, sintiendo como su respiración firme y calmada golpeaba contra mi pecho. Era simplemente adorable verla así...
-Amor... ¿Por qué llegas a esta hora?..- Escuché decir a T/N en voz adormilada.
No respondí por algunos segundos debido a que... Estaba sorprendido, era la primera vez que la escuchaba decirme por un apodo cariñoso, ya que ella siempre me llamaba por mi nombre.... Luego, solo esbocé una sonrisa cariñosa.
-Estaba revisando algunas cosas, corazón... Solo duerme, ¿Si?, Yo estaré aquí a tu lado..-Dije en voz suave, dejando un último beso en su frente antes de caer dormidos los dos.

ESTÁS LEYENDO
La Debilidad Del Mafioso
FanfictionEn la ciudad de Tokio, una chica de nombre T/N Hayashi, acababa de llegar a la cuidad. Ya que, al ella nacer en un pequeño pueblo de Kioto no tenía tantas oportunidades de salir adelante, saliendo de aquel pueblo para independizarse en esta ciudad...