En la clase de gimnasia, estábamos haciendo tiros libres, esta vez a una portería de fútbol eso en realidad no me gusta, aunque no me falle ninguno, porque el portero era un pequeño que huía del balón.
Con las manos en los bolsillos del pantalón, patee la pelota y entro sin problema. dada la carente necesidad de actividad física, ni siquiera me sujete el cabello.
-¿Se pelearon? -pregunto Nam a mi derecha. La mire y esta señalo con un gesto hacia Rebecca, quien esta conversando con la profesora.
-No -respondí, volviéndome a la portería.
Supongo que su idea viene de que desde ayer no he hablado con ella, no nos fuimos juntas, además, hoy en la mañana cada una llego por su lado.
Esta enojada y debe ser por lo de ayer, sin embargo, no me ha dicho nada.
-Nunca dejes las cosas sin hablarlas -apunto Heng, antes de tirar.
Se colgaron de mi hombro y sentí la pesada respiración de Billy en mi nuca.
-¿Que quieres? -pregunte sin retirar su mano.
-Un partido.
-Ahora no... -respondió Nam con cansancio.
-Solo uno -al sacudirme, tome su mano, la tire y lo solte.
-Me estas cargando .advertí con seriedad-. No tengo tiempo para ti.
-¿No quieres perder? -se acerco. La postura provocadora trajo a sus espaldas a su compañía.
Nam y Heng de por si estaban a mis costados.
-No quiero verte llorar, me aburres -repuse. Acerco su cara a un centímetro de la mía.
-¿Crees que no te tocaría porque estamos aquí? -susurro.
-Hazlo -lo rete en el mismo tono-, pero no llores después.
Alejo la cabeza, riéndose, dio un paso atrás y, sin previo aviso, me dio un puñetazo en la cara. El estruendo fue lo que mas llamo la atención de los pocos que faltaban.
Ya que no traía anillos puestos, devolverlo del mismo modo no le dolería tanto como a mi, así que lance la mano izquierda al aire, extendida, y golpee la garganta.
Se inclino tosiendo como si lo hubiera ahorcado. Para nada.
—¡Dios! —la profesora llegó corriendo—. !¿Que les pasa?!
—... —David no pudo hablar Dada la carraspear. En serio no le hice nada.
—¡El la golpeó primero! —señaló Nam, sujetándome de los hombros.
Rebeca me tomó de la mano.
—La llevaré a la enfermería, alguien... llévelo a él —indicó con desdén y me hizo caminar, halándome.
En efecto, fuimos a la enfermería, hasta entonces me soltó y empujó mi hombro para que tomara asiento en uno de los bancos de metal, lo cual hice.
Se lavó las manos, luego trajo el botiquín de primeros auxilios.
Me limpió la sangre del labio con brusquedad.
—¡Oye, oye! —sujeté su muñeca porque me está doliendo más que el golpe en sí —. Mejor abofetéame.
—¡Te dije que no más peleas! —enfureció.
—...
La solté y se tranquilizó poco a poco, por si sóla. Siguió curándome, ahora con más cariño.
—¿Por qué insistes en provocarlo? —preguntó, colocándome el bálsamo cicatrizante.
—Es divertido. Sus reacciones son entretenidas —respondí.
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En el vino y el café /FREENBECKY/
Fanfiction🩵🏳️🌈🩷 La Presidenta del Consejo Estudiantil necesita que la respeten + La chica más peligrosa de la escuela tiene una fianza por pagar = Una relación por contrato: (700 bahts x semana) + (100 bahts x c/ Beso) ⚠️ Esta historia es una adaptación...