Dos hermosas bailarinas, una es fuego, otra es aire, una baila con amor con sentimiento, otra con técnica y concentración.
Siempre han sido rivales pero ahora deberán bailar juntas y aprender una de la otra.
Del odio al amor solo hay un paso.
Espero qué sea de su agrado el capítulo, cómo saben me tomé un largo tiempo en volver a subir capitulos y es por cosas que he pasado en estos meses. Pero siempre pensaba en esta historia y que me gustaría seguirla escribiendo, si me ayudan con votos y sobre todo con comentarios volveré a escribir más seguido.
Eso me inspira y me doy cuenta que no estoy escribiendo a lectores fantasmas.
Sin más que decir disfruten su lectura.
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Años atrás en algún lugar de Estados Unidos
—Con ustedes Jaz, en la categoría de 6 a 8 años, del centro de baile Geraldine Dance con su solo lírico titulado "En mi piel"
La pequeña Jaz salió a escena con un rostro angelical, para tener 8 años era una bailarina con una técnica impecable, demasiado perfeccionista pues su sueño siempre fue bailar en las grandes ligas.
Estaba dándolo todo, sus giros, sus saltos, sus brazos lucían grandiosos, aunque en su cabeza sólo estaban las palabras que Geraldine -su instructora- le había dicho antes de salir "No me defraudes Jaz, eres una ganadora pero como todas eres reemplazable así que ya sabes lo que tienes que hacer, sino ganas el primer lugar haré que Paige tomé tu lugar"
De la nada su mente se puso en blanco en el penúltimo giró, tuvo que salir corriendo envuelta en llanto por haber olvidado la coreografía.
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Sus sollozos y gritos de histeria tras bambalinas se escuchaban hasta los asientos, la nena no podía dejar de llorar. Estaba aterrada de lo que se venía por haber salido de esa forma del escenario.
—¡No puede ser, no puede ser, no puede ser!
Su cuerpo temblaba mientras se movía de un lado a otro con nerviosismo.
—Oye, oye tranquila todo está bien.
Un joven encargado de la música intentaba calmarla pero la niña estaba temblando y llorando.
—Nooo, Geraldine va a odiarme y luego ella... -pensó en su madrina que era una mujer bastante fría y dura- No... acabo de hacer el ridículo déjeme salir de nuevo por favor. Nunca antes había hecho esto, por favor ¿Puedo entrar de nuevo?
