Dos hermosas bailarinas, una es fuego, otra es aire, una baila con amor con sentimiento, otra con técnica y concentración.
Siempre han sido rivales pero ahora deberán bailar juntas y aprender una de la otra.
Del odio al amor solo hay un paso.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Hace 8 años
Valentina estaba en el parque cercano a su casa jugando con Oliver, su primo y cómplice de travesuras.
Recién la habían escogido para interpretar al cisne negro de la historia "El lago de los cines" este era un famoso ballet compuesto por Piotr Ilich Chaikovski. En la historia, los personajes principales eran Odette el cisne blanco, y Odile el cisne negro. Odette estaba maldita por un hechizo que la convierte en cisne durante el día, mientras que Odile siendo la hija del malvado hechicero intenta engañar al príncipe haciéndose pasar por Odette. La dualidad entre el cisne blanco y el cisne negro es un tema central en la obra, representando la lucha entre el bien y el mal, la pureza y la seducción.
Era un baile demasiado maduro y podría considerarse no apto para niñas de 8 años pero a Layla; su maestra que siempre había manejado en sus bailes temas de impacto poco le importaba la edad de sus alumnas.
La pequeña pelirroja deseaba ser el cisne el blanco pero su profesora le menciono que no le quedaba ese papel por no bailar con delicadeza y menos con esa personalidad tan rebelde que poseía.
"A ti te queda el papel de Odile y a Antonia de Odette, así que esos serán no quiero oír más del asunto"
—¿Oliver tú creés que soy rara?
Preguntó mirando a los niños jugar y notando que a ella jamás la invitaban por ser considerada un bicho raro que siempre estaba despistada o perdida en su mundo además en su escuela todos le decían que era mala por ese color rojo diablo que tenía su cabello.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
—Claro que no, es decir, no eres como las otras niñas Pero eso es lo que me gusta de ti, tú eres mi prima favorita. Te gusta la aventura, mancharte de lodo y subir a árboles cosa que ninguna de nuestras primas hace. Se creen unas princesitas que sólo les gusta tomar el té y jugar a las muñecas.
Imitó a las niñas de forma dramática, simulando berrinche por no querer ensuciarse.
—Pero bailo ballet se supone que eso me hace delicada y dulce.
