𝐌𝐞𝐥𝐚𝐧𝐢𝐚 y la Orden del Fénix

𝐂𝐚𝐩𝐢𝐭𝐮𝐥𝐨 34

Melania y Mysteria volvieron a casa para terminar de preparar todo para volver a Hogwarts, sobre todo aguantar de nuevo a Umbridge, esperan que al volver ella estuviera en San Mungo y jamás saliera de ahí.

Melania estaba terminando de acomodar sus cosas, se mira en el espejo y ve el medallón que cuelga en su cuello, el que le regalo Harry, lo toma entre sus manos y sonríe al recordarlo.

-¡Ahora si!- dijo Mysteria, molesta, entrando al cuarto. Melania voltea a verla- ¡¿Por que no me dijiste que tienes aqui el basilisco?

-No sabíamos como contarte, todo paso rápido y te estabas adaptando a esta época.

-Cierto, pero se trata del basilisco de Salazar Slytherin, una de las criaturas mas hermosas, bellas y mortales del mundo.

-Escucha, el basilisco paso casi mil años bajo las tierras de Hogwarts, estaba solo, esperando un heredero que abusaría de su habilidad de petrificar o matar a alguien con la mirada... Solo le di un hogar y una familia. Si no te lo dijimos es porque no sabíamos como explicarte, ahorita esta invernando por eso no te a visto.

Mysteria entrecierra los ojos, pero suspira, sabia que Melania y su familia tuvieron buenas intenciones con el basilisco, sobre todo el porque ocultar que lo tenían, pero no podia negar que le dolía que no se lo hubieran dicho.

-Tal vez tengas razón, seria peligroso que Voldemort y sus seguidores supieran donde esta Lamia.

-¿Lamia?- pregunto Melania confundida.

-Si, así se llama el basilisco, Lamia, ¿Acaso no te lo dijo?

-No

-Salazar Slytherin lo llamo por una mitología Griega, aunque no me sorprende que no te lo diga ya que siempre odio ese nombre, tal vez por eso dejo que le pusieras uno sin decirte que ya tiene.

-Tiene sentido, y no lo culpo.

Alguien toca la puerta.

-¿Podemos pasar?- se escucho la voz de Morticia.

-Adelante.

La puerta se abre y entran Homero y Morticia con un estuche negro.

-¿Como están?, ¿Listas para volver a Hogwarts?- pregunto Homero sonriendo.

-Mientras no este Umbridge- dijo Melania.

-Cariño, se que no te gusta tu nueva profesora de Defensa Contra las Artes Oscuras, que también es la Suma Inquisidora, tu padre y yo tristemente no podemos hacer nada.

-Lo se, pero ella me tortura sin permiso y eso lo odio- apretando los puños.

Homero y Morticia se miran entre ellos preocupados, sabian que por mas que quisieran no podían hacer nada para que destituyan a Dolores Umbridge de su puesto. Enviaron una carta con una queja al Ministerio de Magia, pero obviamente fue ignorada.

-Mysteria, la tía Sloom envió esto, dijo que lo sacaron de donde se supone es tu tumba en Transilvania- dijo Homero acercandose con el estuche.

-¿Desenterraron mi tumba?- pregunto Mysteria cruzando los brazos-. Esperen ¿En Transilvania?- pregunto sorprendida.

-Si, tus nietos consideraron que seria peligroso "enterrarte" aqui- dijo Morticia sonriendo.

-Bueno, como estas aqui quisieron saber que estaba enterrado, encontraron esto, no lo pudieron abrir, pero creemos que usted si- extendiéndole el estuche.

Mysteria se acerca, preguntándose ¿Qué abran enterrado en su tumba?, ella pidió que pusieran piedras para disimular un poco el peso. Abre el estuche y abre los ojos en shock al ver lo que hay dentro, otro estuche negro con la imagen de una serpiente.