Sediento

46 6 0
                                    

VICTORIA BLACK

Me quedé estática, mi nuca descansaba en sus fornidos pectorales, su perfume inundó mis fosas nasales, no recordaba extrañar tanto esta sensación, a decir verdad... pensé que la extrañaría más.

-Gracias Theodore.- murmuré intentando apartarme pero me aprisionó entre sus brazos, tampoco coloqué mucha resistencia.

-Quiero saber... ¿de verdad sientes algo genuino por Mattheo?.- preguntó en un susurro, bajando hasta la altura de mi oído.

-Eso no te incumbe.- contesté, intentando forcejear.

-Claro que me incumbe, hasta donde sé, tu y yo no hemos roto, principessa.- respondió con ese maldito timbre de voz tan seductor.

-Creí que no era necesario decirlo, con lo último que sucedió ya estaba bastante claro.- contesté tajante, seguía envuelta entre sus brazos, con nuestros cuerpos unidos, mi nuca en su pecho, sus manos aferradas a mi cintura y mi culo rozando su entrepierna...

-Se que no lo quieres, estuvimos juntos dos años, sé cuando mientes, sé cuando finges y sé cuando algo te gusta y Riddle no te gusta.- dijo, ¿verdaderamente me conocía tanto?.

-No me jodas, tu no me conocías del todo y queda claro que yo a ti menos.- contesté molesta, esta vez logrando zafarme de su agarre y dejando los libros botados en la estantería para salir de la biblioteca.

-Victoria, espera.- exigió yendo detrás de mi.

-Déjame en paz Nott.- contesté abandonando la biblioteca a paso rápido.

-Que vengas, joder.- exclamó detrás de mi, logró tomar de mi brazo y me volteó para verlo.

-¡Que quieres!.- exclamé furiosa.

-A ti, ¡carajo!, a ti.- respondió, en sus ojos se podía ver la mezcla de emociones, molestia, agobio, preocupación...

-¿A MÍ?.-alcé la voz.- joder Nott, todas las mañanas llegas tarde por quedarte follando con tu novia, es más, los escuché follar cuando me iba yendo de la habitación de Mattheo.-

-Llego tarde todas las mañanas porque voy a esconderme a las escaleras para ver si bajas sola a desayunar, quiero encontrar la oportunidad de hablarte sin ser interrumpidos pero siempre estás con Riddle, por las noches e intentado entrar a la sala común de Gryffindor pero alguien le prohibió a la señora gorda del cuadro que no me deje entrar después de las 8pm, ¡y esa vez que pasaste por mi puta habitación estaba follando porque sabía que me escucharías, mi sangre hirvió cuando te fuiste con Riddle a su maldita habitación! ¿No esperabas que me quedaría parado ahí o si?.- exclamó, me zafé de su agarre pero no me iba a ir sin antes acabar con esto de una buena vez.

-Ya no quiero nada de ti Nott, ya quedó todo bastante claro, lo que alguna vez tuvimos se acabó, lo arruinaste Theodore, LO ARRUINASTE.- contesté, mis ojos se cristalizaron pero no derramaría ni una lágrima más por él, le di la espalda y comencé a avanzar pero nuevamente me tomó del brazo.

-No lo hagas Victoria, sé que aún me amas, per favore principessa, sabes que no soy de rogar, pero no quiero perderte.- respondió, mierda...

-Tú no me amas Nott, tu amas la idea de que yo te ame porque en el fondo sabes que tu novia no te ama, no al menos como lo hice yo.- exclamé segura.

-Victoria, ¡¡joder!!, Riddle no es para ti.- alzó la voz, estaba muy exaltado.

-¿¡Que sabes tú!?, suéltame.- contesté, ya estaba a punto de explotar.

-Victoria hablémoslo.- respondió bajando su tonalidad de voz.

-¡Que me sueltes!.- exclamé, por más que forcejeaba no quería dejarme ir.

Adictiva perdiciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora