Frenesí

CAPÍTULO 16

Evelyn.

Estamos reunidos los supar alrededor de la gran mesa aguardando la presencia de los generales, los cuales como siempre se hacen esperar.

—¿Estabas haciendo ejercicio?—cuestiona Rosse a mi lado. —Estás muy roja, pareces que hubieras corrido un maratón.

Mierda, mierda, mierda. «Qué no se den cuenta por favor». No quiero hablar de eso.

—Más bien se ve recién follada—se ríe bajito mi mejor amiga y la miro mal, ojeo la estancia y todos están en su mundo, nadie presta atención a nuestra conversación.

Gracias a los dioses.

—Hoy ha sido un día caluroso—le resto importancia. —En fin, ¿Aceptaste ser la novia de Alexis?—pregunto a Rosse deseando que la conversación cambie a otro rumbo.

—Aún no responde a su proposición—interviene Paula. —Deberías decidir pronto Rosse—señala disimuladamente al aludido qué está en una acalorada conversación con Adelle.

—Me enteré que ella está perdidamente enamorada de él—murmura Rosse.

—Con razón te odia—Beck repara con intensidad mi sonrojado rostro y me muevo incómoda, me conoce tanto como yo a ella, debe estar pensando que le escondo algo, por algo ha sido mi mejor amiga desde siempre.

En lo cierto estará al pensar así. No debería esconderle ni a ella, ni a las demás, qué me estoy acostando con Gabriel, pero no deseo que se convierta en un chisme. Quiero disfrutar del sexo qué me brinda sin remordimiento ni vacilaciones.

Después de todo, cuando la atracción se desvanezca, acabará todo.

—No sé qué hacer chicas, siento que todo va muy rápido y cuando las cosas suceden así, no terminan bien—repone.

Entiendo como se siente, también pienso que los acostones qué tengo con el general van demasiado de prisa, sólo espero que nuestros encuentros no terminen en futuros dolores de cabeza.

—Deberías darte la oportunidad cariño, lo mereces —la anima Beck, Paula y yo asentimos estando de acuerdo.

A Rosse la conocimos hace cinco años en Washington, sus padres eran coroneles activos de la CIFMI’S en esa sede, sin embargo, fueron asesinados brutalmente en una misión contra varios grupos insurgentes en México, sufrieron interminables torturas antes de morir, cientos de agentes murieron de la misma manera en aquella misión.

Aún no sé cómo Rosse puede ser tan auténtica y risueña después de eso, yo no sabría qué hacer si algo le pasara a mis padres o a mi hermano mayor.

Definitivamente la vida no ha sido justa con ella en ningún sentido, según nos ha relatado, no tiene más familia que sus padres fallecidos, se encuentra sola en el mundo sin ningún familiar sanguíneo, salvo nosotras que la amamos como si fuera nuestra hermana; por eso su deseo de poder tener su propia familia es tan fuerte, quiere ser amada por un buen hombre.

Espero que Alexis sea ese hombre.

Ya qué, tampoco ha tenido buenas relaciones amorosas a lo largo de los años, hace aproximadamente cinco años sufrió violencia por parte de su antiguo novio, no sabemos quién fue ni qué pasó realmente, lo único qué nos dijo fue que era parte de su pasado y no quería ahondar más en el, respetamos su decisión y ahora solo queremos que nuestra amiga sea feliz.

Merece ser feliz.

—Me sigue pareciendo muy rápido, pero lo haré entonces—susurra con una sonrisa. —Me gusta mucho.