Eventualmente me Convertiré en un Héroe de la Justicia 2

Capítulo 230

Capítulo 230

Está es una traduccion sacada de Webnovel, todos los derechos reservados a su autor original DaoistOneTouch, si ahí algún error en la traducción háganmelo saber y trataré de corregirlo.
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En la costa, los gritos de los monstruos marinos atrapados en el mar de gente eran incesantes. Ése era el poder del sistema de milicias: en tiempos de paz, la gente se dedicaba a la producción, pero en tiempos de guerra, se convertían en soldados armados con cuchillos de carnicero.

Al enterarse del ataque de los monstruos marinos a Cornualles, Scathach se apresuró a ayudar en la defensa. Incluso ella no pudo evitar quedarse conmocionada cuando presenció la escena que tenía ante sí. Si bien había visto héroes poderosos y ejércitos con muchos héroes, nunca había visto civiles tan poderosos.

¿Alguien ha visto alguna vez un país lleno de héroes? Es difícil decirlo. Sin embargo, es posible que ese rey fuera capaz de lograr tal hazaña. De hecho, con el tiempo suficiente, es posible que hubiera podido crear un país donde todos fueran héroes.

...

Shirou estaba sentado en el centro de las fortificaciones de la línea del frente norte, tratando un asunto tras otro con una expresión seria. Guenivere ya le había informado sobre lo que había sucedido en Cornualles, pero no parecía preocupado en lo más mínimo. Después de todo, Cornualles era su fortaleza y él era muy consciente de sus ventajas y debilidades.

La mayor ventaja de Cornualles era su ubicación frente al mar, lo que permitió el desarrollo de una próspera economía marítima. Sin embargo, esta misma ubicación también la hacía vulnerable a los ataques marítimos. En previsión de tales amenazas, Shirou había construido fortificaciones militares a lo largo de la costa hacía mucho tiempo.

Para reforzar aún más las defensas de Cornualles, más de 80.000 habitantes habían recibido entrenamiento militar, con excepción de los ancianos, las mujeres y los niños. Además, varias fuerzas de defensa habían sido dotadas de habilidades innatas. A menos que el ejército de Vortigern pudiera derrotarlo primero, no existía una amenaza real para Cornualles.

Sin embargo, dejó que Scathach se ocupara primero de los monstruos marinos antes de dirigirse a Irlanda y centrarse en la situación en el norte.

La guerra había durado más de un mes y los soldados de Shirou ya habían sufrido más de mil bajas. Los recursos estratégicos también se estaban agotando rápidamente, y el recurso que se consumía más rápido era el Gáe Bolg. Las reservas de Gáe Bolg que se habían acumulado durante los últimos dos años estaban disminuyendo a un ritmo alarmante. Aunque Shirou estaba mentalmente preparado para esto, no pudo evitar sentir una punzada en los párpados cuando vio que estaba sucediendo.

Sin duda, la única persona en la isla capaz de resistir los ataques de Vortigern de frente era Shirou. Incluso si todos los demás reyes unieran sus fuerzas, no podrían resistir ni una sola ola del asalto de Vortigern.

Su capacidad para resistir los ataques de Vortigern durante diez años en el norte no se debió a ningún otro factor, sino a que Vortigern no era tan poderoso como lo es ahora y el Muro de Adriano todavía estaba en pie en ese momento.

A diferencia de los otros reyes, Shirou había empezado desde cero y había ido acumulando poder poco a poco con el tiempo. La diferencia entre los dos era tan marcada como la noche y el día. Sin embargo, el rápido agotamiento de los recursos le estaba causando mucho dolor a Shirou.

Afortunadamente, durante el último mes se habian recibido varias buenas noticias. En primer lugar, Gaheris había logrado que los reyes de Irlanda del Norte entraran en Escocia. Mientras tanto, Gawain, Lamorak y otros, junto con el rey Ban y Bors, habían lanzado ataques a los territorios del sur de Escocia tanto por tierra como por mar, así como a los sajones que se encontraban al otro lado del mar.

Los reyes estaban ampliando sus ejércitos y protegiendo simultáneamente sus ciudades mientras invadían Escocia, formando un ataque en pinza desde el norte y el sur. No se habían atrevido a intentarlo antes porque se encontraban en una pequeña edad de hielo y no había suficiente comida para sostener una campaña de ese calibre.

Sin embargo, como Shirou les vendía comida constantemente, ya no tenían de qué preocuparse y miraban con ansias la tierra fértil de Escocia. Como resultado, se volvieron cada vez más frenéticos y agresivos en sus ataques.

Mientras el bando de Shirou no se derrumbara, era solo cuestión de tiempo antes de que Vortigern fuera derrotado. Después de liberar a los bardos, también hubo movimientos por parte de los sajones. Sin duda, aquellos que estaban insatisfechos con Vortigern comenzaron a hacer movimientos inusuales.

Era normal que los partidos insatisfechos hicieran movimientos inusuales, ya que ni siquiera podía satisfacer a su ejército y ahora tenía la tarea de defender Caerleon y al mismo tiempo atacar otras ciudades a su alrededor.

Desafortunadamente para Vortigern, Caerleon ya estaba siendo vigilado por Scathach y ahora lo estaba siendo por Artoria. Siempre que había algún movimiento, Artoria dirigía a sus tropas al ataque, lo que hacía que fuera aún más difícil para Vortigern mantener el control.

Aunque Artoria no era igual a Scathach en cuanto a artes marciales, seguía siendo fuerte y poseía un gran poder destructivo. Mientras que Scathach solía matar a sus oponentes apuñalándolos con su lanza y usando las Runas Primordiales, Artoria tenía un enfoque diferente. Disparaba un rayo de luz directamente a sus objetivos.

Artoria, que todavía estaba viva, tenía un límite superior notablemente alto para su energía mágica gracias al Factor Dragón Rojo y al Corazón de Dragón Rojo. Su velocidad de reposición de maná también era comparable a la de Shirou, que estaba usando la Flor del Mal.

Este cambio afectó duramente a los sajones. En un principio habían seguido a Vortigern para poder saquear tierras y comer hasta saciarse, pero ahora ni siquiera podía mantenerlos y los trataba como alimento para las bestias. Además, los bardos cantaban sobre la belleza de Cornualles y la sabiduría de Shirou se hacía cada vez más evidente.

Como resultado de ello surgieron disensiones entre los sajones.

Algunos de los sajones ya se habían rendido y habían jurado lealtad a Shirou. Sin embargo, él tenía miedo de aceptar su rendición, ya que sospechaba que podría ser un truco de Vortigern. El acto de fingir una rendición ya era algo común durante los tiempos antiguos de su mundo, por lo que tenía que ser cauteloso.

Shirou decidió no aceptar la rendición de los sajones y, en su lugar, solo envió a sus bardos para que les contaran la belleza de Cornualles. Sabía que, cuando llegara el momento adecuado, los sajones comenzarían a rebelarse por su cuenta.

Vortigern intentó difundir rumores falsos sobre Shirou enviando bardos sajones, pero Shirou los convocó y los trató con generosidad. Les dio beneficios y les permitió irse con la intención de difundir cosas buenas sobre él.

Ambos bandos se enzarzaron en una guerra de propaganda, pero en esta batalla silenciosa, Shirou llevaba la voz cantante. Según el informe de Artoria y la clarividencia de Merlín, los sajones de Caerleon estaban empezando a ponerse en marcha.

Esta fue una buena noticia.

...

En Caerleon, Meksis recibió un bardo que había insertado en secreto y preguntó con una sonrisa amable: "¿Lo has encontrado?"

"Lo siento, señor Meksis. No pude hacer muchos movimientos y solo pude encontrar un solo cabello.", El bardo sacó un mechón de cabello dorado.

"Solo un cabello... pero será suficiente". Meksis tomó el cabello y dijo con una sonrisa amable: "Ve a Camelot. El rey logrará la victoria y tú serás recompensado apropiadamente con una hermosa vida".

"¡Gracias, señor Meksis!", El bardo se marchó feliz. Meksis era un hombre de palabra y sus promesas sin duda se cumplirían.

"Sólo un cabello... pero aún puede extraer el concepto".

"Majestad, si un dios pudiera cumplir vuestro deseo, yo os convertiría en un verdadero dios... pero como hada de esta isla, quizá lo que estoy haciendo sea un verdadero error", continuó, mirando la luz de la luna fuera de la ventana. Suspiró un momento, luego se puso de pie y su expresión se volvió firme.

"Sin embargo, he tomado una decisión. Haré todo lo que esté a mi alcance para ayudarte a lograr tu deseo, incluso si eso significa ir en contra de mi propia especie".