Capítulo 231

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Capítulo 231

Está es una traduccion sacada de Webnovel, todos los derechos reservados a su autor original DaoistOneTouch, si ahí algún error en la traducción háganmelo saber y trataré de corregirlo.
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"¡Arthur, sal y lucha contra mí!", La voz rugiente de Vortigern resonó en el campo de bestias. Sostenía la Lanza Sagrada Rhongomyniad y montaba una bestia mágica, gritando en medio de la marea de bestias.

Shirou se paró en la pared, con expresión indiferente mientras observaba el desierto. Llamó a Merlín y señaló a Vortigern, diciendo: "Dale una paliza".

Merlín asintió y agitó su bastón. En un instante, un auténtico cañón de éter fue disparado hacia Vortigern.

Vortigern agitó su Lanza Sagrada, destrozando el Cañón de Éter Verdadero de Merlín con una feroz expresión de ira en su rostro.

"¡Arturo, si realmente eres el rey, sal y lucha contra mí!", gritó Vortigern.

"¡No eres más que un cobarde! ¿Cómo puedes llamarte rey?", gritó, y su voz resonó en todo el campo de batalla.

Shirou mantuvo la calma y decidió ignorar las burlas de Vortigern. Sin embargo, los caballeros que estaban a su lado estaban furiosos.

Ignoró los insultos de Vortigern y dijo con calma: "Que grite. No es más que la ira impotente de una bestia atrapada".

Después de una breve pausa, continuó: "Concéntrense en defender la barrera. El contraataque llegará pronto".

La multitud reconoció sus órdenes con un rotundo "¡Sí!".

Shirou miró al furioso Vortigern con una mueca de desprecio.

Había estado enzarzado en batalla con Vortigern durante casi dos meses, mientras Gawain, los reyes Gaheris, Altrouge, así como el rey Ban y Bors, y otras fuerzas aliadas estaban ocupados conquistando Escocia y Sajonia.

Como resultado, los ataques de Vortigern se habían vuelto cada vez más débiles en los últimos días.

El ataque más notable fue el bombardeo constante de la Lanza Sagrada Rhongomyniad.

Al comienzo del ataque, la barrera se sacudió violentamente, lo que hizo que Shirou temblara de miedo, temiendo que la barrera se rompiera. Sin embargo, a medida que pasaba el tiempo, los ataques representaban cada vez menos amenaza para la barrera.

Scathach ya había llegado a Irlanda, usando su reputación para asegurar los barcos de los reyes irlandeses y lanzar una invasión por la retaguardia de Camelot.

La derrota de Vortigern era inevitable; era solo cuestión de tiempo. Sin embargo, los incesantes ataques de las bestias seguían siendo feroces y causaban bajas significativas entre las tropas regulares de Shirou. El rápido agotamiento de los suministros se sumaba a su angustia.

Esos recursos se acumularon con mucho esfuerzo, pero había que gastarlos para ganar la batalla. No había otra opción.

Mientras Shirou se paraba en la pared y miraba el mar de bestias aullando, estaba lleno de una determinación firme de salir victorioso. Sin embargo, no pudo evitar dejar escapar un leve suspiro.

"¿Por qué suspiras, mi rey?", preguntó Merlín.

"Es la gran cantidad de bestias. Si pudiéramos replicar las tácticas que usamos en Caerleon, podríamos aliviar un poco la presión".

Hace dos años, cuando Shirou defendió el castillo de Caerleon, se enfrentó a un mar de bestias similar. Sin embargo, sus tropas eran mucho más débiles en ese momento, con soldados individuales que carecían de fuerza y los suministros eran mucho menos abundantes que ahora. Si no fuera por el plan de Tristan, probablemente habrían perecido en Caerleon.

Eventualmente me Convertiré en un Héroe de la Justicia 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora