El portal se cerró detrás de ellos con un destello silencioso, dejando al grupo en un paisaje completamente distinto al que habían dejado. Ethan fue el primero en dar un paso al frente, inhalando profundamente el aire fresco del lugar. Frente a ellos se extendía un tranquilo suburbio, con casas bien mantenidas, autos estacionados en las entradas y jardines que, aunque un poco descuidados, aún mostraban signos de cuidado reciente.El ambiente era engañosamente pacífico.
Rebecca, con su habitual curiosidad científica, frunció el ceño mientras miraba a su alrededor.
—Esto… no parece un lugar en ruinas. ¿Dónde estamos?
Ethan se quedó en silencio por un momento, sus ojos recorriendo cada detalle: una mujer regando las plantas frente a una casa, un niño jugando con una pelota en la acera, un hombre reparando la cerca de madera de su jardín. Era como si hubieran retrocedido a un tiempo antes del caos de Raccoon City. Pero Ethan sabía mejor. Había algo en el ambiente, un peso invisible, que le decía que no todo era lo que parecía.Rebecca y Jill se acercaron a él, sus rostros reflejando una mezcla de confusión y preocupación. Jill fue la primera en hablar.
—¿Condado de King? ¿Te suena?Ethan asintió lentamente, su voz tensa.
—Sí. Aunque este lugar… no es como lo esperaba.Four Eyes observó con desdén una camioneta oxidada aparcada en una entrada, mientras Ghost mantenía la mirada en las casas, atento a cualquier movimiento sospechoso.
—¿Qué hacemos ahora? —preguntó Ghost finalmente, rompiendo el silencio.Ethan permaneció pensativo. Desde su llegada, había notado que las ropas y las armas que llevaban los hacían destacar. Sus vestimentas estaban gastadas por el combate y llenas de elementos tácticos. Si alguien los veía, sería imposible no sospechar de sus intenciones.
—No podemos caminar por aquí luciendo como un grupo de matones, —dijo Ethan finalmente. Miró al grupo uno por uno, evaluando sus apariencias. Jill tenía una expresión de sorpresa, mientras Rebecca parecía estar considerando sus palabras. Four Eyes y Ada intercambiaron miradas, claramente poco convencidas.
—¿Y qué propones? —preguntó Ada con un tono casi burlón.
Ethan ignoró su sarcasmo y continuó.
—Voy a ir al pueblo cercano. Necesitamos ropa para pasar desapercibidos. Si nos quedamos con este atuendo, nos delatarán rápidamente.Rebecca frunció el ceño y le lanzó una mirada preocupada.
—¿Quieres que vayas solo? Es un riesgo.Ethan le sonrió de forma tranquilizadora.
—No, Rebecca, te necesito a ti. Tu ropa es la más normal, por lo que si alguien nos ve, no levantaremos sospechas. Yo me quitaré el chaleco para pasar desapercibido. Es mejor no atraer atención innecesaria.Rebecca vaciló un momento, pero luego asintió.
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Viaje Multiversal Apocaliptico.
Fantasyesto es un yo reencarnando no habrá poderes op ni un sistema ni nada de eso trataré que se lo más realista posible