Unificando el espíritu

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No era de extrañar que la azotea estuviera prohibida para los estudiantes, la UA era un edificio alto. Incluso con Dones, alguien podría resultar gravemente herido o incluso morir a esa altura. Este mismo pensamiento comenzó a despertar un recuerdo particularmente malo en Mineta.

Ocurrió a mitad de su segundo año en Orudera Middle. Y Bakugou estaba pisoteando el sueño de Midoriya por enésima vez. Si bien Mineta había intentado argumentar en su contra, fue inútil como siempre. Entonces el bastardo dijo algo que estuvo cerca de terminar con todo.

"Si Deku quiere tanto ser un héroe, entonces debería tirarse desde el techo. Quién sabe, tal vez tenga un don en la próxima vida".

Mineta apretó su mano derecha, sintiendo que sus uñas se clavaban en su piel. Estaba contento de que Midoriya nunca hubiera seguido esa 'sugerencia' y se hubiera mantenido alejado de cualquier saliente. Pero tuvieron que pasar mucho tiempo recuperándose de ese comentario. Y aunque Bakugou nunca volvió a decir algo así... en realidad tampoco se había disculpado.

Hasta el día de hoy.

—Tengo tantas razones para odiar a Bakugou que estoy empezando a olvidarlas —murmuró Mineta.

"¡Mierda! ¡Esto es genial!", gritó Kirishima, sacando a Mineta de sus pensamientos. El chico más bajo se dio la vuelta y notó cómo sus compañeros se estaban divirtiendo. Yaoyorozu había creado una manta para que todos no tuvieran que sentarse en el cemento áspero, convirtiendo prácticamente su almuerzo en un picnic improvisado. Fenghuang les estaba sirviendo té mientras 1A se servía bollos de cerdo.

"Me alegra que te gusten. Mi hijo y mi hija apreciarán tus amables palabras. Han puesto mucho esfuerzo en hacerlas para los estudiantes y maestros del templo", dijo Fenghuang con una cálida sonrisa.

"Sabes, ¿cómo hizo Mineta para hacer prácticas bajo tu dirección, Fenghuang Shifu? No creo que tu agencia fuera una de las opciones disponibles que teníamos", preguntó Ojiro mientras tomaba una taza de té.

—Mi joven alumno se topó con una condición secreta que había establecido Aizawa-sensei. Si alguien no lograba ser pasante de alguien, él me lo enviaría a mí. Como era de esperar, todas las opciones de Mineta se cancelaron por una razón u otra. Y, por lo tanto, aquí estamos —respondió. El chico más bajo recordó esa extraña cadena de eventos y se dio cuenta de lo rápido que Aizawa organizó la transferencia. Y aunque Mineta podría haberse ido sin saber de sus tortuosas maquinaciones...

Probablemente esto fue para mejor.

—Maldita sea, realmente tienes suerte —dijo Jirou con una sonrisa burlona. Mineta no sabía nada de eso, ya que algo estaba a punto de suceder. Aun así, fue interesante ver con qué rapidez Shifu se ganó el cariño de sus compañeros de clase. Incluso Todoroki se mostró un poco más hablador cuando Fenghuang preguntó sobre el estado de sus estudios. Pero en el momento en que todos se tomaron un descanso para comer o beber algo, su tono cambió sutilmente.

—¿Tienes tu bastón, mi joven alumno? —preguntó mientras tomaba su bastón.

"Sí, lo hago...", respondió Mineta tragando saliva. Luego metió la mano en su bolsillo y la sacó. La heroína se levantó y se quitó la capa de plumas, pidiéndole a Iida que la guardara. Y mientras 1A disfrutaba felizmente de la comida, el clima y la compañía... Volvió a mirar a su estudiante con una mirada fulminante.

El chico más bajo inmediatamente extendió su bastón y lo levantó. Fenghuang estaba frente a él y lo hizo tambalearse hacia atrás con un amplio arco negro. El sonido agudo del choque llamó la atención de 1A, sus ojos se abrieron ante la vista que tenían ante ellos. La Heroína inmediatamente dio un paso adelante, su bastón girando a su alrededor. Los pensamientos de Mineta quedaron atrapados en un bucle. Sabía que una vez que alguien quedara atrapado dentro de su burbuja de Taiji Fluido, no podría salir.

El santo y El pecador (Traduccion) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora