El santo y El pecador (Traduccion)

Donde Empezamos

El próximo año y medio ha sido difícil pero insustituible para Midoriya y Mineta. Para sorpresa del primero, el chico más bajo se quedó con él incluso después de su próximo encuentro violento con Bakugou Katsuki. Y el siguiente después de ese. Y el siguiente después de ese…

Claro, a los dos les echarían la mierda constantemente, pero al menos se tenían el uno al otro como apoyo. Sin embargo, en esos días en los que no eran objetivos, solo estaba lleno de momentos agradables y felices en la sala de juegos. Largas charlas sobre los diseños técnicos y estéticos de los disfraces de Hero. Y ese hilarante accidente que involucra a un artista apasionado y un número enfermizo de baguettes.

Probado y probado, Midoriya y Mineta se mantuvieron juntos en las buenas y en las malas. Proscritos y contra el mundo, continúan luchando contra las probabilidades desesperadas y siendo lo que estaban destinados a ser...

"¿Una banda de música? No sabía que esta escuela tenía una". Midoriya comentó. El chico más bajo sonrió y colocó un volante que había encontrado clavado en el tablón de anuncios de la escuela. Decía: '¡Sé ruidoso, sé orgulloso! ¡Ven y únete a la nueva Marching Band y deja que tus sonidos rugan!

"Aparentemente se armó este año, solo se agregaron suficientes miembros a la Brass Band y están buscando aumentar más sus números. Incluso aceptarán tercer año, siempre que puedas tocar un instrumento bien. Entonces, ¿qué quieres? ¿Qué piensas? ¿Sí o no?"

Actualmente, el dúo estaba en el aula de 3C, con sus compañeros de clase todos hablando dentro de sus respectivas camarillas. En todo caso, la única forma de sobrevivir a la naturaleza genérica de Orudera Middle era enterrarse en amigos o estudiar. Y eso llevaría a diferentes grupos excéntricos formando juntos y coloreando el alumnado con sus características. Aunque para Midoriya y Mineta, eso solo significaba que había más gente a la que defender, ya que estaban incluso por debajo de otros marginados de la escala social.

Han sido solo ellos desde el día en que se conocieron, nadie más quería unirse a su círculo de confianza.

"No lo sé..." murmuró Midoriya, reflexionando tímidamente sobre la perspectiva.

"¡Pero hay tantas chicas calientes en él! Akari está en él y sé que sientes algo por ella". Mineta argumentó, susurrando esa última declaración. El rostro de su amigo se iluminó y comenzó a cubrirse la cabeza con los brazos, un gesto inútil ya que no ayudaba a ocultar su vergüenza. Aunque eso no impidió que el chico de cabello verde le lanzara una réplica a Mineta.

"¿Puedes tocar un instrumento?"

"Bueno, yo–"

"Un verdadero instrumento".

"... ¿Por qué tienes que matar mi zumbido de esa manera? Un tipo como yo solo tiene un sueño, acostarme con todas las damas que pueda". Mineta dijo, la voz sin una pizca de vacilación mientras se erguía. Midoriya solo soltó una pequeña risita ante esa declaración, derribando la sensación de euforia del chico más bajo.

"Comencemos por conseguir una cita antes de intentar un harén".

"¡Oye! ¡Estarán sobre mí cuando 'Grape Juice' haga su debut! Ya puedo verlo ahora...", respondió Mineta, un poco excitado con sus fantasías más salvajes. Los otros estudiantes en la clase le dieron al chico bajo miradas extrañas y risitas burlonas, pero simplemente dejaron que los dos parias continuaran con sus tonterías. Midoriya ignoró la atención innecesaria que su amigo estaba atrayendo, como sucede con bastante frecuencia, y continuó la conversación con normalidad.

"Sigo pensando que 'Grape Shot' suena más genial. Pero los nombres extraños tienen cierta novedad, algunos incluso llegaron al Salón de la Fama". Dijo, devanándose los sesos en busca de Héroes con nombres únicos.