Taehyung, un joven serio y reservado que creció con su abuela, sin recuerdos claros de su infancia ni de sus padres. Jungkook, un alfa arrogante y coqueto que odia a los omegas. ¿Qué pasará cuando se encuentren? ¿Podrán sus personalidades llevarlos...
Después de semanas llenas de trabajo, investigaciones y la constante preparación de Taehyung, el grupo decidió que ese fin de semana dedicarían tiempo para relajarse, enfocándose en pasar momentos más personales y fortalecer sus vínculos.
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Jimin insistió en una tarde de cocina con Yoongi sería el plan perfecto para relajarse. Los dos se instalaron en la cocina de Jungkook y Tae, decididos a probar una nueva receta.
Jimin había estado organizando los ingredientes desde temprano.
—¿Estás listo, hyung? Hoy aprenderás a cocinar algo más que ramen. —le dijo, con una sonrisa desafiante.
—No te entusiasmes tanto. —respondió Yoongi mientras observaba los utensilios con cierta desconfianza.
Conforme avanzaba el día, entre risas y pequeños accidentes culinarios (como cuando Yoongi accidentalmente usó azúcar en lugar de sal), ambos disfrutaron de la experiencia.
—¿Te das cuenta de que me estás convirtiendo en un chef contra mi voluntad? —bromeó Yoongi, mientras decoraba el pastel.
Jimin le respondió acercándose con un beso rápido en la mejilla.
—Lo hago porque sé que eres capaz de todo.
Por la noche, compartieron la cena con Tae y Jungkook, quienes no paraban de elogiar el postre, a pesar de que Jimin se encargó de recalcar que "el mérito era suyo".
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Este evento organizado por Namjoon, quien invitó a Jin a un picnic en el jardín de la casa de este último. Jin, emocionado, preparó una variedad de bocadillos para la ocasión.
Namjoon llegó temprano para ayudar con los preparativos, pero Jin, con su habitual energía, ya tenía todo listo.
—¿Siempre eres tan eficiente? —preguntó Namjoon, sorprendido.
—Solo cuando quiero impresionar a alguien especial. —respondió Jin con un guiño, provocando que Namjoon se ruborizara.
El día transcurrió entre charlas profundas sobre sus vidas y momentos divertidos mientras Jin intentaba enseñar a Namjoon a hacer "la selfie perfecta".
—Hyung, no es tan complicado, pero… creo que prefiero mirar tu rostro en persona. —dijo Namjoon, sin darse cuenta de lo directo que sonaba.
Jin lo miró, sorprendido, antes de responder con una sonrisa.
—Tienes potencial, Joonie.
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Jackson convenció a Hoseok de acompañarlo al gimnasio, prometiéndole que sería más un día de risas que de esfuerzo.
Desde el inicio, Jackson mostró su lado competitivo.
—Hyung, vamos a ver quién puede levantar más. —dijo, desafiando a Hoseok.
—¿De verdad crees que puedes ganarme? —respondió Hoseok, entre risas.
Entre ejercicios y bromas, Hoseok demostró ser más fuerte de lo que Jackson esperaba, levantándolo en el aire frente a los demás.
—¡Esto no estaba en el plan! —gritó Jackson, riendo a carcajadas mientras Hoseok lo balanceaba como si fuera una pesa.
La tarde terminó con ambos exhaustos, compartiendo una bebida energética y riendo sobre quién había ganado.
—Creo que hicimos un buen equipo, amorcito. —admitió Jackson.
—Siempre lo hacemos, cariño.
Este fin de semana ayudó a cada pareja a reconectar y a tomar fuerzas para los días complicados que estaban por venir. Mientras tanto, Jungkook y Tae se encargaban de disfrutar juntos estos momentos y agradecían tener a un grupo tan unido a su lado.
