-Despierta- decía Nate empujando un poco a Jane, que se había quedado dormida a media clase de ciencias-Si te llevan a dirección no sera culpa mía....¡Pequeña durmiente!
Segundos después de varios empujones Jane despertó un poco atontada, su pequeña siesta tomo unos cuantos minutos, ignorada por el profesor, pero al parecer los estudiantes de aquella aula seguían mirándola después de su pequeño incidente. Aquella clase le parecía un completo infierno, no hacia mas que recostarse sobre su mano y escuchar la tranquila voz de aquel profesor que era un completo desconocido para ella. En este trascurso de media hora, el tiempo de cada clase, se dio cuenta de algunas miradas que las chicas del aula le lanzaban a Nate, era guapo y Jane estaba segura de eso, pero aquellas chicas cazaban al chico como si fueran bestias a cada momento lo seguían y se enteraban de toda su vida al darse cuenta de esto, Jane solo volteaba los ojos y se reía en silencio de aquellas manifestaciones de acoso que parecían incomodarle a Nathan.
Jane se volteo un poco para dirigirse a Nate
-¿Con cual de esas chicas saldrás esta noche? ¡Galan!¡Grr!- dijo en tono burlón.
-¡Ja! Con todas.. solo si me haces un favor...-la expresión de Nate cambio de pronto, ahora era mas desafiante
-Tu dices, quiero verte sufrir durante una semana con todas esas chicas agarrándote el pelo mientras lo huelen como maniáticas y haciendo murales de ti en sus casilleros..-
-Muy bien, ¿Ves a esa chica de allá? La ultima fila, ultimo asiento- Jane desvió su mirada a la chica de la ultima fila, nada sencilla por cierto, traía un vestuario demasiado combinado y el pelo perfectamente cuidado con un tono castaño claro de unos grandes ojos grisáceos, a juzgar por su mirada podría decirse que ella y Jane eran muy parecidas.- Muy bien, pues ve, háblale y pídele que venga a casa mañana por la tarde-
-¿Ella?¿Te gusta?-Nathan asintió, soltó un suspiro- Lo haré, después de clase.
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Mas tarde en la pequeña cafetería del colegio, Nate se encontraba en una esquina junto a la entrada de la pequeña estancia, Jane por su parte, caminaba con pasos seguros como siempre, hacia aquella chica desconocida. En la mesa donde estaba situada aquella chica de cabellos castaños, estaba repleta de personas, supuso que era muy popular, ya que era el centro de atención.
-Jane, espera- sintió como alguien la jalaba del brazo no sabia quien era hasta que volteo la mirada, Nate sostenía su brazo- Se llama Kate Butterfield
-Gracias, me olvide de ese detalle- Jane sonrió un poco y aparto la vista de Nate.
Siguió su camino, estaba a unos pasos de la mesa cuando de pronto todas las personas de aquella mesa fijaron su vista hacia ella, analizándola como un león a su presa. Esta mañana no se había preocupado en su vestimenta, tenia puestos los jeans de hace dos temporadas y una blusa rasgada de tirantes, blanca, la palabra "cool" cubría todo el centro de la blusa, se avergonzó un poco de su atuendo cuando observo que algunas chicas susurraban malas criticas.
-Kate, ¿Podemos hablar un momento?- dijo Jane, si Nate hubiera visto su expresión al decir aquellas palabras, se habría arrepentido de pedirle tal favor, la chica se veía asustada.
Kate se levanto deprisa de su asiento, camino algunos pasos hacia Jane.
-¿Quien eres tu?-dijo Kate, totalmente cortante y con un gesto que hizo incomodar más a Jane.
-Jane Wells- sonrió un poco, tal vez así ganaría confianza- Oye, mira se que no nos conocemos también, pero podríamos, ¿podrías ir a mi casa mañana por la tarde? se que suena absurdo, lose, pero...-Algo liquido que caía sobre su camisa interrumpió sus palabras, miro su blusa y sintió el frappe de la chica por todo su pecho, Kate segundos antes había tomado la bebida del chico de la izquierda arrojándosela a Jane. Todos los de aquella mesa estaban riendo a carcajadas.
-Lindura, vete de aquí ¿Si?-Jane quería lanzarse hacia ella a golpes, no podía mas, estaba completamente enojada, quería matar a esa chica.
Todos en aquella cafetería observaron la expresión de Jane, ella no podía pronunciar una palabra, estaba acostumbrada a ser el centro de atención, pero nunca de esa forma.
-Ven, vamos-Nathan abrazo a Jane por la espalda alejándola con sus brazos de aquel pequeño infierno. Estando afuera de aquel lugar Nathan no sabia que decirle, conocía lo mala que era Kate y nunca se lo había dicho a Jane, sabia que si se lo decía ella lo odiaría, pero tendría que aceptar que muy en el fondo se lo merecía,Nate sabia como era Jane, pero no podía mentirle.
-Tengo la culpa- declaro Nathan después de acomodar a Jane en una banca justo en el pequeño jardín del colegia.
-No, no la tienes, tu no sabias lo que haría-
-Si lo sabia-
-¿De que hablas?- Jane se acomodo un poco en la banca, no dejaba de mirar a Nate.
-Sabia como era ella y nunca te lo dije-
-Tienes razón es tu culpa, pero eso no quita que aquella chica me declaro la guerra y tu tienes que ayudarme a ganarla-
-Sabes que no lo haré, muy en el fondo sabes que lo mereces-
-¿No paras nunca de decir estupideces verdad?
-¿Ves lo que digo? Tu y yo sabemos que has humillado a varias chicas al igual que Kate-
-Olvida lo que dije, siempre piensas que yo soy la mala de la historia, no entiendo para que te hablo, nunca escuchas-
-Nunca escucho a personas como tu, Kate solo seria una aventura para mi pero eso no le quita que sea una niña malcriada, por lo menos ella si lo acepta-
Nate había hecho enfurecer totalmente a Jane, se fue a casa, tomo un taxi y planeo como vengarse de aquella chica, Kate, nadie humillaba a Jane de esa forma, y aquella chica habia despertado a aquella Jane Wells de hace unas cuantas semanas, la misma de New Jersey.
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Un día más contigo..
RomantizmEsta historia gira alrededor de Jane y Nathan , dos personas, que se enamoran de una manera no muy común, del odio al amor, mientras que de por medio existen sus diferentes clases sociales.Al principio de la historia se desarrolla conociendo un p...