Capitulo 34

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Llegan los tragos, no se si tomar, miro de nuevo el teléfono y nada, me entra el coraje y decido beberme todo el caballito, todos me miran y gritan ¡SIIIIII!, me quema la garganta, pero espero que este trago me relaje; veo a los demás tomar distintos tragos después de la ronda de tequila, llega Enrique y me trae un trago.
-¿ que es esto?- lo miro mientras tomo la copa que me trae.
-es una margarita, bébelo, te va a gustar- lo suelta con una sonrisa "malévola"
- ¿estas seguro?- le sonrió, pero preocupada
-si, de verdad - miro la copa, la tomo y le doy un trago, efectivamente no esta mal. Veo a Sam irse a la pista de baile con Gus y Frank, me da risa verlos sobre todo a Sam ella no era así , ni siquiera bailaba, eso me sorprende pero a la vez me gusta.
-¿y tú a que hora bailas?- volteo y es Alex el esposo de Roxana.
- el alcohol no ha dado efectos suficientes- me empiezo a reír como loca, solo por eso tan insignificante que dije.
- bueno ya no falta mucho- en ese momento llega Rox y le da tremendo beso que hasta el se sorprende.
No ha pasado ni dos horas cuando ya el alcohol esta en mis venas haciendo que me de risa todo, vea borroso, hable arrastrando las palabras y sobre todo mi vocabulario se vuelva vulgar y honesto o mas bien cruel. Ya van como 5 chicos que mando a volar de la forma mas grosera que puedo.
Sigo mirando el mi teléfono desde que llegamos y ni un mensaje ni una llamada de Ernest.
-ya vamos a bailar no seas aburrida llevas sentada bebiendo toda la noche- se me acerca Sam y Frank los únicos que quedan sin pareja Gus se puso a platicar con un chico que se encontró en la pista de baile; bueno en fin los únicos que quedamos solos somos ellos dos, yo y Enrique.
-déjenme aquí , estoy bien yo bailo mas tarde voy al baño- me levanto pero me tengo que agarrar de la mesa ya mi equilibrio no es bueno, pero apresar de que iba a hacer el ridículo me pongo a reír mientras Sam y Frank me siguen la corriente.
-ven yo te acompaño- me toma Enrique del brazo .

Entro al baño (por fin) cuando salgo del baño quiero sacar mi celular de la chamarra, al tratar de sacarlo se me cae y se estrella contra el piso, me rio , lo levanto y trato de prenderlo pero no funciona rio de nuevo y lo guardo en la bolsa, ya comprare otro. Salgo y Enrique esta recargado en la pared revisando su teléfono, me ve salir y se acerca a tomarme de la cintura, esto me hace sentir incomoda, pero a estas alturas ya no me interesa.
-¿todo bien?- me deja en la silla.
-clarrro ,sip- me ve y se carcajea.
-¿te traigo otra copa?- me lo pienso bien y le digo que si con la cabeza, no se que trate de hacer, pero no soy tan estúpida para que trate de hacer alguna "maniobra"; regresa con otra margarita, estas cosas saben tan bien.
-¿que hora es?- le pregunto después de darle un trago, ya no esta tan mal.
-las 2:55- después de mirar el reloj que lleva en el brazo. 
-uff, mi madre me va a matar- me golpeo la cara
-ya no vives con tus padres-
-jajajaja ¿si verdad?, es por eso que sigo aquí, aunque el idiota de Ernest no venga- lo digo después de guardármelo toda la noche
-¿por que sigues con el?- me lo dice en un tono serio.
- ¿Qué te importa?- respondo entre broma y molestia.
- no seas grosera , te estoy preguntando bien- me responde de forma seria.
- disculpa, pero en verdad ¿Qué te importa que siga con él - me molesta lo que piensa aunque en realidad no se a que viene esa pregunta.
-es que ese tipo de hombres no se fija en personas como tu; digo el es un tipo tan irreal que solo busca a chicas como tu para acostarse con ellas y luego adiós, se buscan a chicas altas, rubias y prácticamente modelos con las cuales se casaran- al terminar de decirlo me mira con los ojos muy abirtos, mostrando desesperación y un toque de desprecio. 
-¡que mierda dices!, quien te crees que eres para decirme eso tú no lo conoces y con eso como se supone que me sienta, ¿bien? Pues ¡vete a la mierda, imbécil, carbrón!- todo eso sale de mi boca como una serpiente conscriptor que desea ahorcarlo. Me paro de la silla como puedo, me voy a acercar a Sam y a Gus, ya a punto de llegar una estúpida alocada me empuja y cuando siento que caeré, tengo un brazo al rededor de mi pecho y su mano me esta agarrando un seno, me levanta, me voltea y detengo mi mano para meterle una tremenda cachetada.
-¡Ernest!, casi te ganas una bofetada- tengo mi mano a unos centímetros de su cara
-¿me puedes decir que carajo te pasa?- ya estabilizada me agarro de su cuello.
- estoy borracha bombón- y le sonrió como niña que acaba de hacer una maldad.
-¿de verdad?, nos vamos- me quita las manos de su cuello y me toma de la cintura.
- contigo si me gusta que me agarres la cintura- me voltea a ver extrañado.
- quien te tomo así- cuando lo dije, no pensé las consecuencias, pero mi mente se nubla con el alcohol así que me pienso lo que hace un rato dijo Enrique.
-Enrique, el me tomo así- parezco una nenita acusando a alguien con mi papá. Veo su mirada, esta furioso, aprieta mas de la cintura y me lleva hasta donde hace un momento estaba con Enrique, el sigue ahí .
-escucha idiota: tu vuelves a tocar a Karen y yo te mato- me mira Enrique, esta asustado se que no le devolverá el insulto porque esta algo entonado, sabe muy bien que si le digo lo de hace un rato terminara en el suelo.
-vámonos- me jala y miro a Enrique le doy mi mas descarada sonrisa.

Salimos del lugar, en ese momento me da el aire en la cara y ya no me sostengo, menos con los tacones que traigo.
-por que carajo bebiste así- me agarra con fuerza de la cintura y yo muerta de la risa.
- ¿y tu porque carajo no me contestaste el teléfono?- me recarga en la pared mientras le da las llaves al del balletparking, me observa y responde muy seguro.
-estaba ocupado con un trabajo, me iban a pagar bien - ya no estoy molesta con el y no lo estoy tal vez por la borrachera que me cargo.
- ¿estas seguro que no te fuiste con la Puta esa de Natalia?- le agarro la cara con una mano y le aprieto los cachetes. Me sonríe y me jala de la cintura.
- no, no estaba con ella, eres una boca-sucia cuando estas borracha- me besa y sonríe.
-más te vale, o si no te los corto- se carcajea de mi comentario.
- borracha eres un encanto, pero no lo vuelvas a hacer- noto el sarcasmo en su comentario.
- la verdad no prometo nada, es muy divertido estarlo- en ese momento llega su carro y me sube.
- no vayas a vomitar - me lo dice levantando un dedo
- no lo voy a hacer, es asqueroso y nunca lo haría, ¿a donde vamos?- me subo al carro y me recargo en el asiento.
- a mi casa, no quiero que estés sola en tu casa- se sube y abrocha mi cinturón. 
- ¿enserio? o mas bien quieres tenerme toda la noche follando- se carcajea y mi risa ya es bastante exagerada
- nena, basta de tu vocabulario desagradable-
- ¿por?, ¿eso te prende?, estaciónate mas adelante y lo hacemos en el carro-
- oye no tendré sexo en el carro y menos en la calle-
- ¿y por que no?, ¿te da miedo?- ya no se ni lo que digo.
- vamos a casa y cuando se te baje te voy a hacer gritar asta que te quedes ronca- lo que dice me deja sin palabras, ya no se que contestarle, mi subconsciente capto lo que dijo, al parecer todavía no le llega el alcohol.
-¿ya no respondes ?-
- ok- le sonrió lanzándole un beso.

Blanks (Espacios en blanco)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora