And I tried to hold her
But it didn't really last long
And she's getting older
I guess she's gotta cut her blue hair off
Crossover de Percy Jackson y Harry Potter
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-¡Condenado espejo de mier...!
-¡Mamá!, ¡por favor!- se quejó Kiara, quien ya estaba lo suficientemente nerviosa.- Deja de gritar.
-A mi no me vas a dar órdenes,- La rubia mayor rodó los ojos, pero hizo caso al pedido de su hija.- ¿Revisaste entre los almohadones del sofá?
-Si,- asintió la niña, bufando y cruzándose de brazos.- Y en el llavero de la cocina, los bolsillos de mis abrigos y los tuyos, ¡hasta busqué en la azucarera!
La rubia mayor bufó y se cruzó de brazos, llevaban buscando ese espejo desde hacía dos horas, y habían dejado la casa patas para arriba, completamente destrozada. De mover tantos muebles Katherine había acabado colorada, sudada y acalorada... y bastante enojada.
-No seas tonta, ese horrible espejo no entra en la azucarera.
Kiara bufó, dejándose caer en el sofá más cercano, el cual estaba torcido y tapaba la entrada a la cocina, los almohadones habían caído al suelo.
-No es horrible, es bastante bonito,- Katherine bufó.- Y varias veces has dejado las llaves de la camioneta dentro de la azucarera, tal vez lo habías vuelto a hacer.
-No es mi culpa que la azucarera esté justo al lado del azucarero,- Kiara suspiró, cerrando sus ojos y respirando profundamente.- y que se vean tan parecidos.
-Mamá, hiciste esa azucarera en una clase de cerámica, así que si, si es tu culpa.
Katherine parecía a nada de echar humo por las fosas nasales, igual a un toro furioso. Frustrada se dejó caer en el sofá, empujando las piernas de su hija a un lado, logrando que parte de su cuerpo cayera del sillón y la niña se quejara.
-¿Desde cuándo eres tan contestona?- bufó la mayor- malditos Gryffindors, que le hicieron a mi hija, si hubieras quedado en Hufflepuff...
Kiara rodó los ojos recogió un almohadón del suelo, era morado y la funda había sido pintada a mano con lavandina, un espiral rosáceo lo decoraba, la niña cubrió su cara con el objeto y apagó el sonido del grito frustrado que necesitaba dejar salir, esos eran comentarios que se habían vuelto normales en su hogar, al principio había sido divertido, pero Kiara había notado el resentimiento que su madre le tenía al sombrero seleccionador por no haberla hecho una tejona. Katherine bufó y rodó los ojos, dejándose caer contra el respaldo del sofá.
Una vocecilla aguda interrumpió su discusión.
-Goldy encontró el espejo, la ama Kathy y la amita Kiara pueden dejar de pelear.
Kiara se sentó de golpe, lanzando por accidente el almohadón al rostro de su madre, quien dejó salir un quejido.
El pequeño elfo se encontraba parado sobre uno de los altos escalones de la escalera de caracol de la casa de las Mayfield, sosteniendo entre sus huesudas manitas se encontraba el tan necesitado espejo.
