Mi lección [Cancelada]

Capitulo. 3

Me levante demasiado temprano; me metí a bañar, cepille mi pelo, escogí un buen outfit, me arregle y tome algunas cosas que necesitaría. Ya estaba lista así que salí de mi habitación encontrándome con mi madre la cual estaba a punto de llamar a mi puerta.

-Vaya, pensé que aun no te habías levantado- su expresión demostraba sorpresa.

-Pues ya vez que no, estoy lista- tome mi maleta, baje las escaleras situándome en la entrada.

-¿No vas a desayunar antes de irte?- exclamó frunciendo el ceño.

-No- contesté al borde.

Papá llego y se situó aun lado de mamá.

-Hija, esperamos que en estos tres meses aprendas muchas cosas, te queremos- hablo mi padre.

Marcus bajo algunas de mis pertenencias las cuales todavía estaban en mi habitación.

-Si bueno, pueden ahorrarse sus palabras absurdas y vacías- solté con frialdad.

Me di la vuelta dispuesta a subirme a la camioneta.

-Alice- murmuro mi padre para que me despidiera de ellos y así lo hice.

Antes de subir a la camioneta pude escuchar las palabras de mamá.

"Es por tu bien."

Puse los ojos en blanco, me coloque mis audífonos y espere llegar al aeropuerto.

Mis abuelos viven en Crowley Corners Tennessee.

-¿Marcus cuanto se hace de aquí a Tennessee en avión?- cuestione después de vario tiempo.

-Una hora y media aproximadamente señorita- respondió.

Hice un gesto y volví a sentarme.

-Pero en autobús son mas de dieciocho horas.

-Pero no me iré en autobús- arquee una ceja.

Pero entonces note que se estacionó frente a lo que parece ser una central de autobuses.

-Eso es lo que me han indicado tus padres, traerte a la central de autobuses- me miro por el retrovisor.

-Que- exclame bajando del auto con rapidez.

Efectivamente estamos en la central de autobuses. Saque mi celular comenzando a llamarle a mamá.

-¿¡Autobús?! ¿¡enserio?!- exclame demasiado molesta en cuando mamá atendió la llamada -Gracias mamá, gracias por comprarme un pasaje al infierno sin regreso.

Corte la llamada y me adentre furiosa al lugar.

Marcus se encargó de que subieran mi equipaje al autobús. En eso anunciaron que estaba por salir el autobús con destino a Crowley Corners Tennessee.

Al entrar al autobús el olor a medias podridas, sudor y suciedad todo mezclado inundo mis fosas nasales haciendo que casi vomite del asco dibujándose me un gesto terrible en el rostro. Al caminar por el reducido pasillo la gente solo me mira mal, de pies a cabeza terminando con un gesto en sus rostros. Es porque soy diferente a todos ellos, tengo clase. Para una mayor impresión me toco a un lado de un gordo sudoroso.

Como se lo dije a mi madre por teléfono, gracias mamá y papá, gracias por comprarme un pasaje al infierno sin regreso. Me acomode -al menos eso intente- en mi lugar, esto es un asco total.

Será un largo camino.

Después de casi siete horas con mi cuello a dolorido terriblemente debido ah que al intentar dormir tengo que doblarme y acomodarme en este maldito asiento tan pequeño. Hicimos una parada para bajar al baño, oh comprar alguna chatarra pero decidí quedarme en mi asiento, si llegaba a bajar intentaría escapar o podría perder el camión y dejarme. La gente volvió a subir, el gordo sudoroso volvió a sentarse a un lado.