Capitulo. 13

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Esta vez e sido yo la que prácticamente a hecho el desayuno, bueno, aun que la abuela me iba guiando, hicimos una tarta de manzana la vedad sabe muy bien.

-Mm- saboree el primer bocado que lleve a mi boca -De verdad quisiera aprender a hacer mas cosas deliciosas como esta.

-¿Enserio?- preguntó boqui-abierta

Ascendí. Ni yo misma puedo creer lo que acabo de decir pero si; Alice Brown quiere aprender repostería oh mas bien a cocinar de todo en general, menos carne.

-Si, siempre e creído que la cocina no era lo mío pero la verdadera razón es que nunca hubo alguien que hiciera crecer mi interés a esto- señale mi plato -también, porque nunca hubo alguien que se preocupara por enseñarme.

-Oh también, porque alguien nunca quiso que la enseñaran ya que prefería pasársela en el celular.

Indirecta muy directa.

Rodee los ojos.

-Es una lastima que tu abuelo no este aquí para probar esto- dice la abuela.

Al terminar de desayunar por primera vez en toda mi vida y en mis casi dieciocho años me levante con el plato en mano colocándolo en el fregadero. Fruncí el ceño, no volveré a hacer esto seguramente después se lo contara a mamá.

La abuela sonrío.

-Estaré fuera, llegare para la comida- avise y antes de que pudiera decir algo mas tome mi sombrero y salí.

Bien, llegare cinco minutos antes de lo que acordamos William y yo.

Saque a Katrina, cada vez parece adaptarse mas a mi, ya que no batallo tanto en sacarla del establo. Voy con mucha tranquilidad hasta donde veré a William, me siento muy rara, estoy nerviosa, no tengo ni idea del porque.

Al llegar me sorprendí al ver a William recargado en la cerca mirando a la nada.

-Se supone que yo seria la que te diera la sorpresa de estar aquí primero- reí haciendo que voltee a verme.

-Eh madrugado- sonrío.

Esa sonrisa, tan...

-¿Ah donde iremos?- pregunte mientras subí a mi caballo.

-A un lugar no tan alejado de aquí- contesta copeando mi acto.

Vaya respuesta.

Solo lo seguí, llevamos andando ya bastante rato y aun no llegamos, ahora entiendo lo que es para el un lugar -no tan alejado-.

-Ya tranquila, estamos por llegar- habla Will, William quise decir- mirándome como si hubiera logrado leer mi mente.

Unos minutos mas ya nos encontrábamos en un impresionante paisaje, un gran lago oh arroyo no se exactamente que sea, lleno de árboles grandes.

-Valió la pena ¿no?- preguntó orgulloso.

Ascendí aun admirando el paisaje frente a mis ojos.

-Sígueme- ordenó.

Llegamos a la orilla del lago, bajamos de los caballos y se encargó de amarrarlos a un árbol.

-Ven- tomo mi mano guiándome hasta un tronco a la orilla del lago.

De nuevo una gran sensación recorriendo mi cuerpo.

Nos sentamos con los pies casi en el agua, estuvimos varios minutos en silencio sin decir nada, solo admirando nuestro al rededor hasta que William se levanto, retiró su camisa, oh Dios mío, ese cuerpo tan trabajado, seguidamente retiró sus vaqueros.

Mi lección [Cancelada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora