Hoy e despertado algo tarde, no quise levantarme para el desayuno, realmente no tengo nada de hambre.
Últimamente no me da hambre.
-¡Alice!- llamo la abuela desde abajo.
Suspiré.
-Mande- respondí bajando las escaleras.
-Necesito que plantes esto en el patio de enfrente- en sus manos sostenía algunas plantas, bonitas por cierto.
No es mucho trabajo así que las tome.
-No, no- me detuvo -Hazlo después de que alimentes a los animales- hablo mi abuela antes de que tomará las plantas.
¿Ese estupido cerdo otra vez? No por favor.
-Toma- dijo sacando un par de botas -Son para que no ensucies tus zapatos, como ayer.
Recordé como caí en el lodo, mi zapatilla hundiéndose en el excremento , mi ropa y cara llena de eso.
Ugh.
Tome rápidamente las botas, me las puse, tome el alimento y salí.
Inmediatamente al salir vi a William concentrado arreglando la camioneta del abuelo.
Wow wow esperen.
Esta solamente en playera interior.
Sus pronunciados brazos están a la vista, están muy marcados. Estoy parada como boba mirando sus brazos.
Giro su mirada hasta mi.
Joder.
Inmediatamente corrí mi mirada a otro lado haciéndome la distraída, fue inútil, se dio cuenta, no dijo nada solamente sonrío ladeado mirándome de reojo. Tampoco dije absolutamente nada, primeramente alimente a las gallinas, esta vez no pusieron ningún huevo, después alimente a los caballos y por ultimo entre al chiquero. Esta vez con mucho cuidado y sin agacharme alimente a los cerdos, con estas botas no me importa entrar aquí, bueno aunque ese asqueroso olor siempre estará.
Al ver al cerdo que hizo mi vida miserable ayer lo señale y dije.
-A ti no te toca comer por maldito.
Hasta acá escuche la risa que soltó William. Siempre les causa risa lo que digo, soy mala, digo cosas para hacer sentir mal y solo lo toman a broma. Continúe alimentándolos hasta terminar.
Salí con una mirada triunfante.
-Vaya, pensé que te volvería a ver llena le lodo- hablo William, limpiando sus manos llenas de aceite -Y excremento- terminó su diálogo.
-Ja ja ja- hice un gesto sarcástico
Soltó una risilla divertida.
No dije nada más, tome las plantas que había puesto en la acera, al igual que una pala, me acerque a las demás plantas y busque lugares disponibles para plantarlas. La abuela tiene un gran y hermoso jardín, hay muchas plantas y flores diferentes por todos lados al parecer es lo único bonito de aquí.
Al encontrar lugar me incline, comencé a hacer un hoyo lo suficiente profundo para la primer planta.
No pueda ser, mis uñas, están llenas de tierra, es una de las cosas que mas cuido y también están estropeadas.
Nada que no se pueda retirar, vamos solo es tierra.
Llevo tres plantas de cinco, antes de continuar con la cuarta William se inclinó situándose a mi lado.
-Te ayudo- murmuro comenzando a hacer otro hoyo.
No dije nada, me parece buena idea que me ayude.
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Mi lección [Cancelada]
RomanceLas lecciones son aquellas que dejan una enseñanza positiva, aquellas que cambian para bien, eso exactamente es lo que necesito yo, una lección. La cual no tarda en llegar a mi vida, aunque me cueste aceptarlo se que es para mi propio bien.