─¡Hey! ─Gritó Thomas corriendo hacia Emma ─¿Qué te pasó? Saliste corriendo de la nada. Fuí a buscarte al otro día a ver si habías llegado bien y tu madre me dijo que aún no volvías.
─Me quedé en casa de Amy.─Oh ─ Su rostro tenía una pizca de alivio.
─Me tengo que ir.
─Si, si claro.
Emma dió media vuelta y se fué moviendo las caderas como es de costumbre, apareció Amy pero ahora agarrada a Jeremy y con el brazo sobrante agarró a Emma.
Los tres mejores amigos, así tenía que ser.
Nadie más.¿Desde cuando Emma era tan sociable? Basta.
No más gente que se meta en su vida, no mas penas.─Tengo hambre, quiero papitas ─ Ordenó Jeremy.
─Compra tus papitas ─Amy empujó a Jeremy hasta el comedor ─Con tu dinero.
─No tengo dinero, soy pobre.
─Pues mendiga ─Ahora era Emma la que empujaba a Jeremy.
Jeremy sacó su billetera mientras hacía puchero, compró su gran paquete amarillo y los tres se sentaron en una mesa.
Dove Byers señala a Jeremy desde otra mesa, rápidamente aparece un Thomas muy feliz hasta que ve a Emma, lo que pensaba venir a hacer parece que se estaba arrepintiendo.─Em... Jeremy ¿no?
─Si ─Lo miró atentamente.
─¿Me das papas? ─Dijo muerto de la vergüenza porque él sabía que Emma lo estaba mirando.
─Si ─Dijo lo más indiferente posible.
Muerto de vergüenza Thomas tomó un puñado de papas y se fué lo más rápido posible para sentarse en la mesa de Brad Miller, "El chico fiesta".
Y hablando del Rey de Roma Brad trajo las invitaciones con la fiesta del año, "Las fiestas del trece de mayo" a la cual Emma no pensaba asistir y esperaba que sus amigos tampoco.
Campana.
Clases.
Tortura.(...)
"La salida" La palabra más linda para un Jueves, Amy propone hacer una merienda en su casa la cual Jeremy acepta pero Emma no. Se excusa que tiene muchos trabajos atrasados y se va sola caminando despacio, sólo piensa en dormir y dormir sin que nadie la moleste.
Hace frío, siempre hace frío, siempre llueve. Siempre el cielo está triste, todo esta triste.
Emma está triste y no sabe por qué.Vuelve a entrar por la vieja y oxidada puerta trasera, sube las escaleras como puede, traba la puerta como de costumbre y se tira encima del acolchado lila que tanto le gusta.
Dormir sería bueno pero esta lo suficientemente atenta que teme cerrar los ojos.
No pasará nada, su padre no está y los ladrones preferirían robar un basurero antes que su casa, se nota a kilómetros que no hay nada importante adentro pero aunque sabía todo eso no podía conciliar el sueño.
Todo para Emma era imposible.

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Si Fueras Emma ©
Genç Kurgu"Los demonios intentan mantenerla abajo, pero tú, Angel, tú la subes de a poquito" •°•°•°•°• ATENCIÓN Esta es una novela reescrita, si ya habías leído un par de capítulos, VUELE AL COMIENZO. Hay muchas cosas que cambian. ~Prohibida su copia o adapta...