Híbrida [Owari no Seraph]

Demonio + II + Confianza

YUICHIRO

-¡Este! Quería agradecerte de haberme salvado del vampiro, también decirte ¡me gustas!, así que escribí mis sentimientos por ti en esta carta -dijo la chica que había salvado el otro día a la vez que me entregaba un sobre y salia corriendo de la azotea.

-Mmmm~ no pensé que el Amo fuera popular -mire hacia arriba donde estaba Shin acostada en el techo, había costado un poco poder conseguir un uniforme de su talla.

-¿Qué quieres decir? -le mire amenazante.

-A decir verdad yo también me lo pregunto, ajaja -se rió Shinoa-. Ahora qué ¿harás llorar a esa chica?

-Claro que no -dije en el momento que guardaba la carta en uno de mis bolsillos-. Más importante ¿cuánto tiempo tendré que estar viniendo al instituto?

-No te quejes conmigo ve a buscar al Coronel -se encogió de hombros Shinoa, volví a ver a Shin, la cual se había sentado a la orilla del techo.

-A mi ni me veas, sabes que el Coronel no confía en mi -Shinoa miro a Shin curiosa.

-Vaya, había una chica ahí, no pensé que te llevaras bien con las chicas -menciono con burla.

-Ella no es una chica cualquiera, es Shin, la que me ayudo con la vampiro el otro día -Shin se acercó a nosotros para después extender su mano la que Shinoa la cual aceptó.

-¿Shin? No es un nombre algo raro para una chica -Shin solo me señalo en el momento que se alejaba un poco-. Tras de idiota, malo con los nombres.

-¿Qu-? -quería matarla sin duda quería hacerlo-. Más importante, ve y habla con Guren para que me empiece a entrenar.

-El entrenamiento que tanto deseas ya comenzó, y lo que tu deseas es esto -me mostró una pequeña llave, la cual comenzó a dar vueltas hasta convertirse en una guadaña-. Este es el demonio con el que hice un contrato, Shikama Douji -me sorprendí por su forma, pero una sonrisa apareció en mis labios.

-Shin, no te metas.

-No planeaba hacerlo.

-Conseguiré esa arma para mi -desenvaine mi katana y apunte a Shinoa con una sonrisa-. Shinoa, será mejor que me des esa arma -dije en el momento que la comencé a atacar la cual ella bloqueo.

-No tengo tiempo para esto, Shi-chan, acaba con él -me quede sorprendido al ver que la criatura también podía pelear solo, Shin se interpuso entre mi cuerpo y la reja para evitar que saliera mal herido-. Vaya, hacer que una chica te proteja, que poco hombre.

-¡Shin! ¿Estas bien? -ella asintió levemente, en ese momento la puerta se abrió mostrando un agitado Yoichi, el cual se escondió detrás de mi-. ¿Te están intimidando otra vez?

-N-No precisamente eso, pero...

-Por favor ayudamos, Yoichi -volví a ver a los tipos, Yamanaka parecía desesperado.

-Después de lo que hicieron, tienen las pelotas para pedirle ayuda, no me...

-¿Qué sucedió? -me cubrió la boca Shin.

-Nuestro amigo Yuuji, no ha regresado, fuimos al área restringida y desde entonces no lo hemos visto -menciono con temor.

-¿Pasaron a un área de nivel 1? ¿Acaso saben que esto les traerá grandes consecuencias? -comenzó a hablar Shinoa-. Recibirán un estricto castigo por penetrar un área militar restringida -fue lo único que dijo para después comenzar a caminar-. Yu-san, Yoichi, Shin, vámonos.

-¿Quién crees que eres para darme...? Auch -me queje al sentir un golpe en mi cabeza.

-Respeta a tus superiores.

-¡Mira quien lo dice! ¡Pasas golpeándome y llevándome la contraria! ¿¡Cómo te puedes llamar subordinada!?

-Por que quiero lo mejor para usted es que le intervengo, y le hago ver cuando las cosas están mal -volví a ver a Shin, ella seguía a Shinoa sin ninguna expresión, no podía creerme esto.

-Oye, Shinoa ¿dónde vamos? -le pregunte al ver que comenzábamos a bajar escaleras.

-Debemos salvar a un civil, ¿no te dije que tu entrenamiento había comenzado? -seguimos bajando hasta una gran puerta, la cual Shinoa abrió, en medio de la sala había varias armas incrustadas en el suelo, además de un círculo dibujado en medio de la habitación.

-¿Es él? -vimos a una persona en el círculo, el cual tenia una hacha en sus manos-. Shinoa ¿esa arma tiene dueño?

-Si esta aquí diría que no.

-Entonces pido esa arma -iba a atacar para conseguir esa arma, pero sentí como Shin me tomaba del brazo-. ¿Qué quieres?

-No creo que deba hacerlo, Amo.

-Es cierto, los demonios se alimentan de los sentimientos negativos, puede usar tu sed de venganza contra ti -esta vez hablo Shinoa-. No toques esa arma con las manos desnudas.

-Como si fuera a dejar que alguien me domine -sonreí al momento en el que comencé a atacar al chico llamado Yuuji, varias veces estuve a punto de ceder, pero apenas tuve la oportunidad tome el hacha, la cual alce-. ¡La tengo!

SHIN

Vi al maestro caer al suelo una vez que obtuvo el arma se detuvo en seco.

-¡Amo! -corrí hasta donde él y lo sostuve antes de que cayera-. ¿Q-Qué le sucedió? -pregunte en el momento que lo dejaba en el suelo.

-El demonio lo atrapo en una ilusión -menciono la chica llamada Shinoa, comencé a marearme-. Oye Shin.

-Y-Yo... -caí al suelo en el momento que todo se puso negro.

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Abrí los ojos, estaba en un lugar blanco, podía ver a varios niños, en ese instante vi a mi amo, imagino que esta era la ilusión en la que estaba atrapado.

-¡Amo! -trate de llamarle, pero estaba encadenada al suelo, detrás de él, en ese momento el niño rubio lo abrazo, recuerdo quien era él, su nombre era Mikaela, era alguien importante para mi amo.

"No puedes interferir"

Escuche detrás de mí, una sombra aparecía a mi lado y se acerco a mi.

"Es una prueba que tu Amo debe pasar solo"

-Tienes razón, debe pasarla solo, pero... -volví a ver a la sombra desafiante-. Si intentas hacerle daño a mi maestro, acabaré contigo, aunque me cueste la vida -escuche su risa resonar, no iba a dejar que me arrebataran todo lo importante para mi.

-Shin... -escuche a lo lejos-. ¡Shin! -abrí mis ojos nuevamente, lo primero que vi fue a mi maestro-. Oye ¿Estas bien? -no respondí, solamente me lance sobre él-. O-Oye, Shin, ¿qué te sucede?

-Podría ser... ¿amor? -menciono con burla Shinoa, solo la ignore, aunque no sucedió lo mismo con el Amo.

-Oye Shin ¿lo viste no? -susurro apenas audible para mi, a lo que solo asenti-. Ya viste que no me dejare vencer tan fácilmente.

-Aún así desearía que confiara más en mí, Amo -dije de la misma manera, lo sentí tensarse para después comenzar a acariciar mi cabello.

-Haré lo mejor que pueda, Shin.