Rebeldía + VI + Omosetando

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YUICHIRO

Llegamos a la estación, estaba demasiado tranquilo, fue entonces cuando escuchamos un grito, una niña iba corriendo, la seguía un Jinete del Apocalipsis, iba a ayudar a la niña, pero Mitsuba me detuvo.

-¿Qué crees que haces idiota? No rompas la formación.

-¿De qué diablos hablas? -Shinoa y Mitsuba comenzaron a hablar, tenían la corazonada que fuera una trampa, pero no podía quedarme quieto-. ¿¡Qué propósito tiene la compañía si no puede salvar a un niño!? -grite desesperado-. ¡Shin!

-Espada... toma mi sangre -la escuche decir, unas lianas salieron de la espada y envolvieron su mano, desenvaine mi espada.

-¡Si rescatas a esa niña, nuestro equipo sera destruido! -trato de detenerme.

-¡Pues retirense ustedes! ¡Shin y yo rescataremos a la niña! -me safe de su agarre-. ¡No tengo la intención de quedarme y mirar como alguien muere otra vez! -comencé un ataque coordinado con Shin, tome a la niña mientras Shin acababa con el Jinete-. ¡Aquí están! -grite al momento que vi que los vampiros comenzaban a atacarnos, protegí a la niña como pude, en un momento de descuido uno de los vampiros estaba a punto de atravesarme con su espada, pero Shin se interpuso recibiendo el daño en uno de sus costados-. ¡Shin! -grite al verla sangrar-. ¡Dame tu poder! ¡Ashuramaru! -una corriente negra nos rodeo a ambos, alejando a los vampiros de nosotros, los demás se unieron a la pelea hasta que Mitsuba nos obligo a retroceder.

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-¿¡Exactamente qué estabas pensando!? -me grito Mitsuba en el momento que me dio una bofetada-. ¡Pusiste en peligro al equipo! -volví a ver a Shin, la cual estaba siendo atendida por Shinoa y Yoichi.

-Eso es verdad... pero, no me arrepiento de nada -volví a ver a Mitsuba decidido-. ¡Habia un niño al que debíamos de rescatar! Haría lo mismo otra vez sin importar la situación, pero lo siento por poner la vida de mis compañeros en peligro, si golpearme te hace sentir mejor sientete libre de hacerlo -vi a la rubia apretar los puños.

-Yo en verdad odio a los tipos como tu, que llevan al equipo a la perdición -podía sentir odio en sus palabras, regule mi respiración.

-Lo siento, seré mas cuidadoso a partir de ahora -sonreí de manera leve-. Solo te pido que no regañes a Shin, ella solo seguía mis ordenes -Mitsuba volvió a ver a Shin, ella sólo la miraba de manera seria, sabia perfectamente que a Shin no le agrado que Mitsuba me golpeara.

-Disculpen -nos llamo la atención la niña-. Gracias por salvarme, les debo la vida -nos agradeció Mitsuba solo se arrodillo frente a ella y acaricio su cabeza para después comenzar a caminar hacia el puesto se observación de Shibuya.

SHIN

-Shin ¿te encuentras bien? -abrí la puerta de la habitación encontrándome con el Amo, el cual se sonrojo de manera inmediata al verme sin la parte superior de mi uniforme, dejando a la vista el sostén negro-. L-Lo lamento no sabia...

-Solo cambio las vendas -dije al momento que le hacia pasar, había pedido un baño completamente aparte para poder curar mi cuerpo-. Tuve suerte de que fuera una espada normal.

-Lamento lo sucedido, Shin -me quite las vendas que cubrían la herida antes hecha para después sujetar mi cabello dejando expuesto mi ojo izquierdo-. No sabia que fuera de distinto color -me miro con asombro, mire al espejo, mi ojo izquierdo era de color plata, no tenia ni brillo ni pupila, normalmente me era molesto ya que podía ver la oscuridad de las personas, además de ser mas sensible en varias cosas, como el campo de visión-. Eres increíble, Shin.

-No me agrada mi ojo izquierdo, por eso lo cubro -tome una botella y comencé a pasarla por mi herida-. Veo el lado oscuro de este mundo.

-¿El lado oscuro?

-Veo la oscuridad de los demonios y de los corazones de los humanos, incluso en esa niña vi la oscuridad en su corazón -cerré mis ojos-. Me inquieta mucho, pero... -volví a ver a mi Amo para después acercarme a él y acariciar su mejilla-. El Amo es distinto, no ahí oscuridad en su corazón a pesar de los contratos y la venganza, eres puro...

-¿Puro?

-En comparación a otros -se me erizo la piel al recordar la oscuridad que provenía de Guren-. Amo, te pido que no confíes en los humanos.

-¿Tu también lo dices, Shin? -me miro serio-. Ashuramaru lo dijo antes, pero aun no comprendo el porque lo piensan -coloque mi frente en su pecho, mientras entrelazaba mis manos con las de él.

-Tengo miedo -susurre-. El solo pensar que el día de mañana no vas a estar me causa terror... -sentí como soltaba mis manos, sentí un vacío-. Eres lo único que me importa ahora, Amo.

-Tu también me importas, Shin -dijo al momento que me abrazaba con fuerza.

-Pero solo por mi poder...

-¡No digas eso! -me grito-. Bien sabes que me cuesta confiar en las personas, eres la única a la que me puedo mostrar completamente con tranquilidad, si Mika estuviera aquí estoy seguro que... estoy seguro que el te querría tanto como yo -sonrió, sentí lágrimas caer por mis mejillas, le abracé con fuerza.

¿Por qué demonios me sentía tan impotente ahora?

¿Fue acaso por el hecho que no lo pude proteger?

He estado sola todo este tiempo y ahora tenia miedo de perder a la única persona que me ha abrazado sin temor, Hyakuya Yuichiro se ha convertido en mi extraña luz en mi oscuro mundo.

YUICHIRO

-Vaya ¿ya regresaron? Pensamos que tal vez deberíamos ir por ustedes -comenzó a molestar Shinoa, por lo que simplemente la ignore.

-Hemos conseguido información sobre de donde tienen a los ciudadanos -comenzó a hablar Kimizuki-. Si tuviéramos las ropas de un noble podríamos usar a Shin en encubierto -dijo pensativo a lo que solo se me ocurrió pegarle-. ¿¡Qué mierdas crees que haces!?

-¡No dejare que metas a Shin en un lugar peligroso! -Shin me tomo del brazo impidiendo que le volviera a pegar.

-Ya, ya, no peleemos -trato de calmarnos Yoichi.

-Según ella, los vampiros están criando humanos en la estación de Omotesando -comenzó a hablar Shinoa mientras comenzábamos a caminar.

-¿Qué haremos con los civiles? -pregunto Kimizuki.

-Los ignoraremos por ahora, lo importante es acabar con los vampiros, pero si ellos están armados nos retiraremos de inmediato -le respondió Shinoa.

-¿Qué? ¿Otra retirada?

-Aqui es -me ignoro completamente, habíamos llegado a la estación, me había comenzado a impacientar, al fin mataría vampiros.

Híbrida [Owari no Seraph]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora