Víctima del amor |Death Note| |Ryuzaki|

7-

-Gracias por tu ayuda, Light. Ahora comprendí mejor el tema -le dedicó un abrazo y luego se separaron.

-De nada, cuando quieras -le sonrió. Ella asintió.

-Bien, creo que ya debo irme.

-Está bien, nos vemos entonces.

-Hasta mañana -se despidió de su amigo y regresó a su casa.

Al entrar hizo los deberes y luego comenzó a estudiar para los exámenes de admisión que serían dentro de cuatro días, incluso por un momento olvidó el hecho de sentirse extrañamente "vigilada", pero no le dio más importancia.

Horas más tarde cuando terminó, se levantó y estiró su cuerpo, cansada. A continuación bajó cuando oyó a su madre llamándola a cenar. La progenitora encendió el televisor y estaban pasando una película de un tal Hideki Ryuga. La película parecía buena así que la miraron mientras cenaron. Sin embargo, minutos más tarde, apareció un mensaje en la parte superior el cual decía:

-"En respuesta a los asesinatos de Kira, la Interpol decidió enviar una fuerza de mil quinientos investigadores a Japón. Los investigadores fueron elegidos de agencias policiacas de las naciones miembro" -leyó la madre. Miró a su hija como pidiendo una opinión.

-Creo que es muy estúpido ese mensaje -habló la adolescente-. No es muy inteligente hacer público que mil quinientos investigadores vinieron a Japón para intentar atrapar a Kira, quiero decir, ¿qué caso tiene que todos lo sepamos?, Kira mató a los doce miembros encubierto y podría hacerlo de nuevo. Pero en mi opinión, este es un intento desesperado por impresionar a ese asesino con la esperanza de que se delate de alguna forma. Sinceramente, si esto fuese una especie de trampa, me sorprendería mucho si Kira llegara a caer en ella. Ya lo hizo una vez con el supuesto "L", o más bien, Lind L. Taylor, todos lo presenciamos, pero dos lo dudo mucho.

-Vaya, tienes razón, Lynn. Eres muy inteligente, jamás se me hubiese ocurrido eso -sonrió la madre.

-Pues gracias, eres la segunda que me lo dice -rió.

-¿Y quién fue la primera o el primero? -la miró con una ceja alzada.

-Light Yagami.

-¿El vecino?, wow... -miró a su hija con picardía-. Y exactamente... ¿en qué andan ustedes, eh?.

-¡Mamá! -se quejó. La mujer rió-. Sólo somos... amigos.

-¿Amigos con derecho o algo así?.

-¡Mamá, ya basta!, ¡no es gracioso! -aún así, soltó una risa.

-¿Y por qué te ríes entonces? -preguntó para molestarla.

-Porque tu comentario incomoda -constestó.

-Si, claro... como digas -rió una vez más para luego continuar cenando.

* * *

A la mañana siguiente, de camino a la escuela, vio a Light quien parecía estar revisando su abrigo, lo siguió y pudo ver que iba a comprar manzanas a una verdulería para finalmente llegar a un parque y sentarse en un banco. Parecía preocupado. Lynette se acercó.

-Hey, Light -saludó. Él la miró y le sonrió, pero fue una sonrisa distinta comparada con las otras. Esta parecía demostrar dulzura y cariño.

-Hola, Lynn.

-Al parecer te gustan mucho las manzanas -señaló la bolsa. Él asintió algo nervioso-. ¿Me das una? -preguntó. Él volvió a asentir de la misma forma y le entregó una. Lynette se sentó a su lado-. Gracias, ¿pero qué te ocurre? -quiso saber.