Narra Alejandra.
De cierta forma no era alguien demasiado malo, bn eso creo.
Hola- dije antes de que el hablara.
-Hola, ¿cómo sigue tu pierna?- pregunto, pero el aún seguía entre los árboles.
Muy bien, gracias, y tu ¿cómo estas Slenderman?- Pregunte.
-No soy Slenderman, yo soy su hermano mayor- respondió a mi pregunta.
¿Su hermano mayor?, jamás creí que Slenderman tuviera un hermano mayor, pero dime quien eres-. Yo soy Splendorman, el hermano mayor de Slenderman, Además aun esta Trenderman y Offenderman, pero casi nadie nos menciona, prefieren al menor de todos.
-Y ese es Slenderman-respondí.
Bueno Splendorman, fue un gusto hablar con tigo pero tengo que irme.- Y ¿a dónde vas?- me pregunto.
Tengo que regresar a casa, pues me están esperando.- respondí antes de que se diera cuenta de que era un escape.- espero que tu escape sea exitoso- respondió sonriendo como un payaso.
¿Cómo sabes que es un escape?- es obvio nadie lo cree pero todos los Slender, podemos leer la mente de los demás- me respondió.
Gracias Splendorman, pero tengo que irme- me voltee y empecé a con mi viaje.
-Feliz noche.- contesto amablemente.
Narra Jeff The Killer.
Estoy algo triste, aunque no se note, pero no puedo dejar que Alejandra este sola, la tengo que defender, ella no puede estar sola, pues de no ser as iba a morir.
Me acerco a la habitación de Alejandra para ver como seguía.
La puerta de Alejandra estaba abierta. Parecía ser un milagro, pero algo muy adentro me dijo que algo no estaba bien.
Me acerque con espuela. Pero aun así todo estaba callado y su cuarto estaba oscuro. Me asome un poco para asegurarme de que nada estaba pasando y luego abrí bien la puerta despacio. El cuarto estaba vacío, la cama des tendida y el closet abierto pero aun con ropa. Seed Eater no estaba en ningún lugar a la vista.
¿Habrá ido a caminar? No, después de estar casi invalida y en confinamiento solitario no creo que solo haya ido a caminar.
Fui a la cabaña de todos los Creepys preguntando si la habían visto pero solo obtenía la misma respuesta.
Cada vez más el pánico se apoderaba de mí. Sabía que era un error ir a la cabaña de Hoodie y Laughing Kath, pero estaba desesperado.
Toqué la puerta con fuerza y Hoodie abrió, pero al verme casi muere de un susto.
-Hoodie, espera.- dije y lo detuve.
-Cálmate Jeff,- Me dijo con tono asustadizo y frio.
-No puedo, debo hablar con tigo y Laughing Kath,- le dije, mi tono apresurado.
Puse mi mano en su pecho y lo saque de la cabaña, cerrando la puerta detrás de él. -Tú sabes en donde esta ella, pregunte, ¿quién?- Me dijo, mirándome muy asustado.
-¡No entiendes!- le dije, agarrándome de su Chaqueta, -Nadie ha visto a Alejandra. No quiero pensar en lo peor y... Creí que Tu y Laughing Kath sabrían algo de ella o de donde está.
Estaba a punto de golpearlo, estaba asustado, podía verlo en sus ojos, pero en ese momento la puerta se abrió y Laughing Kath nos miró.
-Hablare con el.- Hoodie miró a Laughing Kath con preocupación.
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La sonrisa del Amor.
General FictionSeriamente, muchos creen que tras la sonrisa malévola de Jef The Killer no ay amor, sin embargo ay q entender que asta las Crepys tienen sentimientos.