Dulce sabor de seducción

CAPITULO 8

–hola preciosa–susurra en mi oído y yo solo miro a Alan poner sus manos como puños–¿se te quito la resaca? –no me suelta. El teléfono de Alan suena, lo mira y me hace una seña.

–Lucy, tu madre–se levanta y sale con su teléfono hacia la cocina, yo me suelto de los brazos de Jake y el me mira confundido.

–lo siento, pero mamá no se puede enterar de que paso anoche–le doy un beso en la mejilla y salgo hacia la cocina. Cuando llego Alan está sirviendo un vaso de agua y su teléfono esta encima de la encimera. Yo frunzo el ceño, el se voltea y me mira.

–que pasa, ¿por qué colgaste a mamá? –el me mira y al parecer no sabe de qué hablo, señalo su teléfono y el toma su cabeza en las manos.

–no era tu madre Lucy. Solo quería separar los brazos de ese estúpido niñato de ti–gruñe y se que esta muy enojado

–no te enojes–murmuro y me encamino a donde esta el solo quedando a un metro de distancia

–¿Cómo quieres que no me enoje? Si el tiene en sus manos lo que es mio–gruñe

–¿soy tuya? –y mi voz sale como si lo estuviera dudando, pero no lo dudo solo juego un poco con el y se que lo ha enojado mi pregunta

–Siempre–espeta furioso. da un paso hacia mi e instintivamente doy un paso hacia atrás pegándome a la encimera. El recorre la distancia que nos separa y pega su cuerpo al mio. Miro sus ojos y solo delatan deseo y pasión a dos partes iguales, me muerdo el labio y el empuja un poco más para que note la gran erección que se ha formado–¿eres mia? –esta serio pero por lo menos no esta furioso como ahora lo estaba. No quiero responderle a esa pregunta así que no lo hago–respóndeme Lucy–.

–s-si lo soy–sus labios esbozan una sonrisa y se acercan lentamente a mi boca

–nunca lo olvides– susurra a medio centímetro de mis labios y se separa. Y me deja allí con todas mis hormonas esparcidas por mi cuerpo. Cuando me volteo va entrando Jake a la cocina. No creo que nos haya visto porque llega con su sonrisa de Casanova.

–Lucy, ¿ya acabaste de hablar con tu mamá? –yo sonrío ante la escusa tan banal que invento Alan

–si, ya acabe–volteo a mirar a Alan que sigue de pie frente mío (pero con un metro de distancia)–tuya– susurro con mis labios y el asiente y sonríe

–vamos, te invito a hacer algo–dice Jake y yo me volteo a verlo y me encamino hacia donde esta el

–no, tengo que hablar una cosa contigo–digo seria

–si me disculpan–murmura Alan iniciando marcha a la puerta

–no–digo mas seria aun–no te muevas que esto te incumbe–el Frunze el ceño, me volteo a ver a Jake que esta confundido–no vuelvas a besarme, sabes que no tenemos nada. Lo sabes, te lo he dejado muy claro–miro a Alan que baja la cabeza y ríe bajito–no quiero problemas con Cloe porque ella te ama – la verdad es que me vale una mierda si ella se enoja –ahora tu–giro la cabeza a Alan que se ha incorporado y tiene su semblante normal ( ese de tempano de hielo )– si te vuelves a meter en mi vida te pateare el culo–los veo a los dos y tienen la boca abierta, pero el primero en incorporarse es Alan.

–esta bien hermanita–sonríe y sale de la cocina y volteo a ver a Jake

–vale Lucy, me lo haz dejado muy claro, pero me enamore de ti y eso nunca va a cambiar–susurra y me pone un mechón rizado detrás de la oreja– pero no puedo amar a Cloe, me es imposible– lo se. Pero se que también se de que Cloe le gusto un tiempo

–Cloe ha estado siempre que yo no he estado contigo, te la haz follado cada vez que te vas de mi casa porque te rechazo–lo miro y se que estoy en lo cierto, Uno. Me mira avergonzado y dos. ella me lo dijo–no te mereces esto , eres un gran chico y yo no te valoro lo suficiente– lo abrazo y le doy un beso en la mejilla– te quiero como un hermano–el responde a mi abrazo y se que hemos quedado en paz.

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Después de todo lo que había pasado en el día, me fui a mi habitación. Cuando me estaba poniendo mi short de pijama tocan a la puerta.

–ya voy–se quien es y por eso tengo una sonrisa de oreja a oreja, cuando abro la puerta veo a Susan y Megan. Estoy un poco confundida. ellas entran y sonríen, se sientan en la cama y me miran expectantes –¿Qué hacen aquí? –ellas callan y yo cierro la puerta

–cuéntanos–empieza Susan. Yo frunzo el ceño y Megan sonríe

–¿Qué cosa? –pregunto extremadamente confundida

–deja de hacerte la santa–dice Megan y se levanta de golpe de la cama– sabemos que dormiste en la habitación de Alan–Mierda

–¿y? –pregunto y volteo la mirada

–Dios te lo estás follando–grita Megan pero no se le ve escandalizada, mas bien... ¿aliviada?. ¿Por qué se siente aliviada? . pero caigo en cuenta de lo que ha dicho y niego con la cabeza.

–uno. No grites estúpida, dos. No. Sigo siendo virgen y tres.– miro a Susan y se lo que va a decir

–no digas follar–grita Susan. Y Megan y yo soltamos la carcajada. A Susan jamas le ha gustado esa palabra. No tengo ni idea por qué, pero cada vez que la decimos ella dice no digas follar.

Pasamos el tiempo riendo y peleando con almohadas hasta que estamos cansadas, salimos al balcón para que nos de un poco de viento y empiezo a contar todo lo que ha pasado con Alan. Todo. Completo. Cuando acabo Susan sonríe y Megan hace lo mismo.

–lo sabíamos–responde Susan – no hacen nada malo Lucy

–el no es de tu sangre–interrumpe Megan– el es solo tu ex hermanastro–sonrío. No se que haría sin mis mejores amigas. Las amo.

–¿y mamá? –pregunto

–Ella lo va a entender, tal vez lo ama como si fuera su hijo, pero no lo es–responde Susan–tu madre te ama y siempre pondrá tu felicidad primero.

Y así entramos a la habitación, nos tumbamos en la cama y nos quedamos dormidas.

corto, lo se.pero no he tenido mucho tiempo. el capitulo nueve va a ser contado por Alan. los amo a todos los lectores de este libro, gracias por el apoyo. besos.