Dulce sabor de seducción

CAPITULO 10

Lucy

Me despierto por los rayos que se filtran del balcón, me doy la vuelta y me topo con la cabellara de Megan.

-Arg-gruño y me siento un poco-Susan, Megan-ellas fruñen y se dan la vuelta-Megan- la zarandeo. Ni se inmuta- Susan-hago lo mismo con ella y la misma reacción. Nada, pero tengo un plan- lo siento Alan pero no podemos tener nada. Además tampoco quiero follar contigo- con eso ellas se levantan de golpe y abren sus ojos como platos

-estúpida de mierda. No digas follar-gruñe Susan y yo rio

-pensé que de verdad estabas hablando con él. Te iba a pegar con una tabla de la cama por decir semejante estupidez-grita Megan.

-ya par de chillonas levántense que tengo hambre-ellas sonríen con malicia

-¿tu tienes hambre? -pregunta Megan- o quieres darle los buenos días a Alan? -sonrío-eres una cochina-lo único que siento es un almohadazo proveniente de Megan, tomo una almohada y golpeo a Susan y ella sonríe todas tres tenemos una almohada y estamos en las esquinas de la cama- deja de ser tan gallina Susan, ven que sabes que te golpeare-yo suelto la carcajada y ellas dos me siguen.

Después de nuestra pelea de almohadas y que Megan haya ganado, Nos duchamos y nos ponemos los trajes de baño, con vestidos de playa. Bajamos a la cocina y vemos que los chicos están viendo un partido de baloncesto, pero no veo a Alan.

-se me quedo una cosa arriba ya vuelvo-ellas sonríen y asienten mientras se acercan a sus chicos, subo a la habitación de Alan y toco la puerta, nadie abre. Me lo pienso un rato antes de entrar.

Esta dormido. sin camisa, con un pantalón de pijama, parece un Dios griego con la luz solar que se filtra por las cortinas del balcón, sus labios entreabiertos. se le ve relajado, tranquilo. Parece estar viendo a un bebe, pero quiero despertarlo. Me siento con cuidado a horcajadas sobre su cuerpo y empiezo a besar la comisura de su boca, sus mejillas, su frente, sus parpados. El sonríe y enreda sus brazos a mi cadera.

-estaba despierto desde que tocaste la puerta, pero quería ver que hacías para despertarme-sonrío y recuesto mi cabeza en su pecho

-¿Cómo sabias que era yo? -pregunto y el besa mi cabeza

-instinto-rio-o tal vez que eres la única de esta casa que tocaría cinco veces una puerta- el ríe un poco y vibro en su pecho- te fui a buscar mas temprano, pero estaban tus amigas y no quise despertarte- yo levanto la cabeza y lo miro

-tengo que contarte algo-el sonríe y asiente- ¿no pasa nada si les conté sobre nosotros? - el sonríe

-no pasa nada, pero me gusta un nosotros- y su sonrisa sexy se forma en sus labios, el me trae a sus labios. Me besa con tanta dedicación, con tanta entrega, pero no puedo ignorar su erección creciente que lucha con su pantalón para poder salir, yo gimo y empiezo a mover mis caderas de arriba a abajo, profundizo nuestro beso y empieza a ser mas caliente, su lengua y la mía danzando a un solo compas. El se separa de mi y respira un poco

-no quiero que sea así nena- susurra contra mis labios

«eres una estúpida, si no fuera por la fuerza de voluntad de El tú ya no serias virgen»

Cállate.

-esta bien- trato de bajarme de su cadera pero el me sostiene con mas fuerza

-no te enojes, te prometo que va a ser pronto. ¿pero estas segura de darme tu mayor tesoro a mi? -yo lo pienso un rato,

«SI»

Deja de entrometerte

«y tu deja de ser una boba, sabes que si»