No Other ~Siwon~

Capítulo 15

A la mañana siguiente sentí como me removían en la cama, solté un gemido y me tapé con las colchas.
-Mi Jung-dijo Sukkie intentado quitarme el tape de la cara, abrí los ojos de golpe, quité las colchas de mi camino y tomé mi móvil.
-¡Dios, me quedé dormida! Lo siento-sentí como alguien se sentaba del otro lado, miré y Siwon estaba en pijama con una bandeja en sus manos.
-Sukkie me pidió que te dejara descansar y que te hiciéramos un rico desayuno-me explicó, Min Suk tomó asiento, agarró una tasa con café humeante y me la entregó.
-cuando terminemos de desayunar puedes volver a casa-me dijo sonriendo-después de todo tienes tu practica y los fines de semana debes pasarlo con tu familia-él tomó una tostadas-nosotros iremos donde mi abuela-bebí un poco del café y este estaba realmente bueno.
-intenta descansar-me dijo Siwon, les sonreí y asentí.
-gracias-dije, tomé una tostada y la llevé hasta mis labios.
-¿es verdad que saldrás con mi tío?-me preguntó Sukkie y me puse toser, Siwon me quitó la tasa de café para que no la volteara, yo comencé a golpear mi pecho, Min Suk tomó su zumo de naranja y me lo entregó, bebí un pequeño sorbo y la tos comenzó a relajarse.
-supongo que es un efusivo "¡sí!"-dijo Siwon sonriendo mientras me devolvía el café-alguien parece emocionada por cierta cita-le dijo a su hijo.
-pensé que Mi Jung tenía mejor gusto-le dijo Sukkie de vuelta.
-bueno, ella ya me había dicho que le gustaban los perros.
-chicos...-dije.
-pero...-Sukkie me miró y contrajo su rostro en una meuca de asco-¿tendrás que besarlo?
-¿qué...?-sentí el rubor llegar a mis mejillas.
-¿deberíamos contarle?-le preguntó Siwon a su hijo.
-mmm, no lo sé, ella se ve feliz con la idea de besar a mi tío-dijo Sukkie.
-ya, suficiente Choi's-le dije y ambos sonrieron para luego pegarle una mascada a sus tostadas-yo a Hak Il lo veo como un hombre agradable.
-ni siquiera lo dejó en la friendzone-dijo Siwon, lo fulminé con la mirada y él elevó su mano en son de inocencia-¿acaso es mentira?
-¿Quién te gusta más, mi tío o yo?-me preguntó Sukkie.
-tú sabes la respuesta-dije acariciando su mejilla.
-Mi Jung es muy linda para mi tío-se quejó Sukkie.
-para ti, Mi Jung es muy linda para todos los hombres del planeta-le corrigió su padre.
-¡claro que sí! Nadie la merece, como ella no hay dos.
-¿Mi Jung lo esperas por 14 años? Cuando él tenga 20, yo aceptaré su noviazgo-reí.
-yo tendré 35 años, en ese momento, todo signo de belleza se habrá ido.
-pero Mi Jung no me gusta sólo por su belleza-dijo Sukkie.
-ya te rechazó hijo, asúmelo-dijo Siwon abrazándolo.
-bueno, pero de todas formas te buscaré el mejor hombre que exista, aunque no te llegué a los talones, pero que te quiera casi como yo a ti-le sonreí y asentí.
Cuando terminamos de desayunar, ambos me dejaron sola, yo tomé una ducha, luego dejé mis trajes en la ropa sucia, fui hacia el despacho de Siwon, ahí me dio mi sueldo y el dinero para la hipoteca. Esta yo se la iré pagando con las noches que me quedaré cuidando a Sukkie.
Antes de irme, le dije a Min Suk que no olvidará sus deberes, que no jugara tanto con la consola y a Siwon le dije que no le diera tanta pizza, con eso me fui. De caminó pasé al banco y pagué la hipoteca, por fin puede respirar completamente en paz, al llegar a casa me encontré a mi padre aseando.
-¿Dónde está Wook Jae y Kyo In?-le pregunté.
-fueron a pasear los perros-él besó mi mejilla y luego siguió en lo suyo.
-hoy eh pagado la hipoteca-él se paró de golpe, me miró sorprendido y luego frunció el ceño.
-¿de dónde sacaste el dinero?
-¿acaso eso importa?-fruncí el entrecejo-¿Por qué no me contaste?
-estas son cosas de las que yo debo hacerme cargo, Nam Mi Jung.
-¿Cuántas veces debo recordarte que somos una familia? Papá entiende que no puedes cargar con esto solo, por favor deja de comportarte así.
-antes de decir algo, quiero que lo apliques en ti, ¿acaso tú dejas que compartamos tu carga?-guardé silencio-¿Dónde conseguiste el dinero?
-me lo prestó mi jefe.
-¿Por qué hizo algo asi?
-¿eso es más importante que saber que podrás tener a tus hijos bajo un techo?-dije alzando un poco mi voz, ambos guardamos silencio por varios segundos hasta que solté un suspiro-permiso-salí de la sala, subí las escaleras, tomé mi bolso donde tengo las cosas de ballet, bajé y me detuve junto a mi padre-cada vez que lleguen las cuentas muéstramelas y si tienes problemas con el tema de los pagos, dímelo porque yo tampoco quiero a mi familia en la calle, por algo estoy trabajando y es para darle tranquilidad a todos-él me miraba serio-espero que tú también seas capaz de darme tranquilidad a mí y comiences a notar que esto que hago no es sólo por un deseo egoísta como el ser una bailarina de ballet profesional, si no por todos nosotros-me giré y salí de casa.
Para un hombre debe ser difícil ver a su hija trabajando, llegando agotada a casa y además no ser capaz de cumplir su sueño, pero también es difícil llevar todo esto él solo y recibir la ayuda que te da tu familia no está mal, ni mucho menos te hace menos hombre, sólo te aliviana la carga. ¿Es tan difícil de entender?
Cuando llegué a la práctica aún no comenzaban, así que me fui a cambiar tranquila, tomé mi cabello, luego llegaron mis amigas, hablamos un poco hasta que el profesor nos llamó.
Pasé gran parte del día allí, volví a casa, mi padre nos calentó comida y nos sentamos a almorzar.
-siento lo de la mañana-le dije-no debí hablarte así.
-¿hasta cuándo te dio plazo?-suspiré.
-no me dio plazo, él entiende-mi padre me miró y vi la idea que se le pasaba por la mente-no papá, no me eh ligado a mi jefe.
-¿entonces?
-es buena persona... ahora soy capaz de verlo.
-dile que en cuanto pueda, le pagaré.
-esa es mi cuenta papá, así que no te preocupes-él abrió sus labios, entorné mis ojos y la discusión se dio por terminada.
-¿en qué momento comenzaste a parecerte tanto a tu madre?-murmuró, clavé la mirada en mi comida-eres la viva imagen de ella y sobre todo cuando te comportas de esta forma, porque si bien ella tenía una salud muy débil, siempre supo llevar esta familia con un sólo dedo, siempre diciendo palabras correctas y si no las decía, no importaba porque sólo entrecerrando sus ojos cafés era capaz de dejarme callado-lo miré y él sonrió-si bien ella era la más débil de todos nosotros, siempre nos puso como prioridad...
-yo no soy débil-le dije mirándolo seriamente.
-claro que no, eres muy fuerte, tanto interior como exteriormente-me dijo con voz dulce.
-¿no has pensado en que si nosotros no hubiéramos nacido tal vez ella estaría contigo?
-con tu madre nos amábamos, Mi Jung, y deseábamos fieramente tener familia-sentí mis ojos llenarse de lagrimas.
-¿aunque eso significara la gran posibilidad de que ella muriera?
-Mi Jung...
-¿en qué momento pensaron en nuestra felicidad, acaso no pensaron en que Kyo In y Wook Jae la podrían necesitar?-las lagrimas rodaron por mis mejillas.
-hija...-me levanté de la mesa y subí al baño, intenté relajarme y que las lagrimas se detuvieran.
¿Qué demonios me ocurre? ¿Por qué me comporto de esa forma con mi padre? Él no tiene la culpa de nada... nadie la tiene, sin embargo, eso no hace que menos injusta esta maldita situación, ¿En algún momento lograremos escapar del hoyo en el que estamos?
Cuando logré tranquilizarme, me lavé la cara, esperé a que mi rostro mostrara menos signos del llanto y me fui a la recamara, ahí mi hermana estaba haciendo sus deberes, me tiré en la cama con ella y besé su mejilla.
-¿almorzaste?-me preguntó y asentí-¿no crees que papá cocina cada vez mejor?-asentí y sonreí.
-no soy nada comparada con él-ella sonrió de vuelta, mi móvil comenzó a sonar en el bolsillo de mi pantalón, lo tomé y vi el número de Hak Il-hola-le contesté.
-hola, ¿recuerdas la cita, no?
-claro, ¿Dónde nos juntamos?
-pasaré por ti.
-¿a qué hora?
-a las 7:30, ya que la función comienza a las 8:00.
-está bien, te estaré esperando, adiós.
-adiós-corté y me puse a ayudar a Kyo In en sus tareas, a los minutos llegó Wook Jae, se tiró en mi cama y nos miró desde ahí.
-¿qué tal el trabajo?-me preguntó.
-genial-le dije-¿cómo fue pasear los perros?-él se encogió de hombros.
-mientras obtenga dinero, no tengo ningún inconveniente-asentí-te ves cansada.
-sólo necesito dormir un poco, ya hoy podré hacerlo y verás como vuelvo a estar fresca como una lechuga.
-espero que lo digas enserio, porque en verdad lo que menos quiero es verte enferma por exceso de trabajo-solté una sonrisa, me levanté de la cama de Kyo In, corrí a la mía y me tiré sobre mi hermano, tomé sus mejillas entre mis dedos y las tiré.
-¡wah! ¿En qué momento te hiciste tan atractivo?-él soltó una sonrisa y tomó mis mejillas.
-¿y tú en qué momento te harás bonita?-entrecerré mis ojos y le tiré más fuerte las mejillas.
-¡pues, para que sepas, hoy tengo una cita!-él tiró más mis mejillas también.
-metirosilla~.
-¡es en serio!
-¿y quién se atrevió a pedirte que salieran? Debe conocerte poco para tener el valor de hacerlo-hice una mueca de dolor por mis mejillas y mi hermano pequeño me soltó al instante-¿es en serio?-asentí-¿él te gusta?
-eso quiero ver hoy...
-¡¿tienes novio Mi Jung?!-preguntó Kyo In emocionada.
-¿cómo que tienes novio?-dijo mi padre de la puerta.
-no es mi novio-dije tomando asiento mientras un sonrojo se posaba en mis mejillas.
-¿y porque te sonrojas?-me preguntó Wook Jae sonriendo burlonamente, le pegué con mi codo en su estomago y fruncí mi ceño.
-bueno, pero si tengo novio, ¿qué hay con eso? Tengo 21 años, ya estoy bastante grandecita, ¿no creen?-Wook Jae se levantó de la cama y metió sus manos en sus bolsillos.
-mientras el cretino no te haga sufrir, no hay razón para querer romperle las piernas-dijo caminando hacia mi padre.
-ni querer cortarle "partes"-dijo mi padre siguiendo a su hijo.
-¿qué partes?-preguntó Kyo In inocentemente.
-los dedos-dijo Wook Jae-de los pies con un alicate, luego le echas sal en la carne viva y...
-¡cállate asqueroso!-gritó mi pequeña hermana horrorizada, mi hermano soltó una sonrisa y salió de nuestra recamara seguido por mi padre.
Cuando llegó la hora que acordamos con Hak Il, yo estaba peinándome, luego me fui al baño, me maquillé un poco y miré mi reflejo, estoy con un vestido con puntos negros, ajustado hasta mi cintura y de ahí cae libre hasta un poco más arriba de mis rodillas, en mis pies una balerinas y mi cabello corto, suelto, arreglé un poco mi flequillo y escuché una bocina afuera, salí del baño, fui a mi recamara por mi cartera y bajé las escalera, salí y Hak Il me esperaba a fuera de su auto, le sonreí y caminé hasta él.
-supongo que las palabras están demás-dijo soltando una sonrisa-te ves, hermosa-le sonreí.
-gracias-me abrió la puerta del auto, entré y él la cerró, fue a darse la vuelta y se subió por su lado, encendió el auto y se echó a andar.