Aquel día, Nala me despertó con sus pequeños maullidos. Me levante con los ojos entreabiertos y camine hacia donde provenían los llamados de la gatita. La encontré en la puerta, esperando emocionada a alguien que la abría del otro lado. Se abrió la puerta, revelando a Pepe detrás de ella.
-Hola, Nala. - Acaricio el lomo de la gata que maullaba. Volteo hacia mi. - Buenos días, mi amor.- Me beso y acaricio mi cabello.- ¿Lista para irnos?
-La verdad, me acabo de despertar. Dame un minuto para arreglarme.
-Muy bien, guapa. - me abrazo. - Solo no te tardes tanto.
Y así fue. Vestí, cepille mi cabello y mis dientes, y por ultimo tome una bolsa de mano en la que puse algo de dramamine, mi movil y cartera. Me puse unos lentes de sol, y nos fuimos.
Nos reunimos en el departamento de Strecci, cada quien con su mochila cargando. Y nos montamos en una camioneta que habían rentado para la ocasión. Entonces, arrancamos camino.
**Primera hora de viaje**
Todos estábamos sentados en los asientos. Habíamos acordado que cada dos horas, los chicos iban a cambiar de conductor. El primero fue Pepe. En la radio, sonaba la misma canción de siempre. "I would walk five hundred miles..." Se repetía una y otra vez, pero no nos importaba. Todos íbamos platicando y riendo. Yo llevaba mi iPod y un libro, pero pareciese que no lo necesitaba.
**Tercera hora de viaje**
El conductor cambio a Jux. La canción la había hartado. *Diablos, ¿alguien no va a arreglarlo?* en el momento en el que pensé eso, Yayo se levanto de un brinco.
-Bueno, ya estuvo. Hay que arreglar esa cosa.- Pepe y el se levantaron y fueron a la parte frontal de la camioneta.
Resultaba, que había una falla de la señal que el radio recibía; lo que provocaba que esa canción, se repitiese una y otra vez. Ellos se dedicaron a apretarle botones al estéreo, a ver si se podía arreglar. Yo me voltee y me puse mis audífonos conectados al iPod y escuche música. Abrí un poco la cortina de la ventana y pude ver como ya era de noche. De pronto, una leve explosión vino del estéreo. Yo voltee.
-¿Que paso, wey? - dijo Strecci.
-Ya no sirve. - Yayo le picaba varias veces al botón de encender, era claro que no reaccionaba.
^Bateria agotada.^
Lo que faltaba, mi iPod murió.En un instante, Strecci bajo su guitarra acústica y la empezó a tocar. Todos escuchamos lo que cantaba mientras tomamos cervezas que agarramos de la hielera.
-De viaje nos fuimos un día, el estéreo una canción repetía. Yayo y Pepe intentaron arreglarlo, pero sin embargo no pudieron lograrlo. Ahora ya no esta y creo que lo extraño... La radio... La radio... La radio. Exploto y lo extrañamos todos. - Aplaudimos todos a la canción de Strecci, que contaba nuestra situación.
**Quinta hora de viaje**
-¿Ya casi llegamos? - Pregunte yo, algo desesperada a Yayo, el último conductor.
-Falta una hora. - gritó desde su asiento y todos nos quejamos. - Bueno, ustedes querían viajar, ¿No?
-Ay, yo creo que ya me voy a dormir. - La chaparrita se rindió
-Yo igual. - Dijo ahora Strecci. - ¿Pepe? ¿Beca?
-En un rato, amigo. - miro hacia mi.
-Igual yo. - Vimos como Tania y Strecci se quedaban dormidos. - ¿En serio no te vas a dormir?
-Nop. Me quedaré despierto hasta que tu te duermas.
-Bueno, ya veremos quien aguanta mas.
Yo saque mi libro y el su iPod. Estuvimos así un rato y mas o menos media hora después, el cayó dormido. Calle una pequeña risita y me decidí a dormir yo igual. Me recargue a lado de Pepe y el inconscientemente me abrazo entre sueños.
***Lentamente habrí los ojos ante una luz brillante que entraba por un espacio abierto de la cortina. Sentí como ya no nos movíamos, y vi la ausencia de Yayo en la camioneta. Entonces, me pare, abrí la puerta y voltee hacia la playa. Esta, estaba totalmente vacía. Aún se veía percibir un pequeño rastro de neblina por encima del mar. Me acerqué a Yayo, que contemplaba el paisaje.
-¿Por fin despierta? - mencionó.
-Sip. -El sonrió.
De la camioneta, salieron los demás y se pararon con nosotros por un rato. Luego, cada quien tomó su mochila y con un mapa nos guiamos hasta la casa. Esta, estaba oculta entre palmeras. Por un camino de piedra, nos encontramos con una puerta de cristal. En la que Yayo saco una llave y abrió.
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My only problem. - Joe trouble
Fiksi PenggemarEsta, es la historia de Becca. Becca tiene un hermoso pelo negro y unos ojos miel. Le gusta la música, los libros y el teatro. De echo, esta estudiando actuación. Le gustan los gatos la pizza y ... Los Bloggers.