Capítulo 13

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-Me empieza a aburrir eso de que siempre ver la tele -me quejé.

-Ya... Pero no hay nada mejor que hacer.

-Ahora tengo hambre.

-Hazte algo.

-Tu no tienes hambre?

-No.

Me levanté del sofá y me dirigí a la cocina que estaba a unos pocos pasos de allí.
Abrí la nevera y miré de arriba a bajo todo lo que había.
Cerré los ojos y amargué mi brazo para seguidamente coger una entre todas las cosas que habían dentro.

-Paté de jamón york... Me gusta -me dije a mi misma.

Cogí una barra de pan, lo abrí, quité todas las migas y me unté el paté.
Enroyé el bocadillo con un papel y me fui directa al sofá.

-Que te has hecho?

-Un bocadillo de paté de jamón york.

-Jamón york?

-Si, jamón york.

-Lol, que raro.

Escuché el tono de mensaje de mi móvil y todos mis sentidos se pusieron alerta.

-Y mi móvil?

-Yo que sé!

Pensé en mi habitación ya que era la que estaba encima del salón así que subí.
Abrí la puerta y me acerqué a la mesita para coger el móvil, cuando abrí whatsapp tenia un mensaje privado de un número desconocido.

?: Katya, te espero en el lago está noche.

Yo: Charlie?

?: El mismo.

Yo: Y si me niego a ir?

?: Iré a por ti.

Yo: Charlie, quiero que me lo cuentes TODO.

Yo: Charlie?

?: Si te lo contase dejarías de quererme.

Yo: Nunca dejaría de quererte.

?: Te quiero.

Yo: Entonces confía en mí.

?: Vale.

Como vi que ya se había desconectado me desconecté, le agregué y bajé de nuevo al salón.

-Quién era?

-Bah, mi madre.

-Ah, que te ha dicho.

-Que que tal nos iba y lo típico que preguntan cuando están de vacaciones.

-No sé como pero lo entiendo, así que bien.

Me puse cómoda y seguí viendo la televisión.

*****

Llevábamos toda la santa tarde tiradas en el sofá haciendo el vago, ha eran las 10 de la noche y no habíamos ni merendado ni cenado.

-Tengo hambre!! -gritó Maria.

-Hazte algo de cena!

-Joder!! Está muy lejos. -se quejó.

-Pues te jodes!

-No quiero joderme!!

-Pues te jodes!

-Que no quiero!

La verdad es que tenía ganas de ir al lago para estar con Charlie, aunque tuviese miedo quería que me diera uno de sus abrazos calentitos y dormir entre sus brazos.

-Katya?

-Que.

-Ah, nada, estabas emparrada.

-Sabes que me pasa siempre y sigues preocupándote por mi, que mona.

-Jaja, ñe, a la mierda, voy ha hacerme la cena.

-Aleluya!! -ambas reímos.

Hizo la cena y me senté en la silla de enfrente para hacerle compañía.

-No te da miedo saber que hay un cadáver en el sótano de está casa? -preguntó Maria con la boca llena de macarrones.

-Ñe, tampoco me da miedo salir con Charlie.

-Salir? Estáis saliendo?

-No, pero yo ya lo considero salir.

-Ah, bueno.

-Ya son las once, me voy a la cama.

-Okey, buenas noches.

-Buenas noches.

Subí a mi habitación y me dejé caer sobre la cama dejando pasar el tiempo, me iba a ir a la 1:30 porque Maria seguramente a esa hora ya debe estar dormida.

*****

Abrí lentamente la puerta de mi habitación intentando escuchar si Maria estaba durmiendo o no, como no oía nada supuse que estaría dormiendo así que salí, cerré la puerta detrás de mi, bajé al piso de abajo y ya salí por la puerta.
Caminé unos cuantos metros y a lo lejos vi a Charlie, fui corriendo hacia el con los brazos abiertos.
Cuando llegué hasta él le besé como si no le hubiera visto en 1 año y le abrazé.

-Katya?

-Que. -dije aún abrazada a él.

-Estás bien?

-Nunca he estado mejor.

Apoyada en su pecho noté como se formo una sonrisa en su cara.

Charlie Charlie, ¿estás ahí? Donde viven las historias. Descúbrelo ahora