Tentación Irresistible (Bechloe)

Mi Historia

Bueno, aquí estoy yo, Beca Mitchell. Una chica corriente que acaba de mudarse a Los Ángeles, hará ya una semana. Bueno, no creo que corriente sea la palabra adecuada, digamos que soy... invisible. O al menos intento serlo. Cuando mis padres se separaron empezé a construir un muro imaginario con el que mantenía fuera a las personas y así no podrían hacerme daño. Sí, me he acostado con muchos chicos en la universidad... muchos. Pero solo era por diversión. El alcohol y chicos sin camisa no son una buena convinación. Me he mudado con Brad, mi novio. Creo que es el único que ha podido entrar en mi muro imaginario. Lo amo. Es bueno, moreno, guapo, fuerte, siempre me ayuda en la casa, tiene un buen trabajo como abogado, es... perfecto. Y mi perro, Sky, un Golden Retriever blanco como la nieve. Me da gracia cuando entra en los zapatos de Brad para poder abigarse del frío. Es tan pequeño y tan mono. Y, creo que esto es todo lo que puedo decir de mí.

9:00 am

Estoy buscando un trabajo que me guste, quiero ser DJ pero no puedo empezar desde arriba, tengo que ir poco a poco, voy yendo a bares, buscando que necesiten a alguien que ponga música buena en ellos. Nadie conoce a los que ponen la música en los bares, eso me gusta.

Al fin, encontré un bar/restaurante/discoteca que necesitaba un DJ para las tarde y noches. Encantada cogí el empleo. Está bastante lejos de mi casa, pero me gusta caminar, reflexionar mientras paseo.

Me dijeron que empezaría mañana por la tarde. Así que tengo todo el día para hacer lo que quiera, esperaré a Brad en casa y le haré una sorpresa.

Estaba caminando hacia mi casa, pensando en lo que le podría hacer. ¿Una buena tarta? Le encantan las tartas. Además después de trabajar siempre llega cansado y hambriento, le encantará.

14:00 pm

Estaba llegando ya a casa y me fijé, entre la multitud en una pelirroja, ojos azules, muy guapa. '¿Qué le pasa?' Pensé al verla que estaba llorando. Fui a hablar con ella.

-Hey, ¿estás bien? ¿te ayudo en algo?- estaba nerviosa, no sé por qué.

-N-no, estoy bien- no la creía, algo le pasaba.

-Vamos, sé que te pasa algo, puedo ayudarte, tranquila- Creo que la convencí porque me miró a los ojos y se quitó las lágrimas de la cara.

-Muy bien, como quieras, ¿podrías ayudarme a cargar con todas estas cajas?- Me señaló unas cajas que había en el suelo, no comprendía qué pasaba

-Cla-Claro- Cogí dos cajas. 'Cómo pesan' pensé. Las llevé al maletero de un coche, viendo que la pelirroja las ponía ahí.

Acabamos de poner todas las cajas y ella me sonrió. Esa sonrisa... ¿quién puede tener una sonrisa tan perfecta? Me empezó a latir muy fuerte el corazón.

Parece que ella notó algo porque me preguntó -¿Estás bien?- no le respondí, solo cambié de tema mientras entrábamos en su coche para llevar las cajas a saber dónde.

-Y... ¿qué pasa? ¿qué son todas estas cajas? ¿por qué llorabas?- Me sentí muy cotilla. Pero la curiosidad me podía.

-Vaya, me ha tocado una curiosa- se limitó a contestar. ¿Qué quiere decir con lo de "me ha tocado"? ¿Por qué he entrado a su coche? No entiendo nada. Pensaba mientras llegábamos a nuestro destino.

-Ya hemos llegado- Dice la pelirroja aparcando el coche. ¿Quieres pasar?- No sabía si hacerle caso o no.

-Mmmm... pasaré si me dices por qué estabas llorando- Intenté negociar

-¿No me dejarás en paz hasta que te lo cuente, eh?- Dio un susupiro y empezó a contar -Digamos que mi... pareja y yo... hemos dejado todo el piso tirado, haciendo un tipo de... actividades. Y el casero ha venido justo en ese momento. Total, me ha echado del piso, y mi pareja me ha dejado, solo me quería para esas... actividades- Me quedé perpleja.

-Wow, eso sí es un día de mierda- Estaba pensando en esas clases de "actividades" que hicieron para tirarlo todo. Me sonrojé al pensarlo.

-¿Estás sonrojada? ¿Por qué?- Quería morirme, me ha pillado.

-N-No... No es nada- Beca, tonta, eres tonta. Pensaba.

-Por cierto... no sé tú nombre. Me has ayudado, has hablado conmigo y aún no sé ni tu nombre- Es verdad, no había pensado en eso. Ni siquiera la conozco.

-Oh, sí, claro, Beca. Me llamo Beca Mitchell- Esta chica me hace algo, no sé el qué.

-Beca...- Susurró, eso me hizo estremecerme. -Me gusta ese nombre. Yo soy Chloe, Chloe Beale- Volvió a poner esa sonrisa, esa que me pone tan nerviosa.

-Ahora... Si que pasaré a tu... casa, o donde sea que esto.

-Oh, claro, es la casa de un amigo, bueno, tiene bastante dinero y se ha ido de viaje un buen tiempo, me ha dicho que podía quedarme aquí- Sonaba emocionada.

-Bien, pues veamos qué casa tiene este amigo tuyo- Dije mientras entraba en la casa, detrás de esta pelirroja, llamada Chloe.