Angeles, demonios y yo (TERMINADA)

CAPÍTULO 15. ÉL, ADAM

Me acaba de decir que le gusto. ¡Ay! ¡Esto no es bueno! La he cagado, le he enseñado la parte buena de mí y se ha enamorado de quien no tocaba. Cas tenía razón, le gusto. No se que representa que tengo que hacer. Si mostrarle como soy yo en realidad o no hacer nada y que se le pase. Creo que lo mejor es darle espacio. Sólo llevamos un semana de escuela y ya le gusto, sabe que la necesito para que me haga un favor ...

- Adam, enseña tu DNI, tú y Nico sois las únicos que tiene más de dieciséis años y sólo que los enseñéis vosotros ya nos dejarán entrar.- No me acordaba, que ellas aún tienen quince años y no pueden entrar. Busco mi DNI y le enseño al portero mientras le digo que ellas también van conmigo. Compramos las entradas y entramos. El lugar es grande y oscuro. Sólo las luces fluorescentes de la bola de discoteca y iluminan parcialmente el local. Si pierdo de vista un segundo Judith me costará mucho encontrarla y no tengo su número de teléfono. Saco el móvil, pero ella está hablando con Nico de nuevo.

- Perdonad que interrumpa, pero me gustaría tener vuestros números de móvil por si nos perdemos por aquí y no nos encontramos.- Digo gritando. Pido el de Nico también para no quedar mal, además en un futuro tal vez me sirva.

- El mio es 620314998.-Dice Judith.- Y el de Nico es 664688610.- Se que lo hace para darme rabia, pero yo hago como si nada y les y pregunto.- ¿De qué hablabais?

- De Owl City. A Nico también le encanta y ahora le iba a preguntar si quiere venir conmigo al concierto.- Mira a Nico y él le sonríe.- Adam, me podrías hacer un favor y traernos algo para beber.- Me dice Judith .

- ¿Perdona? - Digo yo. No se que le pasa, desde que estamos aquí que está enfadada conmigo. Creo que tendré que explicarle toda la historia.- Judith, tenemos que hablar, de todo.

Me mira con cara rara y me sonríe. Niega con la cabeza y tira de la camiseta a Nico hasta el medio de la pista de baile. La gente los rodea y los pierdo de vista.

- Eh, Adam, quieres bailar.- Lo que me faltaba la pava de la Luz pidiéndome para bailar. Veo que Judith nos mira entre toda la gente.

- Si, claro.- Vale, que me estoy aprovechando de ella, pero así tal vez vendrá a hablar conmigo. Llevo mucho tiempo sin bailar con una chica, y no se cómo quedará esto.

Luz me lleva hasta el lado de Judith y Nico, que ahora hablan, y comienza a mover el culo. La miro y ella me sonríe. ¿Qué hace? Yo lo cojo por los brazos y la giro de cara a mí.

- ¿Qué te pasa? - Me grita en la oreja.- ¿Estás bien? - Giro la cabeza y miro como  Nico y Judith se sientan en uno de los reservados cogidos de la mano. Judith ríe.- Adam, será mejor que te sientes y descanses.- Luz me coge de la mano y me lleva hasta la barra donde hay taburetes.

- Luz, me encuentro bien de verdad, simplemente estoy cansado ...

- Simplemente tienes envidia.- Suelta como si nada.- Adam, se te nota mucho. Y a Judith también. Ambos os gustáis mutuamente, pero a Judith le está empezando a gustar Nico también.

- Luz, sabes muchas cosas ....- Le digo yo.

- Adam, tengo quince años, he salido con muy chicos y me han gustado mucho chicos. Y he pasado muchas veces por lo que ahora está pasando Judith, y te digo, y no te lo digo por fastidiar, que si continúas así, se enamorará de Nico. Así que ve y dile lo que sientes o lo hará primero Nico.- Me mira a los ojos y me sonríe, luego se levanta y va hacia Laura, Queralt y Sara. Me levanto del taburete y voy hacia el reservado. Cuando llego me siento junto a Judith y ella me mira.

- ¿Sabes qué Adam? -Dice triunfante.- Nico vendrá conmigo al concierto de Owl City.- La miro y luego miro a Nico.

- Judith, ¿Quieres algo para breber?-Dice Nico levantándose. Judith niega con la cabeza y Nico desaparece entre la multitud.

- Adam, ya está. Basta. Para. Se acabó eso de mirar mal a todos. Llevo una semana de escuela y ya me has hecho enfadar, avergonzarme, sentirme mal y sólo te falta hacerme llorar.- Se que quiere seguir hablando pero yo la corto.

- Te olvidas que te he hecho reír y en muchas ocasiones feliç.- Le digo yo sonriendole.- Se que sólo llevas una semana de escuela pero lo que te propongo yo es simplemente que me ayudes. No quiero aprovecharme de ti y necesito saber si quieres saber la verdad de todo o quedarte como estás.

Se me queda mirando y luego baja la cabeza.

- Adam, quieres que te ayude, ¿no?, pues yo te ayudo. No me preguntes más si estoy segura, porque lo estoy. Pero cuando ya te haya ayudado quiero que me dejes en paz, ¿De acuerdo?

Le cojo la cara con las manos y le hago mirarme a los ojos.

-Judith, Si me ayudas tu vida cambiará. No volverás a ver a tu familia como antes, ni a tus amigos, ni siquiera a mí o Nico. Lo siento, pero déjame que insista por última vez. ¿Está segura?

Traga saliva me mira a los ojos y se acerca a mí.

- Si.