No se que hacer. La he liado. ¿Qué pensará de mí? ¿Cuánto tardará en despertar? Las preguntas hierven en mi cerebro. ¿Dónde estoy? Analizo el lugar. Estamos en un bosque lleno de árboles. Hay mucho matorrales y no hay ningún camino. En el claro en el que estamos, parece que no haya pasado nadie desde hace siglos. No se por donde hemos venido. Cuando he visto a Cas cruzando el callejón, le he esquivado y he sentido como Judith aflojaba las manos de mi torso. Se había desmayado y ahora todavía lo está. Con una mano he soltado la moto para cogerla a ella y que no cayera y con el otro he seguido conduciendo. He estampado toda los rodilla derecha en la pared en el momento que venía otro coche de frente y casi caigo de la moto, por suerte he conseguido poner las manos de Judith en los bolsillos de mis pantalones y he tenido unos segundos de control. Luego las manos le han resbalado y casi se cae, así que he tenido que soltar la moto y cogerla. La moto ha chocado contra la pared y yo he tapado el cuerpo de Judith tanto como he podido para que no se hiciera más daño. Después me la he llevado aquí. No era lo más sensato, pero no quería llevarla al hospital. El resultado: tiene un corte bajo el ojo muy largo y fondo y el ojo hinchado. He hecho lo que he podido para intentar que pare de sangrar y al final he optado por pegar un pañuelo de papel, (la he sacado de su mochila) bajo el ojo. Lo sé, soy un imbécil, y tengo pocos recursos. Las gafas han quedado destrozadas, por suerte en su maleta he encontrado unas de repuesto, y yo pensando que llevaría compresas, un cepillo y colonia o cosas de este tipo y no, lleva las gafas, el móvil, el monedero, las llaves de su casa y pañuelos de papel. Los brazos los tiene con rasguños y las piernas con cortes. Mi resultado: un brazo roto, un corte que llega de la rodilla al tobillo y donde se puede ver el hueso, en la espalda me quedará marca, allí donde antes había la mitad de la columna vertebral, ahora tengo un agujero causado para el manillar derecho. La cabeza es lo que me hace más miedo. Me falta media seja ya que tengo un corte que va desde la oreja hasta el medio de mi cabeza y no para de sangrar. Podría invocar a Cas, pero que si la invoco ganará él y le explicará todo. Miro el reloj. Son las seis y media. Aún quedan cuatro horas y media para las diez. Tengo tiempo de hacer algo. Lleva un cuarto de hora desmayada. Invoco a poca magia, la que se invocar yo y le curo un poco el corte de bajo el ojo, las consecuencias son que al cabo de unos días llevará todo el ojo negro. Pero creo que no le importará mucho. Después de hacer todo lo que puedo hacer por ella queda un poco mejor. Le he curado todas las heridas de las piernas y de los brazos y he conseguido arreglar los su vestido. Ahora como nueva. El ojo sólo lo tiene rojillos y un rasguño pero no se le nota mucho. Ya le contaré más tarde todo. Ahora tengo que empezar a curarme yo. Tardo media hora en hacer que el corte de la pierna se me cierre, y veo venir que las consecuencias comportarán dos semanas con la pierna llena de vendaje y toda negro. Es lo que tiene la magia negra. Al brazo no le puedo hacer nada. Está roto, tendré que esperar a cuando llegue a casa. En la espalda, he conseguido cerrar un poco el agujero, pero sigue siendo más grande que una pelota de ping-pong. A la cabeza no se que hacerle, así que he cogido pañuelos de Judith y me los he enganchado por la cara. Debo parecer más idiota que normal.
Intento ponerme la camiseta, pero me duele mucho la espalda así que decido no ponermela. Odio ser un humano. En estos diecinueve años de vida humana que llevo me he hecho daño muchas veces, pero nunca tanto exageradamente. Ya no me acuerdo de mi otro cuerpo. Aquel que podía atravesar un hacha entera y continuaba igual. Un ruido me saca de mis pensamientos y alzo la cabeza para contemplar como Judith intenta levantar. Lleva más de cuarenta minutos haciendo una cabezadita, y se que aún le duele la cabeza, pero se ha de levantar ya. La ayudo a incorporarse a duras penas, ya que mi espalda me pide descansar y ella todavía está afectada, y una vez ya sentada, abre los ojos como platos y grita. ¿Grita por mí? Su cara de susto mira mi barriga, retrocedo y me miro de arriba abajo y entonces me doy cuenta de un pequeño gran detalle.
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Angeles, demonios y yo (TERMINADA)
Mystery / ThrillerÉl o él. Empiezo cuarto de la ESO y conozco a dos chicos muy diferente.El oscuro pasado de uno contrasta con la preciosa vida del otro. Aún así los dos guardan secreto cerrados con llave en sus corazones y un mismo objetivo:yo. ¿Qué porqué yo? No l...