Hola, soy una de esas pequeñas lucecitas que iluminan tu camino cuando estás perdido, esas que aparecen en los lugares más inesperados e intentan crecer cada día.
Cuento esto para no ser olvidada, no se me está permitido decir, si soy hombre o mujer, pero viendo que estoy en esta peligrosa situación lo haré, soy una luz femenina, soy tan pequeña que para darte cuenta de mi silueta debes prestarme mucha atención, lo que no hubiera querido ese día.
Yo solo jugaba en el agua, había aumentado mi forma para disfrutarla más, pero me equivoqué, toda mi espalda se cubrió de negro, me descubrió, "él" me atrapó.
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Casada con la oscuridad
KurzgeschichtenUna novela en pequeños párrafos donde la oscuridad y la luz contarán su versión de la historia, ¿pero por qué te lo estoy contando yo? Ellos mismos pueden contártelo. Narra Luz. ―La oscuridad, la oscuridad que me persigue, me he casado con la oscuri...