¿Recuerdas cuando me tumbé aquella noche en el claro, a ver las estrellas, y te echaste a reir? ¿Cuando giré la cara para que nadie viese que estaba llorando, y tú me miraste con compasión? ¿Cuando me dejé caer ladera abajo y viniste con toda la preocupación? Beso tras beso, al final perdí la cabeza.
Perdí la cabeza, el corazón, la sangre y las ganas, es verdad, sí, pero, eh... No te preocupes, no te guardo rencor. Ni siquiera un poquito. En realidad todo fue culpa mía.
Tuve la esperanza alguna vez de ser feliz, pero el otoño se llevó todo vestigio de verdor.
Ya no me siento junto a la ventana para ver si vienes a salvarme. Ya no me pregunto si vendrás, porque ya me he autoconvencido de la realidad.
En fin, quizá fue mejor... Quizá yo no estaba hecha para acompañar a Batman, si no a alguien que comprendiese mejor mis locuras. Yo al menos puedo decir, que he encontrado a mi Joker. Espero que encuentres a alguien que te entienda y te quiera tanto.
Cuídate, sé feliz.
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Cuando las luces se apagan
CasualeCuando las luces se apagan, una llama en su mente se enciende. Y es entonces cuando todo arde. [Minirelatos y frases]