¡Otra Vez No! Pausada

1. "Quiero verte intentarlo."

Desperté con los rayos de sol entrando por mi ventana, con el mejor humor del mundo. Mientras sonreía...

Nah mentira. Mi bella hermana -nótese el sarcasmo- me despertó.

-¡CHANEL HAMILTON! ¡TE JURO QUE SI NO MUEVES TU TRASERO EN ESTE INSTANTE VOY A IR YO MISMA Y TE SACARÉ DE LA CAMA A PATADAS!

Los gritos de Nathalia resonaron por toda mi habitación. Esa mujer si que grita.

Abracé con fuerza mi osito de peluche mientras sentía dormirme de nuevo...

-¡CHANEL!

Mis ojos se abrieron de golpe, gruñí en silencio y respondí algo dormida.

-¡SI SI YA VOY!

Me senté con toda la pereza del mundo en la esquina de la cama para luego mirar un zapato que estaba a un lado de esta.

¿Ese no es el zapato que estaba buscando el otro día...?

-¡TE LLAMO UNA VEZ MÁS Y VOY CON AGUA HELADA!

Aquél grito hizo que reaccionará levantándome finalmente de la cama como si me hubieran dado un empujón.

-¡QUÉ YA VOY! -grité una vez más.

Me removí los ojos con mi puño y me fui al baño de mi habitación.

Me quité mi pijama el cual era una camiseta de tirantes y un simple short. Los arroje en algún lugar del baño y entré en la ducha.

Al salir me puse una camisa suelta de tirantes color blanca que tenía la bandera de Inglaterra, luego me puse unos shorts tiro alto. Me coloqué unas vans negras. Me solté el cabello y me maquille, delineador, rímel, brillo. Lo usual.

Me di un ultimo vistazo en el espejo, satisfecha salí para ir a la cocina.

Nathalia se encontraba ahí cocinando y al mismo tiempo bailando al ritmo de la canción welcome to the jungle de guns 'n' roses.

Ella y yo tenemos los mismos gustos musicales, e iba a dejar la canción sonar. Pero mi humor no es muy bueno hoy, y además al intentar hablar no me escuchó nada y fui forzada a apagar las bocinas. Ella siguió cantando por un momento, pero al ver que ya no había música a su alrededor dejó de cantar y de bailar como si le hubieran presionado un botón de pausa inexistente en su cuerpo.

-¡Hey! Iba en la mejor parte. -Sé quejó y puso en la mesa lo que parecía ser mi desayuno. -¿Cómo te sientes? -preguntó algo entrecortada por el hecho de que hace un momento estaba cantando y bailando.

Justo ayer se me había quitado una terrible gripe que me venía dando desde hace una semana, por lo que tuve que faltar la primera semana de clases (por supuesto yo no me quejé)

-Bien. -Respondí desganada, sinceramente no quería pronunciar palabra hoy. La gripe me había dejado de mal humor. Como dije anteriormente.

Me senté y comencé a devorar mi desayuno que era unas tostadas con huevos y tocino.

-¿Porque estás tan de mal humor? -Interrogó Nathy, con aire de preocupación.

Me encogí de hombros.

-Gripe. Eso es lo que pasa.

Vi que su boca se abrió para hablar pero su teléfono la interrumpió sonando, se secó las manos en un pañito cercano, agarró el teléfono y lo descolgó.

-¿Si?.... ¿Ahora?.... bien, ya voy para allá. -Colgó y me miró. -Me necesitan en el trabajo.

Ella dudó por un momento entre hablar o quedarse callada. -Las llaves de tu moto están en mi habitación. -Dijo rápidamente.